Bildu fuerza al PNV a explicar los desfases en el coste de las carreteras
Olano, Goia y Jauregi deberán aclarar en las Juntas Generales el sobreprecio de las obras
Bildu y el PNV volverán a verse las caras en las Juntas Generales de Gipuzkoa en la particular y agria disputa que mantienen ambas formaciones por los millonarios desfases presupuestarios en la construcción de carreteras cuando la Diputación estuvo en manos del PNV y Hamaikabat. La coalición soberanista, ahora al frente de la institución foral, ha encontrado un filón para desgastar al principal partido de la oposición en esta provincia, pese a que fue su aliado para aprobar los presupuestos forales ara 2012.
Al calor de un informe reciente del Tribunal de Cuentas del País Vasco, conocid...
Bildu y el PNV volverán a verse las caras en las Juntas Generales de Gipuzkoa en la particular y agria disputa que mantienen ambas formaciones por los millonarios desfases presupuestarios en la construcción de carreteras cuando la Diputación estuvo en manos del PNV y Hamaikabat. La coalición soberanista, ahora al frente de la institución foral, ha encontrado un filón para desgastar al principal partido de la oposición en esta provincia, pese a que fue su aliado para aprobar los presupuestos forales ara 2012.
Al calor de un informe reciente del Tribunal de Cuentas del País Vasco, conocido esta semana y que censura los altos sobrecostes en la contratación de carreteras durante el mandato del PNV en 2009, el grupo juntero de Bildu anunció ayer que ha solicitado la comparecencia del ex diputado general Markel Olano, el exdiputado de Carreteras Eneko Goia y el exdirector de Bidegi Borja Jauregi, todos ellos del PNV, ante el Legislativo provincial para que detallen las citadas desviaciones económicas.
Para justificar esta decisión, el juntero de Bildu Iban Asenjo, acompañado por Idoia Ormazabal y Enrique Martínez, manifestó que el Tribunal de Cuentas considera “muy mala” la gestión de Bidegi, como se refleja “no solo en la deuda o en los desfases, sino también en ciertas anomalías en el proceso de adjudicación de algunas de sus obras”.
El emplazamiento hecho por Bildu tuvo una respuesta inmediata por parte del PNV. Este partido indicó que sus representantes acudirán “gustosamente” a dar explicaciones de su gestión: “Estamos muy satisfechos de la labor realizada al frente de Bidegi y de la moderna red de carreteras de la que disponemos. Ha sido una verdadera revolución y un trabajo ímprobo que reivindicaremos allí donde vayamos”.
Los excargos del PNV acudirán "gustosamente" a explicar su gestión
El PNV advierte de que aprovechará su asistencia a las Juntas para “denunciar las manipulaciones de Bildu”, al que acusa de pretender “tapar su incapacidad de gestión y poner en serio riesgo el futuro de las carreteras del territorio”.
Estos dos partidos ya libraron una sonada polémica cuando la titular de Infraestructuras Viarias y portavoz foral, Larraitz Ugarte, denunció el mes pasado que durante la pasada legislatura se pagaron sobrecostes por más de 270 millones en obras de carreteras de la autopista AP-1 y el Segundo Cinturón donostiarra. El PNV argumentó en su defensa que todas las modificaciones de los contratos que dieron lugar a esos sobrecostes se hicieron de acuerdo con la ley y fueron aprobados por el consejo de administración de Bidegi con el respaldo de todos los partidos.
Asenjo pidió ayer “valentía” al PNV y que “no tenga ningún miedo a informar con todo detalle” de los desfases presupuestarios.
Por otro lado, alcaldes de Bildu, entre ellos el regidor donostiarra, Juan Karlos Izagirre, exigieron ayer poner en marcha de forma “urgente” un nuevo modelo de financiación municipal que permita paliar la grave situación económica que atraviesan por el “despilfarro” promovido por el PSOE, PNV y PP.
La coalición independentista pidió cambios en la Ley de Aportaciones y reivindicó la participación de los municipios en la redacción de la Ley Municipal en la que, a su juicio, hay que “dejar aparte los provincialismos”. También criticó “el silencio de Eudel y la Federación Navarra de Municipios”, lo que Bildu interpretó como el intento de no hacer cambios en el actual sistema.