‘Policías de mercado’ en la Boquería para evitar los excesos de los turistas

El Ayuntamiento forma a agentes cívicos para evitar glomeraciones y conductas que impiden a los clientes comprar en el icónico recinto

Protesta en La Boqueria en enero.Lluís Gené (AFP)

El icónico mercado de barcelonés de la Boquería cuenta desde hoy con un cuerpo municipal cuya misión es la de evitar que los usuarios (sobre todo los turistas) corran, griten, se tumben en los pasillos, causen aglomeraciones, hagan fotografías a los productos y, en definitiva, impidan a los clientes comprar.

La concejal de Comercio y Mercados en el Ayuntamiento de Barcelona, Montserrat Ballarín, ha anunciado que un equipo de agentes cívicos se encargarán de sensibilizar y “garantizar la...

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El icónico mercado de barcelonés de la Boquería cuenta desde hoy con un cuerpo municipal cuya misión es la de evitar que los usuarios (sobre todo los turistas) corran, griten, se tumben en los pasillos, causen aglomeraciones, hagan fotografías a los productos y, en definitiva, impidan a los clientes comprar.

La concejal de Comercio y Mercados en el Ayuntamiento de Barcelona, Montserrat Ballarín, ha anunciado que un equipo de agentes cívicos se encargarán de sensibilizar y “garantizar las convivencia y el respeto en el mejor mercado del mundo”. Esta es una de las medidas que ha adoptado el Consistorio de Barcelona con la intención de “recuperar la Boquería para el vecindario y la ciudad, promover la venta tradicional y corregir las disfunciones derivadas del exceso de visitantes que acceden al recinto”.

Tres agentes cívicos se encargarán de controlar el mercado por turnos. Según la concejal siempre habrá dos agentes patrullando ya que solo lo harán los viernes y sábados de abril a octubre desde las 8.30 a las 20.00. “Creemos que es un número correcto, alrededor de toda la Sagrada Familia hay solo seis agentes”, defiende Ballarín.

Los agentes cívicos, además de facilitar información, evitarán aglomeraciones que obstruyan los pasillos y que las personas se paren delante de las paradas impidiendo que los clientes compren. Su función no acabará aquí sino que tendrán que velar para que no se manipulen los alimentos expuestos por pura curiosidad o para hacer fotografías, también vigilarán que nadie se siente en el suelo a descansar o comer o que los grupos de despedidas de soltero u otras actividades lúdicas griten en el interior del mercado.

Además de los agentes cívicos desde el 1 de abril y hasta el próximo 31 de octubre se ha ampliado el horario de vigilantes del mercado de manera que el recinto dispone de este servicio desde las 8.00 hasta las 20.00 del viernes y desde las 8.00 a las 19.00 del sábado. Estos vigilantes impiden que tanto el sábado como el domingo entren grupos organizados de más de 15 personas al mercado. También se ha incrementado el sistema de videovigilancia del recinto incorporando cinco nuevas cámaras en la plaza de la Gardunya.

El Ayuntamiento de Barcelona quiere también hacer más cómoda la compra y está llevando a cabo acciones para liberar espacios rescatando y trasladando paradas para que se amplíen los espacios y se facilite el paso. Desde 2016 el Ayuntamiento ha recuperado licencias de 24 negocios y se han trasladado 19 del total de 225 negocios que hay en la Boquería. El Consistorio asegura que las próximas semanas se realizarán actuaciones que afectarán a cinco negocios más y permitirán que los próximos meses tres islas de paradas se podrán liberar para esponjar los pasillos y facilitar las compras de los vecinos.

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