5 mujeres que han hecho del 2015 su año

Para muchas mujeres del panorama musical este año ha sido glorioso. Repasamos los casos más exitosos.

Al final de año toca echar la vista atrás para mirar lo que ha ocurrido y entender lo que podrá ocurrir el año que viene. En lo musical, este año comenzó con la filtración inesperada del disco de Björk (dos meses antes de su fecha prevista) y acaba con Adele pulverizando cualquier récord que se le pone por delante. Para muchas mujeres del panorama musical 2015 ha sido uno de sus años gloriosos: Taylor Swift ha recogido los frutos del exitazo de 1989 ganándose el respeto de muchos que la consideraban una cantante de country blandito, Madonna ha vuelto ...

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Al final de año toca echar la vista atrás para mirar lo que ha ocurrido y entender lo que podrá ocurrir el año que viene. En lo musical, este año comenzó con la filtración inesperada del disco de Björk (dos meses antes de su fecha prevista) y acaba con Adele pulverizando cualquier récord que se le pone por delante. Para muchas mujeres del panorama musical 2015 ha sido uno de sus años gloriosos: Taylor Swift ha recogido los frutos del exitazo de 1989 ganándose el respeto de muchos que la consideraban una cantante de country blandito, Madonna ha vuelto a girar como solo ella sabe, dando espectáculo, llenando estadios y generando noticias; Lady Gaga no da pistas de su futuro musical pero protagoniza la nueva temporada de American Horror Story, Rihanna vuelve a publicar un single viral y pegadizo… Aquí van 5 casos de mujeres que han triunfado en 2015 por diversas razones:

Adele

Cuando Back to Black de Amy Winehouse vendió 10 millones de copias, muchos afirmaron que sería el último disco de la historia en vender tal cantidad. Fue una de sus mayores fans (según ha contado recientemente, es su mayor influencia) la que superó la cifra, triplicándola: Adele vendió 30 millones de ’21’. Cuatro años más tarde, y esperando a final de año, con las navidades cerca, ha publicado su esperada continuación, ’25’. Los logros del lanzamiento de Adele son interminables: casi 6 millones vendidos en su primera semana –según Media Traffic–, dos de ellos en su primer día a la venta; álbum que más rápido se ha vendido en Estados Unidos (3,4 millones) y Reino Unido (1 millón) en su primera semana (la cantante ha pulverizado los récords históricos de NSYNC* y Oasis); más de 700 millones de visionados del single Hello en Youtube, más de un millón de descargas digitales (pagadas, por supuesto) del single en Estados Unidos en una semana; entradas agotadas en 5 horas para sus dos fechas en Barcelona (los conciertos se celebrarán a finales de mayo); 6 semanas consecutivas en lo alto de la lista Hot 100 de Billboard, que suma ventas, escuchas por streaming y reproducciones radiofónicas. La británica parece no tener límites. Vendedora, simpática, algo vulgar, celosa de su vida privada… Una estrella planetaria bastante atípica de la que no nos olvidaremos nunca. 2016 promete ser su mejor año, si es que eso es posible.

Miley Cyrus

Tras el éxito de Bangerz y su extensísima gira mundial (una de las que más titulares y fotos han dado en los últimos tiempos), parece que el paso normal de cualquier estrella del pop tendría que ser volver a grabar cuanto antes otro disco de pop comercial, hacer vídeos y mantener el éxito. El detalle es que Cyrus no es cualquier estrella del pop. En los últimos dos años ha montado su propia organización benéfica, Happy Hippie Foundation, para ayudar a jóvenes LGTB sin hogar y a eso ha dedicado la mayor parte de su tiempo. Como promoción a esta fundación ha grabado varios vídeos en el patio trasero de su casa junto a gente como Joan Jett o Ariana Grande. Además, en 2015 aceptó volver al redil de la industria presentado los MTV Awards, momento en el que aprovechó para sorprender a la (masiva) audiencia. Cerró la gala presentando una canción inédita acompañada del grupo indie The Flaming Lips, y, cuando terminó, apareció en la red para libre descarga su nuevo álbum, producido por ella al margen de su contrato discográfico y con un cambio de registro que se puede tildar, al menos, de valiente. 2015 es el año en el que Cyrus se ha liberado y ha decidido hacer lo que le apetece. Como ella misma afirmó, ya ha ganado dinero suficiente para vivir varias vidas, no necesita seguir alimentando el éxito y la cuenta corriente. Ahora mismo se encuentra de gira con The Flaming Lips presentando su nuevo disco. A pesar de todo, también ha anunciado que en 2016 publicará la continuación oficial de Bangerz, ya que tiene un contrato discográfico vigente.

