La Policía Nacional detiene a un hombre por quebrantar la orden de alejamiento de su expareja, desaparecida

La Policía Nacional ha detenido a un hombre en Marbella (Málaga, 147.958 habitantes) por quebrantar la orden de alejamiento sobre su expareja, que se encuentra en paradero desconocido. El arresto se produjo horas después de que una mujer viese en redes sociales el vídeo del cadáver sin brazos ni cabeza hallado en la localidad malagueña este pasado domingo. ...

La Policía Nacional ha detenido a un hombre en Marbella (Málaga, 147.958 habitantes) por quebrantar la orden de alejamiento sobre su expareja, que se encuentra en paradero desconocido. El arresto se produjo horas después de que una mujer viese en redes sociales el vídeo del cadáver sin brazos ni cabeza hallado en la localidad malagueña este pasado domingo. Sin poder contactar con su hermana desde esa mañana, creyó que podía ser ella y avisó a la policía, que investigó al hombre y más tarde realizó la detención.

Fuentes del caso explican que ambas investigaciones se llevan en paralelo y que, de momento, no existen pruebas que relacionen ambas. “Hasta tanto no haya certezas y evidencias científicas no hay nada más y son cosas distintas”, han subrayado estas fuentes, que destacan la dificultad para identificar el cadáver. Los agentes también creen complejo que la familia haya podido reconocer a la mujer desaparecida “en un cuerpo sin cabeza ni manos y que no tiene ningún tipo de señal clara”.

La confusión marca una doble investigación que empezó el domingo cuando un grupo de personas avistó, sobre las 17.00 horas, a una persona en el mar y cerca de la orilla en la playa de Las Cañas, unos 11 kilómetros al este del casco urbano de Marbella. Eran comensales del restaurante Club 200 quienes avisaron al Centro Inteligente de Mando, Comunicación y Control del 091 de la Policía Nacional. Quisieron acercarse para rescatar a quien pensaban que se estaba ahogando, pero los policías lo desaconsejaron por el mal estado del mar y fue la propia marejada la que, minutos después, arrojó el cuerpo a la orilla. Resultó ser el de una mujer sin cabeza ni manos y con una amplia incisión en el abdomen. La policía desplegó un operativo en la zona, que quedó acordonada. Y la Guardia Civil, competente en el caso, puesto que el cuerpo fue encontrado en el mar, se hizo cargo del caso.

La segunda investigación arrancó pocas horas más tarde. Varios testigos habían grabado con sus teléfonos móviles el cadáver flotando en el mar y las imágenes acabaron en las redes sociales. Allí las encontró una mujer, que creyó reconocer que el cuerpo era el de su hermana, con la que había perdido el contacto esa misma mañana. Llamó entonces a la Policía Nacional. En su explicación aseguraba que en el vídeo había reconocido a su familiar, víctima de violencia machista. El pasado diciembre había denunciado a un hombre con el que había tenido una relación por malos tratos y el juzgado había decretado una orden de alejamiento. Ya el lunes, los agentes procedieron a la detención del varón, de nacionalidad colombiana, por supuestamente quebrantar dicha condena de orden de alejamiento sobre la mujer, que se encuentra en paradero desconocido desde el domingo. La policía incluso ha registrado el domicilio del arrestado, que él mismo ha autorizado, según adelantó el diario Sur.

Por el momento, ambas investigaciones se realizan de manera paralela. A un lado, la Guardia Civil trata de averiguar qué ocurrió a la mujer encontrada en la playa marbellí. El cuerpo fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Málaga, donde se ha procedido a su autopsia y se están realizando un examen de ADN para conseguir su identificación, tarea compleja por la ausencia de huellas dactilares, dientes y por el estado del cadáver, aunque se cree llevaba pocas horas en el agua y que pudo haber muerto el mismo día del hallazgo. Por otro lado, la Policía Nacional intenta conocer si el hombre detenido tiene algún papel en la desaparición de su expareja. “Para nosotros son investigaciones que van de manera paralela”, afirman fuentes policiales. “Se pueden cruzar, sí, pero solo cuando se tengan los resultados de ADN”, añaden las mismas fuentes, que piden esperar a dichas pruebas para confirmar o desmentir la relación entre ambos casos.