La Policía Municipal dona los alimentos de los tres bares cerrados
Los locales fueron cerrados por el equipo de Manuela Carmena al encontrar irregularidades contables en las ventas y suministros
La Policía Municipal de Madrid ha donado los alimentos que estaban almacenados en los tres bares del cuerpo que se clausuraron hace 10 días. Estos locales, que funcionaban desde hacía unos 30 años y que se caracterizaban por tener unos precios muy bajos, se encontraban en el escuadrón de caballería (Puente de los Franceses), en la unidad de atestados de la calle de Plomo y en la unidad especial de tráfico (ambas en Arganzuela).
La donación se ha hecho al Banco de Alimentos, situado en la c...
La Policía Municipal de Madrid ha donado los alimentos que estaban almacenados en los tres bares del cuerpo que se clausuraron hace 10 días. Estos locales, que funcionaban desde hacía unos 30 años y que se caracterizaban por tener unos precios muy bajos, se encontraban en el escuadrón de caballería (Puente de los Franceses), en la unidad de atestados de la calle de Plomo y en la unidad especial de tráfico (ambas en Arganzuela).
La donación se ha hecho al Banco de Alimentos, situado en la carretera de Colmenar Viejo, al tratarse de una institución sin ánimo de lucro. En concreto, se aportaron 187 litros de leche, 47 kilos de chorizo, 30 de salchichón, 68 de azúcar, 42 de queso y casi 30 de café, además de latas de sardina y de caballa, botes de conservas de fabada o lentejas, además de cajas de zumos y de refrescos.
Los bares fueron clausurados por el concejal de Salud, Seguridad y Emergencias, José Javier Barbero, tras comprobar que no había una contabilidad normalizada y que se habían detectado ciertas irregularidades, como la existencia de una supuesta caja B. También se desconocía la atribución presupuestaria oficial y si existían partidas de entrada y salida de capital, según el concejal y el director general de la Policía Municipal, Andrés Serrano.
Fuentes del cuerpo explicaron que en esa caja tan solo recogía los beneficios obtenidos a lo largo de esta treintena de años por las ventas de cafés y bocadillos. El concejal entregó toda la documentación que encontraron a la Fiscalía de Madrid. Hasta el momento no ha habido ninguna respuesta por parte del ministerio público.