Natalia Lafourcade

La cantante mexicana dio la campanada en los cada vez más influyentes Grammy Latino llevándose 5 premios (incluyendo el más importante, Grabación del Año) en una gala en la que competía con pesos pesados como Juan Luis Guerra, Alejandro Sanz o Miguel Bosé. Y lo hizo gracias a su quinto álbum, Hasta la raíz, tras una carrera de 15 años (comenzó siendo adolescente) que ha ido construyendo con calma y, sobre todo, inteligencia. Tras escarceos con el pop adolescente, el indie folk americano y los sonidos de su país, México, Lafourcade ha combinado en un solo disco todo su saber, con unas canciones sentimentales y sencillas que la han llevado a hacerse un nombre definitivo en los países de habla hispana. Multinstrumentista, cantante, productora, compositora, actriz… Nada se le escapa a la artista mexicana, que no solo hace muchas cosas, sino que las hace bien. La siguiente parada son los Grammy clásicos, que se celebrarán en febrero, en los que compite al Mejor Álbum Latino de Rock, Urbano o Alternativo.

Missy Elliott

Fue la gran sorpresa del intermedio de la Superbowl de este año, el evento más visto de la televisión americana. A pesar de que la protagonista debía ser Katy Perry, quizá invitar a Elliott no le salió del todo bien, porque le robó el show en dos segundos. Missy Elliott es muy querida en Estados Unidos, sus producciones han lanzado a la fama a varias generaciones y ella puso de moda el sonido Timbaland, con el que tanto triunfó Justin Timberlake. Su aparición durante la actuación de Perry (en la que, no sé si alguien se acuerda, también estuvo Lenny Kravitz) se hizo esperar, pero dejó un sabor de boca estupendo. Un medley de algunas de sus canciones míticas acompañados de sus movimientos habituales en los que Katy Perry, aunque intentaba entrar, no pegaba nada. Esa misma semana, las ventas de sus antiguos singles se reactivaron. Esto levantó todos los rumores sobre una posible vuelta a la palestra de Missy Elliott en solitario, retirada como cantante debido a una enfermedad de la tiroides, y el final de 2015 lo ha confirmado con la publicación de un single junto a Pharrell. Se espera que para el año que viene el esperadísimo Block Party vea la luz y nos devuelva a una de las mujeres más grandes de la música moderna.

Björk

Quizá el éxito de Björk no la haga millonaria (de hecho, todo lo contrario), pero eso no significa que con su disco de 2015, Vulnicura, no haya agrandado más su leyenda. Nacido de la ruptura con el artista Matthew Barney, por primera vez Björk renuncia a la magia, los artificios, las metáforas, lo abstracto y las letras fantasiosas para hablar alto y claro. Sus nuevas canciones fueron un auténtico destape sentimental, la historia del final de una familia y del amor contada de manera cruda, directa. Un giro de guion en la extensa carrera de la islandesa que ha gustado a la crítica. 2015 ha sido su año por Vulnicura, pero también por la retrospectiva que le dedicó el MoMA. El museo neoyorkino hizo un homenaje y un repaso cronológico a toda la carrera en solitario de Björk, reuniendo todo tipo de objetos relacionados con su vida personal y profesional, pero también recopilando en el museo sus videoclips y sus trabajos artísticos, además de reconocer los aportes innovadores de la cantante a la investigación sonora durante más de 30 años. Sacarse de encima todos sus fantasmas y tormentos a través de su música parece que le ha sido de gran utilidad, pues ya ha anunciado que está escribiendo un nuevo disco (se suele tomar entre 3 y 4 años entre un trabajo y otro).

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