Educar a los niños en las buenas conductas

Los lectores escriben sobre la enseñanza de valores, el amor a España y los servicios públicos, el pacto de Vox y PP en Valencia y el naufragio de migrantes en Grecia

Varias familias con niños en un parque.EDUARDO BRIONES / EUROPA PRESS

Uno de los valores que inculcan a mis nietas es la tolerancia. Sus padres les explican que la crueldad no lleva a ninguna parte. Me pareció una buena manera de hacerles entender que nunca tienen que rechazar a los otros. Este tema del que tanto se habla ahora se debe intentar trabajar en las familias para evitar que los niños caigan en una espiral sin salida. Me pareció un aprendizaje para reflejar la esencia humana de la persona, desarrollando la generosidad y la amabilidad. Aprender a construir ...

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Uno de los valores que inculcan a mis nietas es la tolerancia. Sus padres les explican que la crueldad no lleva a ninguna parte. Me pareció una buena manera de hacerles entender que nunca tienen que rechazar a los otros. Este tema del que tanto se habla ahora se debe intentar trabajar en las familias para evitar que los niños caigan en una espiral sin salida. Me pareció un aprendizaje para reflejar la esencia humana de la persona, desarrollando la generosidad y la amabilidad. Aprender a construir la paz y vivirla en bondad solo puede aportar, a cambio, ventajas. No creo que haga falta ser psicólogo para pensar que, desde muy pequeños, los niños han de saber que para expresar sus razones lo ideal es usar palabras y que, bien usadas, son más efectivas que un empujón o un golpe. Esta actitud seguro que los llevará a ser apreciados, con el tiempo, por sus compañeros. Además, el día de mañana se convertirán en adultos responsables y podrán encontrar un lugar en el mundo, tanto a nivel personal como profesional.

Gema Abad Ballarín. Reus (Tarragona)

Amor a España

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Amo a España. En consecuencia, quiero que España tenga la mejor sanidad, la mejor educación y, en general, los mejores servicios públicos. Quiero que los españoles tengan derechos, libertades, se sientan protegidos por el Estado, y que trabajadores y jubilados tengan salarios y pensiones justos. Para ello, la economía debe ser gestionada con eficacia y los que más tienen deben contribuir con solidaridad. Aunque yo tenga que pagar más impuestos. Porque el patriotismo se demuestra más pagando impuestos que agitando banderas. Quiero que los partidos cuyos objetivos coincidan con los mencionados unan sus votos en el Parlamento para conseguirlos, aunque puedan diferir en otros puntos. Quiero que los españoles votemos en función de las propuestas y no en base a eslóganes vacíos.

David Tudela Moreno. Tres Cantos (Madrid)

¡Olé y olé!

Después del acuerdo entre PP y Vox al fin tenemos un torero al frente de la cultura valenciana, un entremés de lo que se nos avecina si Feijóo gana las elecciones. Quizá, en los futuros planes de estudio, en vez de Educación para la Ciudadanía o Valores Éticos habrá Tauromaquia I y Tauromaquia II, y en la Universidad, máster de Banderillas, Estoque y Verduguillo. En este albero de la derecha ya han puesto banderillas negras y, por lo que me temo, no solo a la cultura. Olé, olé, y las dos orejas, maestro.

José Antonio M. Lamoca. Madrid

Naufragio en Grecia

No existen palabras para expresar el dolor y la injusticia sobre el naufragio ocurrido en el Jónico. Lo triste es que ya lo hemos interiorizado y dentro de unos días no se hablará del tema. Otros sucesos taparán este horror. Lo que más me indigna es ver cómo el mapa de Europa va llenándose de políticos de ultraderecha que odian al inmigrante y ponen todos los medios para que no vengan. ¿Qué ha hecho la Unión Europea hasta ahora? Nada para evitar la trata de seres humanos permitiendo su devolución en caliente. ¿Y qué hacemos los ciudadanos? Por desgracia, muchos seguir las soflamas de partidos que inoculan el miedo al extranjero, al inmigrante, que solo busca una vida mejor. También nosotros somos responsables.

Ana Alonso Castrillo. Madrid

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