Una investigación revela insultos antisemitas y proclamas fascistas en las juventudes del partido de Meloni

Miembros de las juventudes de Hermanos de Italia, el partido de la primera ministra Giorgia Meloni, han aparecido en vídeos en los que profieren insultos racistas y antisemitas y en los que lanzan proclamas fascistas prohibidas por ley. La revelación de estas imágenes ponen en apuros a la líder del partido ultraderechista y jefa del Gobierno italiano, que desde que llegó al poder ha tratado de suavizar su imagen.

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Miembros de las juventudes de Hermanos de Italia, el partido de la primera ministra Giorgia Meloni, han aparecido en vídeos en los que profieren insultos racistas y antisemitas y en los que lanzan proclamas fascistas prohibidas por ley. La revelación de estas imágenes ponen en apuros a la líder del partido ultraderechista y jefa del Gobierno italiano, que desde que llegó al poder ha tratado de suavizar su imagen.

El portal digital Fanpage ha revelado el contenido de varias conversaciones de chat y las imágenes en las que aparecen integrantes de Juventud Nacional, la cantera del partido de Meloni, que se declaran entre burlas abiertamente “fascistas y racistas”, se mofan de los judíos, a los que acusan de “vivir del Holocausto”; corean himnos en favor del dictador Benito Mussolini, al que se dirigen como “el tío Benito”, o vociferan consignas nazis.

Muchos de los actuales dirigentes de Hermanos de Italia se han formado en política en la organización juvenil del partido. En la actualidad, algunos miembros de las juventudes de la formación trabajan como ayudantes de los diputados de Meloni.

Es el caso de Elisa Segnini, secretaria jefe de la diputada Ylenia Lucaselli, que en los vídeos se jacta, sin ser consciente de que la cámara la está grabando, de no haber dejado de ser “racista y fascista”.

Flaminia Pace, presidenta de la sección de Juventud Nacional de Pinciano, un barrio de Roma, se burla de la senadora de su mismo partido, Ester Mieli, por ser judía e hija de un superviviente del Holocausto. En la grabación se mofa de haber firmado varios comunicados en solidaridad con su compañera de filas judía, “mientras que con los amigos bromeaba con las esvásticas”.

Poco después de que se publicaran las imágenes, Pace anunció su dimisión por “motivos personales”. Algunos miembros de Hermanos de Italia han expresado su solidaridad a la senadora Mieli y han condenado los comentarios de los cachorros del partido. La oposición, en cambio, ha afeado a la primera ministra que haya guardado silencio y no haya reprobado inmediatamente los insultos.

“Sentencias inaceptables”

El presidente del Senado, Ignazio La Russa, miembro de Hermanos de Italia y muy cercano a Meloni, calificó los ataques a los ataques a Mieli como “sentencias inaceptables por parte de algunos militantes de la Juventud Nacional”. Y condenó los agravios en sus redes sociales: “Frases que van en contra de los valores de nuestro partido, firmemente arraigados en los principios de democracia, libertad y respeto a la dignidad humana. Expreso una condena total y firme de todas las formas de racismo y antisemitismo que siempre han estado en las antípodas de los valores que han inspirado mi compromiso político”.

El director organizativo de Hermanos de Italia, Giovanni Donzelli, expresó también a través de un comunicado que en la formación ultraderechista “no hay espacio para racistas, extremistas y antisemitas”. “Las frases escuchadas en videos difundidos que muestran a militantes de nuestro partido utilizando un lenguaje incompatible con los valores de referencia de nuestro movimiento político son inaceptables, a pesar de las formas en que fueron captadas y difundidas”, agregó Donzelli.

El portavoz en el Senado del Partido Democrático (PD), Francesco Boccia, reclamó a Meloni que aclare su posición y destacó que “no es posible que haya espacio, en el partido que representa al jefe del Gobierno italiano, para los que se refieren al Duce [el dictador Benito Mussolini], al antisemitismo y al racismo”. Y valoró que la investigación periodística “muestra que en el seno de Hermanos de Italia no se han distanciado de un mundo subterráneo que existe y que está vinculado a modelos y referencias de la extrema derecha”.

Simona Malpezzi, líder del grupo del PD en la Comisión extraordinaria para la lucha contra los fenómenos de intolerancia, racismo, antisemitismo e incitación al odio y la violencia, también pidió la intervención de la primera ministra: ”Las tímidas y balbuceantes palabras de Donzelli no bastan: se necesitan declaraciones claras y sin ambigüedades de Giorgia Meloni”, a quien se pide no solo que censure, sino también que expulse a las franjas extremistas, racistas y fascistas dentro de Juventud Nacional.

El Movimiento 5 Estrellas, a través de su portavoz en la Cámara de los diputados, Francesco Silvestri, ha reprobado que “el silencio de Meloni sobre los jóvenes de Hermanos de Italia que exudan antisemitismo y fascismo dice claramente que ella lo sabía”. Y ha agregado: “Al fin y al cabo, ¿cómo no se ha dado cuenta? ¿Y cómo podemos pensar que ahuyentará a estos personajes cuando ella misma no hace más que hablar desde hace años de lo peor del país?”. También ha denunciado “la complicidad de quienes tienen cargos en el Parlamento y contratan a estas personas, que, por tanto, son pagadas con dinero público”.

Riccardo Magi, secretario de +Europa, también ha cargado contra el silencio de Meloni. “La investigación de Fanpage ha abierto la caja de Pandora del fascismo que habita en los bajos fondos de los Hermanos de Italia. Homofobia, racismo, nostalgia por Benito Mussolini, simpatías por Adolf Hitler y el nazismo, antisemitismo que les lleva incluso a atacar a uno de sus subsecretarios: el silencio de Giorgia Meloni hasta ahora ha sido ensordecedor y ahora se convierte en un verdadero asentimiento”, escribió en sus redes sociales.

Matteo Renzi, de Italia Viva, también denunció que “el creciente clima de antisemitismo que está surgiendo en toda Europa dentro de los grupos extremistas es motivo de gran preocupación”.

Fanpage ha destacado que su investigación “ha mostrado un movimiento infectado por el neofascismo de la cabeza a los pies”. Y ha precisado: “No estamos hablando de manzanas podridas dentro de Juventudes Nacionales, sino —como mínimo— de un movimiento podrido dentro de Hermanos de Italia”.

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