La Iglesia belga indemnizará a algunas víctimas de abusos sexuales
Costeará los gastos terapéuticos para la recuperación de estas personas e inhabilitará a los autores de los delitos
La Iglesia católica de Bélgica ha decidido indemnizar a algunas de las víctimas de los abusos sexuales, así como inhabilitar a los autores de dichos delitos, según ha anunciado hoy Jurgen Mettepingen, portavoz de la Conferencia Episcopal de ese país. En concreto, la Iglesia tiene previsto costear los gastos terapéuticos para la recuperación de "algunas" víctimas, según ha dicho hoy un portavoz del arzobispo de Bruselas-Malinas, André-Joseph Leonard. Cubrirá sol...
La Iglesia católica de Bélgica ha decidido indemnizar a algunas de las víctimas de los abusos sexuales, así como inhabilitar a los autores de dichos delitos, según ha anunciado hoy Jurgen Mettepingen, portavoz de la Conferencia Episcopal de ese país. En concreto, la Iglesia tiene previsto costear los gastos terapéuticos para la recuperación de "algunas" víctimas, según ha dicho hoy un portavoz del arzobispo de Bruselas-Malinas, André-Joseph Leonard. Cubrirá solamente aquellos gastos que se produzcan a partir de ahora y decidirá "caso por caso" las indemnizaciones, ha señalado Mettepingen en una entrevista concedida a los diarios flamencos De Standaard y Nieuwsblad.
La Conferencia Episcopal belga tomó esta decisión en la última reunión que mantuvo la semana pasada, según Mettepingen. "Llegamos a la conclusión de que debemos recibir a las víctimas, escucharlas e indemnizarlas cuando sea posible", ha manifestado el portavoz de la máxima autoridad de la Iglesia católica en Bélgica.
La Conferencia Episcopal también ha decidido tomar medidas contra los autores de los abusos, con vistas a garantizar que "no puedan seguir activos en la vida pastoral", ha añadido Mettepingen.
Jan Hertongen, representante de un grupo de víctimas, ha propuesto a la Iglesia que indemnice a todas las personas que sufrieron abusos con 120 euros al mes de por vida.
La justicia belga está investigando los supuestos casos de pederastia en el ámbito eclesiástico, que podrían haber afectado a varios centenares de personas, según la comisión independiente que designó la Conferencia Episcopal para recibir y tratar denuncias de este tipo.