Noche tranquila y fresca para recibir el verano

Se despidió la primavera más que de lo que saludó el verano en una noche de Sant Joan especialmente tranquila en Barcelona. Los nubarrones que amenazaron el cielo de Barcelona desde bien entrada la tarde y las frescas temperaturas que se hacían sentir a la orilla del mar, despejaron levemente los abarrotados arenales. Alrededor de 62.000 personas, según el Ayuntamiento, asistieron a la verbena de Sant Joan en alguna de las playas de la ciudad, 8.000 menos que el año pasado.

Sin embargo, la noche más corta del año no claudicó al tiempo y se alargó más allá de los primeros rayos de sol. P...

Se despidió la primavera más que de lo que saludó el verano en una noche de Sant Joan especialmente tranquila en Barcelona. Los nubarrones que amenazaron el cielo de Barcelona desde bien entrada la tarde y las frescas temperaturas que se hacían sentir a la orilla del mar, despejaron levemente los abarrotados arenales. Alrededor de 62.000 personas, según el Ayuntamiento, asistieron a la verbena de Sant Joan en alguna de las playas de la ciudad, 8.000 menos que el año pasado.

Sin embargo, la noche más corta del año no claudicó al tiempo y se alargó más allá de los primeros rayos de sol. Pasadas las 6 de la mañana, aún con en retrueno de los últimos petardos en la playa de la Barceloneta, más de 300 operarios y medio centenar de vehículos del Ayuntamiento ponían en marcha el dispositivo de limpieza municipal para dejar los arenales impolutos antes de las 10.00 de la mañana. Acompañados por agentes de la Guardia Urbana y los Mossos d’Esquadra, los trabajadores recogieron más de 62 toneladas de basura. “Llevo 33 años trabajando aquí y siempre es más de lo mismo. Muchísima basura, sobre todo en la arena; aunque lo más difícil siempre es sacar a los últimos rezagados”, comentaba un operario de limpieza desde el paseo marítimo. Antes de lo previsto, a las nueve de la mañana, las playas ya estaba listas para el baño.

A parte del frío y la menor afluencia de público, los servicios de emergencia de la Generalitat recibieron cerca de 2.500 llamadas en toda Cataluña, sobre todo por pequeños incendios de vegetación y mobiliario urbano causados por los petardos. Por su parte, el Departamento de Salud confirmó que los equipos médicos atendieron a 206 personas, la mayoría por quemaduras y afectaciones oculares de carácter débil, aunque también se produjeron una treintena de traumatismos y amputaciones.

El operativo puesto en marcha por los Mossos d’Esquadra, que destacó a 3.200 efectivos por toda la ciudad, se saldó con ocho detenidos tras una tumultuosa pelea en la zona de la Barceloneta a primera hora de la mañana.