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“Lo único que sé es que me encanta el fútbol”: en Calcuta, las niñas juegan por un futuro más libre

Aunque India es conocida sobre todo por su afición al críquet, el fútbol es muy popular en Calcuta, donde un equipo juvenil intenta romper con los estereotipos de género

Asrafi Khatun camina por el campo vestida con un uniforme negro y amarillo y con su larga melena negra recogida en una trenza. Nació en una zona rural cercana a la ciudad de Raiganj, unos 400 kilómetros al norte de Calcuta, en India. Tiene 16 años y solo lleva tres meses viviendo en este campus. Para las niñas de familias con pocos recursos como ella, el futuro que le aguardaba era trabajar en una granja. Pero el año pasado, Asrafi obtuvo una beca para jugar en el ASOS Rainbow Athletic Club, un club de fútbol profesional indio con sede en Calcuta. Gracias a la beca, también puede vivir y estudiar en uno de los 11 campus de ASOS Rainbow.Valeria Mongelli (HANS LUCAS)
Aunque India es conocida sobre todo por su afición al críquet, el fútbol es muy popular en Calcuta, la capital del Estado de Bengala Occidental, donde este equipo juvenil intenta romper con los estereotipos de género. La ciudad tuvo su primer equipo de fútbol en 1872. Fue el primero del país.Valeria Mongelli (HANS LUCAS)
Khatun besa el poste de la portería antes de chutar el balón. “Cuando mis padres se enteraron de que quería jugar al fútbol, se opusieron porque pertenezco a una familia musulmana”, cuenta. “Y para las niñas musulmanas, llevar pantalones cortos, salir, jugar con niños no es tan fácil". Sin embargo, sus profesores se fijaron en sus aptitudes y convencieron a sus padres para que la dejaran competir. Ahora que ha competido en la selección nacional de Bengala Occidental y ayuda económicamente a sus padres, estos se sienten orgullosos de ella. La chica recuerda que la gente de su comunidad también la criticaba. “Si quieres triunfar en la vida, siempre habrá quien diga cosas malas de ti. Tienes que evitar a esas personas y, un día u otro, sabrán que tenías razón”, se defiende la joven.Valeria Mongelli (HANS LUCAS)
Bandana Roy (centro), de 19 años, juega en el mismo equipo que Asrafi Khatun. Esta joven alta y de mirada decidida practica este deporte desde que tenía 14 años. Procede de una familia hindú de Haldibari, que ella define como una zona conservadora, en la que “las niñas se casan a los 14 o 15 años”. Empezó a interesarse por el fútbol viendo jugar a los hombres. “¿Y por qué no las mujeres?, pensé. Las chicas deberían hacer lo que quieran, no solo en el deporte, sino en cualquier profesión”. Sin embargo, aunque la mentalidad de la gente esté cambiando, la política podría tardar más en hacerlo. “Lo más difícil de cambiar en India es la política. En este país, la política es omnipresente y estropea muchas cosas”, lamenta la jugadora.Valeria Mongelli (Valeria Mongelli)
“Antes, el fútbol femenino no era muy popular en nuestro país”, explica el entrenador, Jayabrata Ghosh. Esta mentalidad ha empezado a cambiar. Ghosh entrena a niñas de siete u ocho años. “Esto significa que las familias les permiten jugar”, resalta. La Federación India de Fútbol decidió recientemente poner en marcha la Liga India Femenina para promover el fútbol femenino en el país.Valeria Mongelli (HANS LUCAS)
Khatun hace estiramientos durante un entrenamiento en el campus Rainbow de ASOS en Kolkata, India. Asrafi espera ganar lo suficiente en el futuro para apoyar económicamente a niños de familias con pocos recursos como la suya. “¿Por qué solo las niñas tienen que quedarse en casa y hacer las tareas domésticas?”, se pregunta. “Si soy buena en el fútbol y puedo hacer que mis padres se sientan orgullosos, un día u otro cambiará la mentalidad de la gente. [...] Lo único que sé es que me encanta el fútbol”, insiste.Valeria Mongelli (HANS LUCAS) (Valeria Mongelli)
El campus acoge a centenares de chicos y chicas de distintas partes de India. Entre ellos hay hindúes, musulmanes, cristianos, budistas. Les une el mismo sueño: convertirse en estrellas. “El fútbol es un juego en el que no hay separación en lo que respecta a la cultura o a la religión”, asegura Jayabrata Ghosh, de 53 años, entrenador del equipo femenino ASOS Rainbow. El nombre del equipo, junto con el logotipo de la bandera arco iris, hace referencia a su talante inclusivo. “Intentamos crear un espacio seguro. [...] Vivimos juntos, comemos juntos, rezamos juntos. Si hay una festividad religiosa, la celebramos juntos. Esto nos une”, explica el responsable.Valeria Mongelli (HANS LUCAS)
Roy da una patada al balón durante un entrenamiento. La chica es una de las cuatro jugadoras del ASOS Rainbow que han sido seleccionadas para jugar en el equipo nacional de Bengala Occidental en los próximos juegos Khelo India. Se siente orgullosa y emocionada por ello. Está cursando el último año de instituto. “No se me dan muy bien los estudios”, admite. “Quiero seguir mi carrera futbolística después de terminar la enseñanza obligatoria”.Valeria Mongelli (Valeria Mongelli)
La educación es crucial para luchar contra la brecha de género. Kerala, el Estado indio con la tasa de alfabetización más alta, es también el que mejores datos presenta en cuestiones de igualdad. En los campus de ASOS Rainbow, niños y niñas tienen las mismas oportunidades, independientemente de su sexo, religión u origen socioeconómico, según Sayantani Sen, de 35 años, Directora de Relaciones Públicas del Grupo Aditya, propietario de los campus y clubes deportivos de ASOS Rainbow. “Aquí todo el mundo tiene la opción de ser lo que quiera ser”, asegura.Valeria Mongelli (Valeria Mongelli)
"La educación, junto con el deporte, son esenciales para los niños. No solo para el desarrollo de su trayectoria profesional, sino también para su salud física y mental”, asegura Sayantani Sen, portavoz del grupo propietario del campus. La responsable cree que India está mejorando en lo que se refiere a la inclusión. “Pero la mentalidad de la gente no cambia de un día para otro. Hay que seguir luchando por ello”, matiza.Valeria Mongelli (Valeria Mongelli)