Marta Bosquet, la mano derecha de Juan Marín para presidir el Parlamento

Marta Bosquet (Almería, 1969) será la próxima presidenta del Parlamento de Andalucía. La diputada de Ciudadanos por Almería ha liderado las negociaciones que han culminado en un pacto con el PP que termina con 36 años de socialismo en la Junta. Licenciada en Derecho, con despacho propio desde hace más de dos décadas está especializada en violencia ...

Marta Bosquet (Almería, 1969) será la próxima presidenta del Parlamento de Andalucía. La diputada de Ciudadanos por Almería ha liderado las negociaciones que han culminado en un pacto con el PP que termina con 36 años de socialismo en la Junta. Licenciada en Derecho, con despacho propio desde hace más de dos décadas está especializada en violencia de género, menores y extranjería. Es muy aficionada al flamenco, una afición que le permite dar rienda suelta a su vena artística y desconectar de las obligaciones políticas. Entre los parlamentarios aún se recuerda la respuesta que le dio a la todavía presidenta de la Junta, Susana Díaz, en uno de sus intercambios parlamentarios: “A flamenca no me gana usted”.

Bajo su semblante risueño se parapeta una política seria y con garra, que ha demostrado sus cualidades parlamentarias a lo largo de esta legislatura. Bosquet, aficionada a los paseos por la orilla del mar, se afilió al partido de Ciudadanos en 2013 y, aunque lo hizo de manera sigilosa, tenía ya experiencia en el ámbito de la política. En 2007 concurrió a las elecciones municipales por Almería como integrante del partido GIAL, una escisión del PP. En 2011, el líder de esta formación la propuso para dirigir las negociaciones para volver a integrarse con los populares. Durante ese tiempo desarrolló sus dotes para llegar a acuerdos, unas condiciones para el diálogo que ha ejercido estas últimas semanas al encabezar el grupo negociador de su partido para cerrar el pacto programático con el PP.

Bosquet se ha convertido en la mano derecha del líder regional, Juan Marín, en estos últimos cuatro años. No es casualidad que en esta legislatura haya acumulado puestos de relevancia parlamentaria: ha ostentado la presidencia de la comisión de Justicia e Interior; era la portavoz adjunta del grupo; portavoz en las comisiones de Empleo, Empresa y Comercio y de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural; portavoz en la comisión de Nombramientos, Relaciones con el DPA y Peticiones; vocal en la comisión de Fomento y Vivienda... “Trabaja mucho los temas en los que se involucra y eso se nota”, dicen en su entorno.

Su trabajo en la anterior legislatura no ha pasado desapercibido para Albert Rivera que la ha incluido recientemente en su núcleo de personas de confianza.

La próxima presidenta del Parlamento andaluz está divorciada y vive en Almería con sus dos hijos, de 21 y 17 años. Con el primero acudió a votar en las anteriores elecciones autonómicas, en los que fueron los primeros comicios en los que el joven podía ejercer su derecho al voto. Entonces, Bosquet no esperaba que fuera a ser elegida como diputada. Cuatro años después dirigirá la Cámara más dividida de la historia parlamentaria de Andalucía. Un nuevo reto que sumar a su currículum político.