Sotheby’s vende el código original de internet por 5,4 millones
La añeja casa de subastas se vuelca en la venta de criptoactivos y subasta a su vez una obra de Picasso ligada a un NFT que verifica su autenticidad
Tim Berners-Lee, padre de la World Wide Web, las tres WWW que permiten navegar por internet, ha vendido el código fuente original de una de las grandes creaciones de la historia de la humanidad por 5,4 millones de dólares. La casa de subastas Sotheby’s fue la encargada de llevar a cabo la venta del token no fungible (...
Tim Berners-Lee, padre de la World Wide Web, las tres WWW que permiten navegar por internet, ha vendido el código fuente original de una de las grandes creaciones de la historia de la humanidad por 5,4 millones de dólares. La casa de subastas Sotheby’s fue la encargada de llevar a cabo la venta del token no fungible (NFT, por sus siglas en inglés), es decir, como un archivo digital único, que otorga la propiedad de las 9.555 líneas de código escritas entre el tres de octubre de 1990 y el 24 de agosto de 1991 con las implementaciones de los tres lenguajes y protocolos inventados por Berners-Lee: HTML (lenguaje de marcado de hipertexto), HTTP (hipertexto protocolo de transferencia) y las URL (la dirección que identifica a cada página en internet). El NFT también incluye documentos HTML originales que instruían los primeros usuarios de la web sobre cómo utilizar la aplicación.
Esta subasta es el último ejemplo del interés que está suscitando la compraventa de activos digitales, recogidos en los llamados NFT. Estos bienes digitales únicos operan sobre la llamada blockchain y pueden usarse para comerciar con todo tipo de productos virtuales. Se encuentran fundamentalmente en seis sectores: compraventa de arte, sobre todo nativo digital; coleccionables (sellos como los de toda la vida, pero en formato digital); activos relacionados con videojuegos, como intercambios o armas para usar en títulos determinados; metaversos, es decir, compras en mundos digitales al estilo de la extinta página Second Life; deportes, sobre todo de fútbol, NBA y Fórmula 1; y utilities, una especie de cajón de sastre que incluye nombres de dominio o entradas con valor añadido a determinados eventos.
Sotheby’s es una de las casas de subastas que más activas se han mostrado en este incipiente negocio. “Todavía estamos en las primeras etapas de nuestra entrada en el mercado de NFT”, asegura a EL PAÍS Matthew Floris, portavoz de la compañía, “pero ya podemos percibir que está ganando impulso. El mercado del arte digital está floreciendo, y nos comprometemos a ampliar nuestra oferta de NFT en el futuro a más categorías, tanto de bellas artes como de lujo. Las posibilidades son enormes”.
Sotheby’s de hecho, ha protagonizado algunas subastas llamativas últimamente. La más reciente es la del cuadro de Pablo Picasso Le peintre et son modèle, de 1964, que se vendió el pasado 29 de junio por 2,25 millones de libras esterlinas (2,61 millones de euros). Lo curioso de este caso es que la casa de apuestas ha vendido junto con la obra un gemelo digital que asegura su trazabilidad y autenticidad. Para ello, se ha aliado con una empresa que usa un microscopio y un programa de inteligencia artificial para escanear cada micra de la superficie del cuadro y crear una firma cifrada única. Al final de este proceso, la máquina crea un NFT que registra la procedencia de una obra de arte y sirve como referencia para que el escáner reconfirme la identidad de la obra de arte física en cualquier momento en el futuro.
“Lo maravilloso de nuestras ventas de NFT”, asegura Floris, “es que, en muchos casos, nos dan la oportunidad de trabajar directamente con los artistas para llevar sus obras a la subasta, un enfoque que también utilizamos en nuestra primera venta NFT con PAK y, más recientemente, en la venta Natively Digital. En abril, la compañía vendió por 14,9 millones la colección The Fungible, del diseñador nativo digital Pak, a la que concurrieron 3.000 postores, según ArtDaily. El 10 de junio, Sotheby’s adjudicó por 11,8 millones el NFT de una obra de arte digital llamada CryptoPunk. Esta obra la forman 10.000 personajes de pixel art creados por Larva Labs en 2017.
“Se trata de un cambio”, prosigue Floris, “en la forma en que tradicionalmente nos relacionamos con las galerías y los vendedores independientes. Para los artistas es muy ventajoso poder vender directamente sus obras a coleccionistas que están disponibles a través de nuevos medios”.
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