Comunidades y empresas, de la mano en el cuidado de los bosques
La iniciativa privada juega un papel fundamental en la conservación de la naturaleza en las regiones donde opera
La deforestación es uno de los principales causantes del cambio climático. En 2015, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) impulsó los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), con metas a 2030 específicas como erradicar el calentamiento global, la pobreza, el hambre o la desigualdad.
Entre las principales causas de la deforestación están la ganadería, la agricultura, la expansión de zonas urbanas y las construcciones de infraestructura o viales, que ejercen una presión considerable sobre los ecosistemas forestales, que son clave para la regulación del clima, mejoran la calidad del aire y son el hogar de mamíferos, reptiles, anfibios y aves.
México es reconocido por su gran biodiversidad. La Comisión Nacional Forestal (Conafor) asegura que en el país hay 139 millones de hectáreas cubiertas por algún tipo de vegetación forestal, lo que corresponde al 70.6% del territorio mexicano. De estos, el 40.5% son matorrales xerófilos (semidesierto), el 25,1% son bosques y el 21.9% son selvas.
El Sistema Nacional de Monitoreo Forestal plantea que las principales causas de la deforestación en el país son producidas por cambios en el uso de la tierra. En 2022, la Conafor contabilizó 206.564 hectáreas deforestadas, un aumento del 23% respecto al año anterior, cuando se deforestaron 167.811 hectáreas.
La creciente conciencia sobre la importancia de la conservación ambiental y el cuidado de los bosques ha llevado a la iniciativa privada, organizaciones civiles y gobiernos a estrechar lazos para enfrentar los desafíos globales y contribuir a la Agenda 2030, con el objetivo último de crear un futuro más sostenible y verde.
Un voluntariado con enfoque ambiental
Con 25 años de presencia en el país, Iberdrola México es una de las compañías comprometidas con la protección de la naturaleza, a través de campañas de reforestación en lugares cercanos a las localidades donde opera. Uniendo este objetivo medioambiental con sus proyectos de responsabilidad social corporativa, la compañía implementa cada año acciones de voluntariado vinculadas a la plantación de árboles con el apoyo de personal de la empresa, habitantes de las comunidades y clientes.
Entre los meses de julio y septiembre del presente año, la empresa sembró 8.000 árboles en cinco entidades del país: Estado de México, Guanajuato, Oaxaca, Puebla y Querétaro.
El pasado 7 de septiembre, culminó sus actividades en el poblado de Texcal, en el municipio de Cuyoaco, en Puebla, con la reforestación de 2.000 pinos endémicos en una zona que padeció un incendio un año atrás.
“Iberdrola México tiene un fuerte compromiso social y por ello realizamos actividades de la mano de las comunidades en donde tenemos presencia. De esta manera, estrechamos lazos que nos permiten trabajar en conjunto para alcanzar nuestros objetivos medioambientales y sociales, además de generar energía limpia y renovable”, señaló Karina Gómez, coordinadora de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) de Iberdrola México, quien puso en valor las alianzas que se tejen con organizaciones civiles para llevar a cabo este tipo de actividades.
Por su lado, Manuel Meléndez, responsable del área de Vinculación Comunitaria de Iberdrola México en Puebla, destacó los beneficios de este tipo de acciones: “Es una contribución al medio ambiente, a nuestro hogar, que sirve también para impulsar la convivencia entre la empresa Iberdrola México y la comunidad de Texcal aquí en Cuyoaco”, expresó Meléndez desde el municipio donde la compañía energética opera desde 2020 un parque fotovoltaico.
Estas jornadas de reforestación, que contaron con más de 1.000 voluntarios, también se extendieron a otras comunidades. La primera del año fue en julio y se realizó en la comunidad ejidal El Recodo de San José Axalco, en Chalco, Estado de México, con la reforestación de 2.000 árboles. La siguiente fue en San Felipe, municipio San Pedro de Almoloyán, en Guanajuato, con 1.000 árboles sembrados. La tercera reforestación se llevó a cabo en el Telebachillerato Comunitario de Laguna de Vaquerías, en San Juan del Río, en el estado de Querétaro, con la plantación de 2.000 árboles. Además, la reforestación de 1.000 árboles endémicos dentro del Instituto Tecnológico del Istmo, en Juchitán de Zaragoza, Oaxaca.
El joven Francisco Gómez, uno de los voluntarios que participó en la jornada de reforestación de septiembre, dijo: “Me siento feliz de haber dejado esta huellita el día de hoy. Estamos viviendo un momento complicado para el medio ambiente y acciones como esta hacen falta. Yo creo que plantar un árbol nunca está de sobra”.
Desde 2022, Iberdrola México ha sembrado en total 21.000 árboles a través de acciones de voluntariado en las comunidades y regiones donde tiene centrales de generación de electricidad, sumando a los objetivos de forestación y sostenibilidad de Grupo Iberdrola, considerada una de las compañías más sostenibles del mundo en un reciente ranking de Time con la consultora Statista.