‘Soy rebelde’: el excéntrico documental sobre la cantante Jeanette que une a Albert Pla con José María García
La directora Paloma Concejero ha creado una película de dos horas que cuenta la historia de las revoluciones culturales de finales del siglo XX con la cantante británica (y “musa” de Carlos Saura) como hilo conductor
Cuando Paloma Concejero empezó hace seis años a trabajar en el documental que el próximo martes proyecta en el Ateneo con la actuación en directo de la que es su protagonista, o más bien, hilo conductor, la cantante Jeanette, el mundo era un lugar muy distinto. No solo porque aún no habíamos entrado en la segunda década del siglo XXI, al a que dio la bienvenida una terrible pandemia, sino porque todavía estaba vivos muchos de los personajes que ofrecen los testimonios a través de los que se teje la historia de las revoluciones culturales que llevaron a los españoles hacia la Transición. Entre ellos, el director Carlos Saura, que aparece en el documental junto a Jeanette, explicándole a la cantante que ni su mujer ni sus hijos le querían dejar poner el Porque te vas como banda sonora de Cría Cuervos. Pero, como todo el mundo sabe, finalmente lo hizo; y la canción, que había pasado sin pena ni gloria cuando se publicó, porque Jeanette estaba a punto de cambiar a Ariola y a Hispavox no le compensaba invertir en su promoción, se convirtió en el clásico universal. Un compuesto por José Luis Perales, quien, por cierto también aparece en el documental contando cómo fue su madre quien le dijo que había compuesto una canción muy especial.
Soy Rebelde son dos horas llenas de apariciones estelares inesperadas que van dando sentido a una pieza documental que no es un simple biopic: es un puzzle complejo y riquísimo que, entre otras piezas, usa la trayectoria de la cantante de Jeanette Anne Dimech (Londres, 1951) para contar la historia de las revoluciones culturales más importantes del siglo XX y la forma en la que estas influyeron a la juventud española. “Todo surgió cuando fui a recoger un premio a un festival por mi anterior trabajo, un documental sobre Antonio Vega. La madrina del certamen era ella y allí tuvimos la ocasión de conocernos. Rápidamente conectamos y empecé a darle forma a una idea que me rondaba desde hacía mucho tiempo atrás: la de reivindicar la canción ligera como un motor transformador. Yo he vivido muy de cerca esa escena, porque mi madre me llevó con ella desde muy pequeña a ver conciertos de sus ídolos, de Julio Iglesias a Camilo Sesto, y cuando mencionabas ese género musical se reían de ti, y sin embargo, esa cultura inoculó las ganas de cambio en mucha gente”. Y para demostrarlo, Concejero va siguiendo la línea biográfica de Jeanette, desde que era una niña en Los Ángeles del verano del amor cuyos padres decidieron divorciarse hasta cuando se convirtió en ojito derecho de Manuel Alejandro, pasando por su debú junto a un grupo folk de la ciudad en la que pasó su juventud, Barcelona. Y donde conoció a su marido, quien trabajaba en el bar de un futbolista húngaro del Barcelona, Laszlo Kristof, con el que se mudó a vivir a Viena cuando ella ya era una celebridad en España gracias a Cállate, niña. Él tampoco vive ya y también aparece en el film. “Quise huir por todos los medios del simple biopic”, explica Concejero, “porque se ha abusado mucho de esa fórmula y porque contaba con un material que me permitía crear un verdadero documental. Porque hoy en día mucha gente presume de hacer documentales pero sin de verdad aportar una documentación que dejar para la posteridad. Y aquí sí hay eso”. Entre otras cosas, se explican de forma definitiva los motivos y la ocasión para la que se compuso la canción que da título al documental que se convirtió en el mayor éxito de Jeanette: “Manuel Alejandro la compuso por motivos muy diferentes a los que se han contado. Y para conocerlos hay que ver el documental”, explica su directora.
Hay una panoplia de personajes muy dispares que intervienen en Soy Rebelde, desde el locutor José María García (quien cumple una función específica y muy peculiar en el “argumento”) hasta el cantante Albert Pla (quien confiesa que descubrió el erotismo gracias a Jeanette y explica por qué es su fan) pasando por Manuela Carmena, Cristina Almeida o el legendario locutor Carlos Tena, quien tampoco vive ya. Para complementar todas esas voces, la directora ha empleado las insólitas animaciones de Álvaro Ortega, un dibujante cuya especialidad es recrear en movimiento universos pop. Gracias a su contribución, la directora ha podido recrear escenas increíbles de la vida de Jeanette, como su actuación junto a Sacha Distel en la televisión francesa a cuyos derechos no ha tenido acceso. “Jeanette vivió momentos alucinantes: por ejemplo, estuvo en un acto promocional con The Who o fue la telonera de Julio Iglesias el año en el que él actuaba en el Olympia de París”. Sin embargo, hay muchas anécdotas de las no quedó constancia visual y para eso ha tenido que usar otros recursos gráficos. “Me da muchísima pena porque ninguno de los fallecidos pudieron ver el documental, que se terminó en 2022, pero por cuestiones ajenas a la productora y a mí ha estado en un cajón casi dos años. Pero que se vaya a proyectar en el Ateneo de Madrid y que Jeanette vaya a cantar allí en director por fin me emociona”.