Trucos y claves para escribir a gran velocidad textos en el ordenador
Atajos, asistentes de texto, el empleo de comandos de voz... se puede multiplicar la velocidad de escritura con unos sencillos pasos
Quien más, quien menos, se tiene que enfrentar de forma cotidiana a la redacción de un texto. No tiene por qué ser un documento extenso o un ensayo; en ocasiones, determinados correos electrónicos requieren de cierta extensión y aquí la tecnología puede ofrecer una ayuda determinante. De hecho, una vez que se dominan algunas de las herramientas que vamos a proponer a continuación, la manera en la que se generan textos puede cambiar de forma copernicana: se puede priorizar la velocidad y dejar que luego los asistentes enmienden los errores. Esto es: redactar a toda velocidad sin preocuparse de ...
Quien más, quien menos, se tiene que enfrentar de forma cotidiana a la redacción de un texto. No tiene por qué ser un documento extenso o un ensayo; en ocasiones, determinados correos electrónicos requieren de cierta extensión y aquí la tecnología puede ofrecer una ayuda determinante. De hecho, una vez que se dominan algunas de las herramientas que vamos a proponer a continuación, la manera en la que se generan textos puede cambiar de forma copernicana: se puede priorizar la velocidad y dejar que luego los asistentes enmienden los errores. Esto es: redactar a toda velocidad sin preocuparse de los fallos tipográficos y automatizar de manera supervisada su corrección.
¿Cómo se puede escribir a gran velocidad en el ordenador? Vamos a sugerir a continuación algunas herramientas y consejos para disparar la velocidad de escritura:
Asistentes automatizados de escritura
La irrupción de los ordenadores supuso un verdadero cambio de paradigma en el mundo de la escritura en todos sus ámbitos: atrás quedó aquella etapa en la que no se podían cometer errores con la máquina de escribir, lo que obligaba al periodista o escritor a ser muy escrupuloso en el proceso. Los ordenadores permitían algo que resultaba casi mágico: poder borrar una palabra, corregir una falta de ortografía o reeditar un texto. Pero la tecnología no descansa y es ahora el software quien toma el relevo en la innovación en la redacción de textos: los asistentes hacen el trabajo sucio de comprobar un texto en borrador y sugerir cambios. Y no, no nos referimos únicamente al clásico corrector de texto que subraya en rojo las faltas de ortografía, sino a sofisticados sistemas que, además de revisar los posibles errores, tienen en consideración la puntuación, si el párrafo es excesivamente largo, o si se repiten en exceso algunas palabras.
Uno de los más populares es LanguageTool, un proyecto en código abierto que, bien a través del navegador o bien mediante aplicaciones, realiza un análisis exhaustivo del contenido del texto y recomienda cambios. Como hemos apuntado con anterioridad, este tipo de herramientas va mucho más allá de las faltas de ortografía y tiene en cuenta además la reiteración de expresiones, frases excesivamente largas o bien propone sinónimos a palabras más vulgares. Tanto Microsoft como Google cuentan con herramientas similares en forma de extensiones para sus respectivos navegadores —Edge y Chrome— con las que explotan todo el poder de los algoritmos al servicio de una escritura de mayor calidad. En este sentido, Google acaba de anunciar una significativa mejora en su asistente de escritura para Google Docs, en la que, además de ofrecer unas sugerencias de texto más dinámicas, advierte de la existencia de lenguaje no inclusivo sugiriendo alternativas.
Dictar un texto
La otra manera de redactar textos realmente rápido consiste en utilizar la voz y es que todas las plataformas aplican sus sistemas basados en inteligencia artificial para escuchar, interpretar y redactar lo que se escucha a través del micrófono. Ahora, los sistemas son realmente inteligentes y con unos resultados sorprendentes. Lo único que tiene que hacer el usuario es adaptar los ritmos de escritura, puesto que, con el empleo de la voz, desaparecen las pausas mentales que se tiene al escribir y que dan oportunidad para pensar qué se va a escribir. Para comenzar el dictado en Windows, basta con pulsar la tecla con el logotipo de Windows junto con la H y comenzar a hablar y el sistema redactará el texto. En los Mac es necesario habilitar en primer lugar esta función en Preferencias del sistema/Teclado/Dictado; hecho esto, aparecerá en pantalla un pequeño micrófono que se puede activar justo antes del dictado. Conviene recordar que estos sistemas reconocen el lenguaje natural y se pueden indicar expresiones como “coma”, “punto” o “nueva línea” que se entenderán como comandos.
Aplicaciones que expanden el texto
Otra manera de enfocar la velocidad de escritura consiste en automatizar la redacción de textos que se repiten con frecuencia. No hace falta que estén relacionados con algún tipo de contenido, sino expresiones que se emplean habitualmente como “por favor”, “reciba un cordial saludo”, o incluso el número de DNI. El ahorro en tiempo puede ser considerable si el usuario evita tener que teclear todo el texto y esto es posible gracias a las aplicaciones que lo expanden. El principio es sencillo: sustituir las palabras que más se repiten por una serie de abreviaturas (por ejemplo, en lugar de “por favor”, teclear “pf”) y hacerlo creando bibliotecas personalizadas de comandos propios. Son varias las aplicaciones y extensiones de navegadores que pueden utilizarse para este objetivo, y una vez habituados a las mismas, el ahorro acumulado en tiempo es relevante.
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