Albares considera “absurdo” abordar ahora el envío de tropas de paz europeas a Ucrania
El ministro español de Exteriores confía en que 2025 sea el año del fin de la guerra iniciada por Rusia
“Este año tiene que ser el que Ucrania conquiste la paz, una paz justa y que respete su libertad, su soberanía y la Carta de Naciones Unidas”. José Manuel Albares, ministro español de Exteriores, ha secundado este martes desde Ucrania la expectativa generalizada entre las cancillerías occidentales de que la guerra tiene números de terminar en 2025. Así lo desea Volodímir Zelenski, jefe de Estado ucranio,...
“Este año tiene que ser el que Ucrania conquiste la paz, una paz justa y que respete su libertad, su soberanía y la Carta de Naciones Unidas”. José Manuel Albares, ministro español de Exteriores, ha secundado este martes desde Ucrania la expectativa generalizada entre las cancillerías occidentales de que la guerra tiene números de terminar en 2025. Así lo desea Volodímir Zelenski, jefe de Estado ucranio, y así lo quiere sobre todo el presidente estadounidense, Donald Trump. Albares ha asegurado a su homólogo ucranio, Andrii Sibiga, que el Gobierno hará todo lo posible para que haya “un acuerdo de paz justo”. El titular de Exteriores español ha admitido que el principal interrogante es qué prevé decidir el presidente ruso, Vladímir Putin, y ha considerado “absurdo” hablar por ahora de la posibilidad de enviar tropas de paz europeas a Ucrania.
Albares ha realizado su tercera visita a Ucrania desde el inicio de la invasión, la primera desde 2023, cuando estuvo en Kiev con motivo de una cumbre de la Unión Europea. Los representantes del Gobierno se han prodigado poco en visitas al país invadido, comparado con otros países clave de la UE. Es el decimoquinto país del mundo que ha aportado más ayuda a Kiev, según el Instituto para la Economía Global de Kiel, y es el cuarto país de la UE con más refugiados ucranios, según estadísticas de la Comisión Europea. El Instituto de Kiel, que elabora el análisis más completo de la aportación internacional a Ucrania, estimó el pasado diciembre que España ha transferido asistencia de todo tipo —militar, humanitaria y financiera— valorada en 1.461 millones de euros. En proporción al PIB, España cae a la posición número 28 de un total de 41 Estados que analiza este organismo.
Albares se ha traslado también a Lviv para inaugurar el primer centro de actividades culturales de la Unesco en Ucrania, financiado con 1,7 millones de euros por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo. La sede se ubica en un edificio modernista construido en 1912, en los últimos años de Lviv como ciudad del imperio austro-húngaro.
“He trasladado al ministro de Exteriores de Ucrania que esta guerra no puede acabar con una paz injusta, España hará lo posible para que termine con una paz justa”, ha dicho Albares tras su reunión con Sibiga. El jefe de la diplomacia ucrania afirmó este enero en el diario Pravda que la única forma de conseguir esta “paz justa” es con la incorporación plena de Ucrania en la OTAN. Los medios ucranios mencionan a España como uno de los países europeos que se alinean detrás de Alemania como contrarios a la adhesión de Ucrania en la OTAN, por el riesgo a elevar la tensión con Rusia.
Albares ha indicado que la posición del Gobierno es la acordada en las últimas cumbres de la Alianza Atlántica, que Ucrania debe ser miembro de la OTAN, pero no en un plazo breve, como desearía Kiev, porque podría implicar un conflicto armado a mayor escala: “El camino de Ucrania [hacia la OTAN] está ahí, pero hay que comprender el momento crítico en el que se encuentra Ucrania, en guerra con Rusia”.
Preguntado por si un conflicto cerrado parcialmente con un alto el fuego o un armisticio supondría que Ucrania quede también fuera de la OTAN, Albares ha respondido que “son hipótesis que ni se plantean porque todavía hay una guerra-guerra”. Otro asunto que el titular de Exteriores ha indicado que es “absurdo hablar ahora de ello” es del debate abierto por varios países de la UE, con Francia a la cabeza, de enviar fuerzas de paz europeas a Ucrania para garantizar el cumplimiento de unos futuros acuerdos de paz: “Putin no quiere la paz. Solo habla de guerra, de ganarla e ir hasta el final. Es absurdo hablar ahora de fuerzas de paz”.
Albares se reunirá este miércoles en Varsovia con su homólogo polaco. El ministro de Defensa de Polonia, Władysław Kosiniak-Kamysz, aseguró la semana pasada que si Europa tiene que enviar una fuerza de paz a Ucrania, la responsabilidad debería recaer en países alejados geográficamente de Rusia. Kosiniak-Kamysz apuntó directamente el 25 de enero en la agencia Bloomberg a España a Italia como países que son ejemplo de lo que él considera “una falta de inversión en seguridad y defensa” de la OTAN.