Alonso, el valor al alza del PP, enviado a una batalla perdida

Valor al alza en el PP, sorayista y considerado parte del ala moderada del partido —apoya por ejemplo el matrimonio gay que el PP recurrió ante el Constitucional—, Alfonso Alonso es, como Alberto Núñez Feijoo, uno de los nombres recurrentes en las eternas quinielas de la sucesión a Mariano Rajoy. Pero el político que sonaba para todo y relevó a Ana Mato al frente de Sanidad tras su dimisión por e...

Valor al alza en el PP, sorayista y considerado parte del ala moderada del partido —apoya por ejemplo el matrimonio gay que el PP recurrió ante el Constitucional—, Alfonso Alonso es, como Alberto Núñez Feijoo, uno de los nombres recurrentes en las eternas quinielas de la sucesión a Mariano Rajoy. Pero el político que sonaba para todo y relevó a Ana Mato al frente de Sanidad tras su dimisión por el caso Gürtel, es ahora apartado del Gobierno para una batalla perdida: la candidatura a presidente de la comunidad donde el PP obtuvo su menor porcentaje de votos (12,85%) en las elecciones del pasado junio: Euskadi. Alonso (Vitoria, 1967) se esforzó ayer en trasladar el mensaje de que su candidatura a lehendakari no es un “paso atrás” en su carrera política, pese a que supone dejar un ministerio para ser oposición en el País Vasco. No podrá compaginar un cargo en el Gobierno con el Parlamento autonómico, pero sí con un cargo en la dirección del PP.

Milita en el partido desde los 22 años. Es abogado y filólogo. Fue concejal y alcalde de Vitoria entre 1999 y 2007 y portavoz del grupo parlamentario popular en el Congreso (2011-2014) donde ganó visibilidad y fama de dialogante. En diciembre de 2014 relevó a Mato al frente de Sanidad. En su etapa como ministro fue criticado por una foto fumando en un bar incumpliendo la ley antitabaco. Hace dos meses fue condenado junto a Javier Maroto por el Tribunal de Cuentas a pagar 393.000 euros por alquilar un local a un precio superior al del mercado. Desde octubre de 2015 preside —a la espera del congreso regional— el PP vasco tras la dimisión de Arantxa Quiroga, con la que nunca llegó a entenderse bien.

La candidatura de Alonso a lehendakari le hace renunciar al Ministerio de Sanidad. Con el Gobierno en funciones, Rajoy tendrá que reasignar a otro ministro la cartera. Luis de Guindos (Economía) ya asumió las competencias de Industria tras la renuncia de José Manuel Soria por los papeles de Panamá, y Rafael Catalá (Justicia) las de Fomento tras el nombramiento de Ana Pastor como presidenta del Congreso. Javier Maroto sustituirá a Alonso en el Congreso. Rajoy se queda con 10 ministros, el Gobierno más reducido desde la legislatura constituyente (1977).