Sanidad pública universal

En este país tenemos un gran privilegio todos los ciudadanos: la sanidad pública universal. A pesar de que nos quejemos de las listas de espera, cuando hay una urgencia médica el mejor sitio donde te van a atender es en la seguridad social. Me parece una gran incongruencia que los trabajadores públicos tengan una sanidad privada pagada con dinero público. Desde la pandemia, las aseguradoras han visto incrementado su negocio notablemente; antes era fácil coger hora con cualquier especialista, ahora casi está tan saturado el servicio como en la pública. El hecho de tener ya muchos clientes, además de la cartera de funcionarios que siguen en Muface incluso jubilados, no sale a cuenta a esas aseguradoras. En lugar de destinar miles de millones de euros a la sanidad privada de esos funcionarios, se debería insuflar a la sanidad pública ese dinero para dar cobertura a todos los ciudadanos. Quien quiera una póliza privada, que se la pague.

Matilde Seoane Ruano. Sabadell (Barcelona)

Sin jóvenes no hay futuro

El problema de Asturias no es el envejecimiento de la población sino más bien que desde hace 40 años los jóvenes emigran por la falta de perspectivas. Hace ya muchos lustros que la única posibilidad de trabajo es la de ser funcionario; tenemos la tasa por habitante más alta en España. Nuestros jóvenes se van a otras autonomías que les ofrecen trabajos a la medida de su preparación. Les gustaría volver, lo que sería fabuloso para el territorio, pero una vez fuera de él, todavía se les hace más evidente que su regreso es inviable. En todos estos años esta realidad se ha ido apoderando de todo lo que rodea a los asturianos. No hay ningún campo —medicina, educación, artes, turismo, ecología...— en el que destaquemos. ¿Cómo lo vamos a hacer sin la materia prima que son los jóvenes?

Flor Fernández del Viso Torre. Salinas (Asturias)

¿No hay ningún político capaz?

Me pregunto si no hay nadie en el PP valenciano ni en el español capaz de pilotar la reconstrucción de las zonas arrasadas de Valencia que hay que echar mano de un militar. ¿Esto no es realmente la antipolítica, el populismo? Insisto, ¿no hay ningún político del PP capaz de liderar la reconstrucción? Lo bueno es que seguramente este militar no robará tanto. Pero nunca hubiera pensado que volvería a estar gobernada por militares. Pero bueno, Carlos Mazón es así. Y el PP valenciano lo ha consentido.

Milagro Moya López. Paterna (Valencia)

Biden juega al apocalipsis

A punto de terminar su presidencia, despechado tras su obligada renuncia y la derrota de Kamala Harris, Joe Biden, que ya había roto las serias tentativas de paz entre Rusia y Ucrania al mes de empezar la guerra (al fracasar la invasión de uno y la defensa del otro), agrava ahora mucho más esa guerra al permitir a Ucrania el usar en territorio ruso las armas de mayor potencia que le dio para su defensa. También sigue apoyando al máximo la matanza israelí en Gaza, cuando el fanático Benjamín Netanyahu agrede también como nunca a Palestina, el Líbano y otros países. Biden aún puede provocar la peor catástrofe mundial.

Diego Mas. Madrid