Más de 40 millones de personas están en riesgo de perder los cupones de alimentos del SNAP por el cierre de Gobierno
El programa cuesta aproximadamente 8.000 millones de dólares al mes para funcionar en todo el país y nunca ha dejado de realizar un pago mensual por un ‘shutdown’


El cierre de Gobierno se ha prolongado hasta ser el segundo más largo de la historia. Con ello, aumenta la incertidumbre sobre uno de los programas de protección social más importantes del país: el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP), que ayuda a aproximadamente 42 millones de estadounidenses que dependen de él cada mes para poder comer. Las autoridades advierten que las prestaciones podrían suspenderse o retrasarse considerablemente en noviembre si el Congreso y la Casa Blanca no llegan pronto a un acuerdo sobre la financiación.
¿Se detendrá SNAP?
Al momento, no parece haber una solución clara que termine con el cierre del Gobierno. A medida que las agencias agoten sus reservas, el Departamento de Agricultura (USDA), que administra el SNAP a través del Servicio de Alimentación y Nutrición, ha advertido a los Estados que el Gobierno federal pronto tendrá “fondos insuficientes” para continuar con los beneficios en los niveles actuales.
Estados como Texas, California, Nueva York, Minnesota, Illinois y Colorado han emitido alertas públicas y advierten a los residentes que los pagos del SNAP de noviembre podrían retrasarse, reducirse o suspenderse por completo. En Texas, las autoridades han comunicado a millones de beneficiarios que las prestaciones se suspenderán si el cierre se prolonga más allá del 27 de octubre. El gobernador de California, Gavin Newsom, dijo que su Estado ha comenzado a notificar a los condados que es posible que no se paguen las prestaciones de noviembre, y calificó la interrupción como “devastadora”, en especial debido a que sucede cerca del Día de Acción de Gracias.
“Si el presidente Trump y el Congreso no reabren el Gobierno federal antes del 23 de octubre, o no toman medidas para financiar las prestaciones, es probable que las prestaciones de CalFresh (la versión californiana de SNAP) se retrasen en noviembre”, advirtió. Alrededor de cinco millones de californianos dependen de este programa financiado íntegramente con fondos federales. “Millones de niños y personas mayores podrían perder el acceso a los alimentos que necesitan para sobrevivir”.
Se acaba la reserva
El SNAP ayuda a las personas y familias de bajos ingresos a comprar alimentos, proporcionándoles prestaciones electrónicas que pueden utilizarse en los comercios participantes. El programa cuesta aproximadamente 8.000 millones de dólares al mes para funcionar en todo el país, y nunca ha dejado de realizar un pago mensual debido a un cierre del Gobierno. Sin embargo, el fondo de contingencia del Departamento de Agricultura, una reserva destinada a mantener las prestaciones durante los déficits de financiación a corto plazo, solo cuenta actualmente con unos 6.000 millones de dólares, según las autoridades.
Esa brecha deja 2.000 millones de dólares en prestaciones sin financiar para noviembre. La secretaria de Agricultura, Brooke Rollins, ha reconocido que la agencia “se quedará sin dinero en dos semanas”. Sin embargo, algunos expertos creen que el USDA tiene más flexibilidad de la que ha reconocido.
Según un análisis del Centro de Prioridades Presupuestarias y Políticas, casi dos tercios de los fondos necesarios para noviembre ya están disponibles en el fondo de contingencia. El análisis sostiene que la Administración podría, y debería, liberar esos fondos inmediatamente, además de utilizar su autoridad discrecional para transferir recursos adicionales de otros programas de nutrición, tal y como hizo a principios de este mes para mantener a flote el programa para mujeres, bebés y niños (WIC).
“La Administración debe actuar con rapidez”, sugiere el informe, mientras apunta que la ley SNAP exige al secretario de Agricultura que reduzca las prestaciones o emita directrices a los Estados cuando los fondos asignados sean suficientes. A la fecha, esas directrices no se han emitido.
Cierre del gobierno
En el centro del cierre del Gobierno se encuentra la propuesta de gasto del presidente Donald Trump, que incluye recortes presupuestarios drásticos, entre ellos una reducción de 186.000 millones de dólares para el SNAP durante la próxima década.
Ante la incertidumbre, algunos Estados analizan si pueden cubrir temporalmente el déficit con fondos estatales, aunque la mayoría reconoce que carece de los recursos para hacerlo. Illinois y Nueva York ya han descartado utilizar fondos estatales para mantener el SNAP, y otros han señalado que cualquier medida provisional sería limitada.
El posible recorte afectaría a las poblaciones más vulnerables: niños, personas mayores y personas con discapacidad. A nivel nacional, alrededor de 16 millones de niños, ocho millones de adultos mayores y cuatro millones de personas con discapacidad dependen de las prestaciones del SNAP. Tan solo en California, casi dos tercios de los beneficiarios pertenecen a una de esas categorías.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
