Le voy a dar un dato, señora Díaz

La imagen de un político en redes puede cambiar en cuestión de horas

Yolanda Díaz interviene en una sesión de control al Gobierno en el Congreso de los DiputadosEduardo Parra (Europa Press)

Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, está pasando por un buen momento. Es la dirigente política mejor valorada por el CIS (aunque también suspende con un 4,6), tiene buena prensa y, por ahora, le va bien en Twitter, donde no genera tanto rechazo como otros políticos.

Por ejemplo, es la protagonista de un meme que nace de sus respuestas a Teodoro García Egea durante las sesiones de control en el Congreso de los Diputados. Entre los tuiteros de izquierdas, s...

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Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, está pasando por un buen momento. Es la dirigente política mejor valorada por el CIS (aunque también suspende con un 4,6), tiene buena prensa y, por ahora, le va bien en Twitter, donde no genera tanto rechazo como otros políticos.

Por ejemplo, es la protagonista de un meme que nace de sus respuestas a Teodoro García Egea durante las sesiones de control en el Congreso de los Diputados. Entre los tuiteros de izquierdas, se comparten y versionan las réplicas de Díaz que comienzan con las palabras “señor Egea, le voy a dar un dato”, incluyendo montajes en los que el portavoz del PP aparece traumatizado por estas palabras. Hasta El Mundo Today publicaba un vídeo satírico en el que se preguntaba si “se está pasando de la raya Yolanda Díaz con los datos que le da a Teodoro García Egea”. Según este diario humorístico, Egea ya odia ir al Congreso y tiene pesadillas con la ministra. Lo resumía así el periodista Quique Peinado: “Pasar miedo nivel cuando Teodoro escucha ‘le voy a dar un dato’”.

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Decía que le va bien en Twitter “por ahora”. Porque esto puede cambiar de un día para otro. Recientemente hemos visto dos ejemplos de cómo la imagen pública de quien se dedica a la política es frágil y voluble, especialmente en redes.

Este domingo, Jordi Évole entrevistaba en La Sexta a Iván Redondo, asesor hasta julio de Pedro Sánchez y a quien se le atribuía gran parte del mérito de su llegada a la presidencia. Para muchos tuiteros, Redondo no salió airoso de esta entrevista: lo acusaron de vender motos, humo, crecepelo y enciclopedias. Incluso se sacaron a colación los memes de Pantomima Full, incluyendo el de “en su cabeza era espectacular”, que se utiliza cuando alguien suelta una idea o una reflexión que no es tan certera como cree.

Uno de los momentos más comentados fue el de las piezas de ajedrez. Es sintomático porque en su buena época, no pocos analistas políticos mencionaban de forma elogiosa las comparaciones que Redondo hacía entre la política y este juego. Pero en este caso, muchos tuiteros se sorprendieron de que sacara un peón y una dama del bolsillo al principio de la entrevista y dijera que “esto no estaba preparado”, como si fuera una chaqueta que no se ponía desde el campeonato de ajedrez de Linares de 2008. Tampoco quedó claro por qué explicó que el peón puede coronar si llega al otro extremo del tablero, pero luego descartó que ese hubiese sido su objetivo. Por cierto, Redondo ha aprovechado la entrevista para reactivar su cuenta de Twitter (@thewarroomblog), que llevaba más de tres años sin actualizar. No sabemos si ha hecho lo mismo en Chess.com.

Otro político caído en desgracia tuitera es Antonio Miguel Carmona, nombrado vicepresidente de Iberdrola en plena escalada de los precios de la electricidad. Carmona llevaba dos años retirado de la política, pero eso no le ha servido para librarse de la acusación de aprovechar las puertas giratorias para conseguir su despachito. También se le ha recordado que este mismo verano defendió a Iberdrola con un hilo en el que desmentía que la empresa estuviera vaciando los pantanos para maximizar sus beneficios. Y, por supuesto, había chistes a su costa: por ejemplo, en la cuenta de humor Malacara, el socialista aparecía acalorado y sugería, como quien no quiere la cosa, la posibilidad de encender el aire acondicionado.

En definitiva, que Díaz haría bien en no confiarse. Los “le voy a dar un dato” de hoy pueden ser las burlas y los memes de mañana. Que recuerde que a Carmona no lo ha salvado ni su propuesta de hace años de organizar naumaquías en Madrid.

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