Un vertido equivalente a 15 campos de fútbol amenaza la ría de Arousa
Un amplio dispositivo se afana en evitar que la mancha llegue a la costa mientras la investigación apunta a un emisario submarino que arrastra años de fugas
Embarcaciones del Gobierno y la Xunta se afanan este miércoles por limpiar y contener una mancha oleaginosa equivalente a 15 campos de fútbol en la entrada de la ría de Arousa, el principal banco marisquero de Galicia. El vertido, que en un principio las autoridades identificaron como fuel pero cuya composición no ha sido confirmada de momento, fue localizado el martes al mediodía entre la costa del municipio de Ribeira (A Coruña) y la isla de Rúa por un avión de Salvamento Marítimo que se encontraba realizando labores de reco...
Embarcaciones del Gobierno y la Xunta se afanan este miércoles por limpiar y contener una mancha oleaginosa equivalente a 15 campos de fútbol en la entrada de la ría de Arousa, el principal banco marisquero de Galicia. El vertido, que en un principio las autoridades identificaron como fuel pero cuya composición no ha sido confirmada de momento, fue localizado el martes al mediodía entre la costa del municipio de Ribeira (A Coruña) y la isla de Rúa por un avión de Salvamento Marítimo que se encontraba realizando labores de reconocimiento. El objetivo de los trabajos de recogida del derrame y despliegue de barreras es que la contaminación se aleje del litoral y de la isla de Sálvora, que forma parte del Parque Nacional das Illas Atlánticas.
La subdelegada del Gobierno en Pontevedra, Maica Larriba, descarta que el parque nacional esté en peligro, ya que la mancha se considera "controlada”, “no está cerca” de Sálvora y se aprecia ya “muy diluida”. Con el paso de las horas el vertido se ha ido disolviendo porque es menos denso de lo que se temía en un principio, informa José Antonio Pérez Sieira, patrón mayor de la cofradía de pescadores de Ribeira y presidente de la Federación Galega de Confrarías, quien reconoce que se han llevado un “buen susto” después de “mucho tiempo sin un problema de contaminación así”. Galicia ha activado el nivel “medio” de emergencia de su plan contra los accidentes de contaminación marina, equivalente al número 2 en una escala de 0 a 3.
La mancha tiene un largo de kilómetro y medio y un ancho de 400 metros. “Estamos descolocados. Suponemos que fue un sentinazo [vaciado del depósito de un barco], pero como el vertido fue localizado desde el aire no sabemos si viene de dentro o de fuera de la ría. Nos parece casi imposible que venga de dentro, pero ahora mismo no descartamos nada”, explica Pérez Sieira. La Capitanía Marítima de Vilagarcía de Arousa investiga su origen analizando “su ubicación y tipología” y una de las hipótesis que ha ido cogiendo fuerza a lo largo de este miércoles es que provenga de la rotura de un emisario submarino que vierte aguas residuales de un polígono industrial.
Los indicios que apuntan a esta posibilidad son que el derrame ha seguido creciendo pese a las tareas de limpieza, como si saliera de algún punto del fondo del mar, explican fuentes de la investigación. Una embarcación de Salvamento Marítimo se ha situado en el punto de la ría donde se aprecia que emerge el derrame para ir recogiendo los residuos a medida que alcanzan la superficie. El foco está situado justo en la zona por donde transcurre el emisario de O Touro, una canalización submarina por la que se vierten las aguas residuales del polígono industrial de Xarás, ubicado en el término municipal de Ribeira, y en la que se han detectado continuas fugas y roturas en los últimos años. Agentes del Seprona de la Guardia Civil rastrean el parque empresarial en busca del origen del vertido en tierra.
El Ministerio de Transportes ha activado el Plan Marítimo Nacional de respuesta a la contaminación marina en coordinación con la Delegación del Gobierno en Galicia y la Xunta. En la zona se han desplegado el buque de salvamento Don Inda y la salvamar Sargadelos, ambas de Sasemar, y el Irmáns García Nodal del Servizo de Guardacostas de Galicia. El Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño (Intecmar) ha cerrado de forma cautelar el único polígono de bateas que estaba abierto en la zona, informa el Gobierno gallego.