Cuatro muertos y 18 heridos en un tiroteo en una zona de ocio de Birmingham, en Alabama

Múltiples tiradores abrieron fuego contra un grupo de personas que estaba en la calle en la localidad el sábado por la noche

Un grupo de personas atiende a un herido tras el tiroteo en Birmingham (Alabama), en una imagen publicada en redes sociales.

Cuatro personas han muerto y 18 han resultado heridas en un tiroteo registrado a última hora del sábado en la ciudad estadounidense de Birmingham, en el estado de Alabama, en el sureste del país, sin que por ahora estén claras las causas del suceso. Según la investigación preliminar, varios sospechosos dispararon contra un grupo numeroso de personas que se encontraban en una zona pública.

El jefe de la policía de Birmingham, Scott Thurmond, dijo que las autoridades creen que el tiroteo iba dirigido contra una de las personas asesinadas, posiblemente en un asesinato por encargo. Dijo que un vehículo se detuvo y múltiples tiradores salieron y comenzaron a disparar antes de salir huyendo. “Creemos que hubo un ‘golpe’, si se quiere, contra esa persona en particular”, dijo Thurmond en una rueda de prensa retransmitida por las redes sociales.

“Los oficiales del Departamento de Policía de Birmingham están ante una escena de múltiples personas heridas de bala con posibles múltiples víctimas”, había anunciado inicialmente en su cuenta en la red social X dicho organismo, señalando que el incidente se había producido en la zona de Five Points, un área que alberga locales de ocio, restaurantes y bares, y suele estar abarrotada los sábados por la noche. El tiroteo se produjo fuera de Hush, un salón de narguile y puros. Las imágenes difundidas por las agencias de noticias muestran manchas de sangre en la acera.

Truman Fitzgerald, portavoz de la policía, señaló que “varios tiradores” abrieron fuego contra un grupo de personas en torno a las 23.00 horas (hora local) y confirmó que hay al menos cuatro fallecidos. “Hay decenas de heridos de bala en la zona”, manifestó, según recogió la cadena de televisión estadounidense CNN. La policía rebajó luego la cifra a 18.

“Los detectives creen que el tiroteo no fue aleatorio”, dijo Fitzgerald a la agencia de noticias. A primera hora del domingo no había ningún sospechoso detenido. Según la policía, en el lugar de los hechos se recuperaron unos 100 casquillos de bala. Thurmond dijo que las fuerzas del orden creen que se usaron armas automáticas. Los investigadores estaban tratando de determinar si alguien devolvió los disparos, creando un fuego cruzado.

El Hospital de la Universidad de Alabama en Birmingham recibió a 11 de los alcanzados por las balas, incluida una de las personas que murió, según informó Hannah Echols, portavoz del hospital, a la cadena de televisión CNN. Otros dos hombres y una mujer fueron declarados muertos en el lugar del tiroteo, según ha señalado la policía en un vídeo distribuido en redes sociales. No se ha hecho público el estado de salud de los heridos ni la gravedad de las lesiones.

Fitzgerald destacó que las autoridades han abierto una investigación. “Haremos todo lo posible para esclarecer, identificar y detener a los responsables de atacar a nuestra gente”, aseguró a la CNN. También explicó que las víctimas se encontraban en la acera o en la calle y, por tanto, queda determinar si los tiradores se acercaron a ellas a pie o pasaron en un vehículo.

El suceso eleva a 403 el número de tiroteos masivos registrados en lo que va de año en Estados Unidos, según el recuento de Gun Violence Archive, que define uno de estos sucesos como aquel en el que hay al menos cuatro víctimas en un tiroteo, sin incluir entre ellas al responsable del ataque. Es el tercero que se produce en la ciudad de Birmingham.

El alcalde de dicha población, Randall Woodfin, pidió a los legisladores de Alabama que prohíban los dispositivos de conversión de armas, como los interruptores Glock, que permiten “convertir un arma semiautomática en un arma totalmente automática que descarga todas las balas en cuestión de segundos”, según dijo en un mensaje de Facebook el domingo por la mañana. “Esto no debería ser objeto de debate. Esta mañana, demasiadas familias tienen que recoger los pedazos de una nueva normalidad injusta que no incluye a su ser querido”, escribió.

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