‘Puan’, una oda a la universidad pública ante la sombra de la ultraderecha en Argentina

La comedia, situada en la Facultad de Filosofía de la Universidad de Buenos Aires y protagonizada por Marcelo Subiotto y Leonardo Sbaraglia, estrena en su país tras triunfar el festival de San Sebastián

Los protagonistas, Leonardo Sbaraglia y Marcelo Subiotto, en una imagen promocional de la película.Pasto & Pucará Cine

Mientras Argentina entra en la recta final de una elección presidencial llena de broncas, este jueves se estrena en sus cines una de las películas del año, una comedia sobre uno de los lugares que más enfurece a la ultraderecha que ha hecho de sus banderas poner fin a la educación pública: la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires. Puan cuenta un momento en la vida de Marcelo Pena, profesor de filosofía que debe dar una...

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Mientras Argentina entra en la recta final de una elección presidencial llena de broncas, este jueves se estrena en sus cines una de las películas del año, una comedia sobre uno de los lugares que más enfurece a la ultraderecha que ha hecho de sus banderas poner fin a la educación pública: la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires. Puan cuenta un momento en la vida de Marcelo Pena, profesor de filosofía que debe dar una pelea inesperada por el lugar que le correspondía en justa herencia, la titularidad de la cátedra de su mentor recientemente fallecido. Ganadora el fin de semana pasado de los premios al Mejor Guion y Mejor Actor en el festival de cine de San Sebastián, la película dirigida y escrita por María Alché y Benjamín Naishat promete un viaje tragicómico por la vida de un hombre derrotado en la mediana edad, un vistazo a uno de los micromundos míticos de Buenos Aires, y una defensa inesperada de la universidad pública como comunidad intelectual y afectiva.

Marcelo Pena, un profesor que paga sus cuentas a duras penas interpretado por el galardonado Marcelo Subiotto, deberá competir por la cátedra de Filosofía Política con Rafael Sujarchuk, representado por Leonardo Sbaraglia, un antiguo compañero de estudios que acaba de volver al país tras triunfar en Europa, que se codea con la élite intelectual del mundo y es una estrella en las redes sociales. Mientras Marcelo atraviesa en silencio el luto por su mentor e intenta llegar a fin de mes dando clases particulares a señoras de clase alta de la ciudad, Rafael acapara las miradas presumiendo su sueldo en euros, su perfecto alemán y una novia de la farándula (interpretada en una breve aparición por Lali Espósito). Mientras Pena y Sujarchuk concursan por la cátedra, la facultad empieza a perder fondos y amenaza con cerrar.

María Alché, premiada por el guion de la película en el festival de cine de San Sebastián.Pasto & Pucará Cine

Situar una tragicomedia taquillera en la academia puede sonar extravagante en cualquier lugar del mundo, pero en Buenos Aires se ha esperado su estreno durante meses. Puan es una calle del barrio de Caballito, en el centro geográfico de la capital argentina, y el apodo de una Facultad centenaria de la Universidad de Buenos Aires, cuna de presidentes fundadores de la patria y de escritores de moda, ubicada desde hace medio siglo en su número 480. Con pantallazos al compromiso de sus profesores, la militancia política de sus centros de estudiantes, sus protestas con cortes de calle para clases públicas y su caos administrativo de sueldos muchos meses impagos, Alché y Naishat logran un retrato profundo y desenfadado de uno de los centros intelectuales del país. También, sin tratarlo –el guion tiene al menos cuatro años–, un argumento a favor de la comunidad que construye la universidad pública, puesta en jaque por la ultraderecha que lidera las encuestas para las elecciones del próximo 22 de octubre.

“En la película aparecen discusiones internas, competencias, peleas por cargos en la universidad pública… pero no hay peleas cuando de afuera se percibe la posibilidad de que esto se desmantele. No hay duda de ninguno de los integrantes de esa comunidad sobre qué es lo más importante: la vocación y la educación pública”, cuenta Subiotto, ganador de la Concha de Plata en San Sebastián, en conversación con este diario. Para Sbaraglia, su coprotagonista, “Puán es un bastión de muchas cosas que no se deben perder”. “Muchos derechos que hoy tenemos y que creemos que están dados no se sostienen sin educación, sin formación, legado, y lucha”, dice el actor. “El avance de la ultraderecha puede ser muy dañino sobre cosas que damos por hecho. Y no lo son, son cosas que hemos conseguido con base en luchas que han durado años. Por eso es importante que existan películas como Argentina, 1985, y Puan, que inevitablemente dialoga con ella desde otro lugar, desde otro punto de vista, con otro lenguaje”.

Es la primera comedia para sus dos directores. Alché trabajó primero como actriz con un recordado debut en La Niña Santa (2004) de Lucrecia Martel y saltó a la dirección con el drama Familia sumergida (2018), Naishat se había dedicado hasta ahora al drama que ahonda las crisis y violencias de Argentina con Historia del miedo (2014), El Movimiento (2015), y Rojo (2018). La combinación de recursos ha resultado en un retrato acabado y sin indulgencias de una cara de Buenos Aires, una película ideal para ver el fin de semana antes del último debate presidencial del domingo.

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