Donald Trump elige como director del FBI a un leal muy crítico con la principal agencia federal de investigación
Con la nominación de Kash Patel, el republicano aspira a purgar la institución por sus investigaciones contra él en su primer mandato y las que en el último año condujeron a su imputación en tres causas penales
El presidente electo de EE UU, Donald Trump, ha fichado para dirigir el FBI a Kash Patel, un leal que le ayudará en su intento de poner patas arriba las fuerzas de seguridad y librar al Gobierno de muchos de los que considera conspiradores o “enemigos internos”. Es la última bomba de Trump contra el establishment de Washington y un ejemplo de hasta dónde está dispuesto a poner a prueba a los republicanos del Senado, donde tienen la mayoría, a la hora de confirmar a sus nominados. Patel se ha mostrado partidario de cerrar la sede de la agencia en Washington, despedir a sus dirigentes y poner “a raya” a las fuerzas del orden del país.
“Estoy orgulloso de anunciar que Kashyap Kash Patel será el próximo director de la Oficina Federal de Investigación”, FBI en sus siglas inglesas, ha anunciado Trump en la noche de este sábado en la red Truth Social. “Kash es un brillante abogado, investigador y luchador de [el movimiento trumpista] America First que ha pasado su carrera exponiendo la corrupción, defendiendo la Justicia y protegiendo al Pueblo Estadounidense”, ha añadido el republicano, con sus habituales mayúsculas enfáticas.
La elección de Patel, muy crítico con la principal agencia federal de la policía, está en consonancia con la opinión de Trump de que las fuerzas del orden y las agencias de inteligencia del Gobierno requieren una transformación radical y con su deseo declarado de represalias contra supuestos adversarios, incluso, como ha declarado, recurriendo al Ejército. La selección muestra los movimientos del presidente electo, enfadado por la sucesión de investigaciones federales que ensombrecieron su primera Administración y las que más tarde condujeron a ser imputado en tres causas, para colocar en la cúpula del FBI y del Departamento de Justicia a aliados cercanos que cree que le protegerán en lugar de escudriñarle.
Patel “ha desempeñado un papel fundamental en el descubrimiento del engaño de Rusia, Rusia, Rusia (sic) erigiéndose en defensor de la verdad, la rendición de cuentas y la Constitución”, escribe Trump en el post de Truth Social. El mencionado “engaño de Rusia” es como denomina la narrativa trumpista a la investigación sobre la interferencia de Rusia en las elecciones de 2016, que le llevaron por primera vez a la Casa Blanca, y los vínculos entre la inteligencia rusa y personas del círculo más cercano del republicano, y que en su día constituyó una investigación del fiscal especial Robert Mueller. Es una teoría nuclear en la creencia del movimiento MAGA acerca de la existencia de un Estado profundo que, una vez de vuelta en la Casa Blanca, el presidente reelecto se propone desmantelar con nombramientos como el de Patel.
Pese a la mayoría republicana en el Senado, no está claro si Patel será confirmado como director del FBI, aunque Trump ha planteado la posibilidad de usar los recesos en la Cámara alta para sacar adelante este y otros nombramientos especialmente discutidos. Si el Senado lo valida, Patel Patel sustituiría a Christopher Wray, nombrado por Trump en 2017 tras despedir abruptamente a James Comey, pero que rápidamente cayó en desgracia con el presidente y sus aliados. Aunque el cargo conlleva un mandato de 10 años, la destitución de Wray era un secreto a voces por las abiertas y duras críticas de Trump contra él y el FBI, especialmente tras el registro de su mansión en Florida en busca de documentos clasificados —el conocido caso de los papeles de Mar-a-Lago— y otras dos investigaciones que acabaron con sendas imputaciones. Estas dos últimas, las únicas que quedaban pendientes, relativas al intento de pucherazo en Georgia y su papel en la insurrección del Capitolio, han sido retiradas esta semana por el fiscal especial Jack Smith.
El FBI es la agencia encargada no sólo de investigar violaciones de la ley federal, sino también de proteger al país de ataques terroristas, actos de espionaje extranjero y otras amenazas.