Otro estrafalario espectáculo de Bianca Censori y Kanye West: ella con las nalgas al aire, él con un traje de apicultor
La pareja, que ya es conocida en el mundo de la moda por sus excentricidades extremas, se presentó esta semana de la moda masculina de París de una forma que las miradas solo podían posarse sobre ellos
Hace tiempo ya que Kanye West se pasea por los más variados eventos relacionados con la industria de la moda y del lujo de la mano de su nueva novia, la italiana Bianca Censori. Tras el divorcio y posterior idilio fallido con Julia Fox y a pesar de la cancelación masiva que se produjo contra su figura tras la defensa de algunos postulados abiertamente racistas, algunas firmas de moda han vuelto a darle acceso a sus front rows. Suelen ser estas firmas poco conocidas, pequeñas o de audiencia “nicho”, motivo por el que el reclamo que ofrecen el rapero y polemista y su pareja les resulta rentable en términos marketinianos.
Fue el caso del desfile de Prototypes, la marca suiza especializada en upcycling que dirigen Laura Beham y Callum Pidgeon, en la que la pareja se presentó con chocante novedades: Censori, que acostumbra a acudir medio desnuda y mostrando siempre de forma descomplejada sus exuberantes pechos esta vez apareció con un pelo teñido de rosa que la hacía inconfundible entre el público. Él, por su parte, que con frecuencia escoge ropa de trabajo en esta ocasión ha elegido vestirse de apicultor.
Si bien el detalle de que él fuese con el rostro y la cabeza cubiertas no es novedoso, pues es algo que solía hacer ya en sus apariciones junto a Kim Kardashian en los desfiles de Balenciaga, sí resulta novedoso que el atuendo sea de color blanco. En el caso de ella, la novedad es que esta vez la parte del cuerpo que ha escogido para mostrar fuera de convenciones fueron las nalgas, que llevaba totalmente al descubierto.
A Censori y West les gusta jugar siempre con los límites de lo que es socialmente aceptable en la vestimenta y el pudor: él arrogándose el vestuario propio de profesiones de clase obrera que no le corresponen en realidad, ella haciendo visibles partes supuestamente “provocativas” del cuerpo. Ambos son perfectamente conscientes de lo que hacen y de hecho convierten su paso por el mundo en una especie de performance artística que van evolucinando. El año pasado el desafío de ella consistía en andar descalza por las ciudades. En cualquier caso, incluso cuando parece que han agotado todos los filones, siempre consiguen volver a sorprender.
El control obsesivo que Kanye West ejerce sobre la forma de vestir y de presentarse al mundo de sus parejas ha sido motivo de polémica en diversas ocasiones y sobre todo, tema de debate entre la prensa de más feminista, que considera que él se encarga de convertir en objeto a las mujeres que le acompañan mientras que él ocupa el papel de “demiurgo”.