El activista prodemocracia hongkonés Nathan Law pide asilo en el Reino Unido
El fundador del partido Demosisto espera que su decisión sirva para “dar una voz de alerta” ante “la expansión autoritaria de China”
Nathan Law, uno de los activistas prodemocracia más conocidos en Hong Kong, ha hecho pública su petición de asilo en el Reino Unido, donde reside exiliado desde hace seis meses. Así lo comunicó este lunes a través de una carta abierta en las páginas del diario británico The Guardian. Por medio de este gesto, Law pretende “dar una voz de alerta y recordar” al país y a la Unión Europea el “peligro” que representa la “expansión autoritaria de China”.
Law abandonó Hong Kong el pasa...
Nathan Law, uno de los activistas prodemocracia más conocidos en Hong Kong, ha hecho pública su petición de asilo en el Reino Unido, donde reside exiliado desde hace seis meses. Así lo comunicó este lunes a través de una carta abierta en las páginas del diario británico The Guardian. Por medio de este gesto, Law pretende “dar una voz de alerta y recordar” al país y a la Unión Europea el “peligro” que representa la “expansión autoritaria de China”.
Law abandonó Hong Kong el pasado mes de julio, tras la entrada en vigor de una nueva ley de seguridad impuesta desde Pekín que puenteaba el aparato legislativo local y contravenía los derechos y libertades recogidos en la Ley Básica que regula el territorio. En Twitter, el activista explicó que su seguridad estaba “en peligro” dada “la campaña de arrestos en masa que ya ha empezado”.
En octubre, las autoridades emitieron una orden de busca y captura en su contra después de que no acudiera a su cita ante los tribunales, acusado de reunión ilegal a causa de la vigilia celebrada el 4 de junio en memoria de la matanza de Tiananmen, evento anual que el Ejecutivo local suspendió en 2020 por primera vez en la historia de Hong Kong, aduciendo los riesgos sanitarios que representaba la expansión del coronavirus.
Nathan Law saltó a la fama como uno de los rostros más conocidos durante la Revolución de los Paraguas de 2014, unas protestas que pedían la elección directa de la máxima autoridad política local y que durante 79 días tomaron las calles del centro de la ciudad. Tras encabezar la Federación de Estudiantes de Hong Kong, en 2016 fue uno de los miembros fundadores del partido prodemocracia Demosisto, convirtiéndose en su secretario general.
En las filas de esta formación se presentó a las elecciones de ese mismo año, en las que marcó un hito al convertirse a sus 23 años en el diputado más joven de la historia del territorio. Law, no obstante, fue descalificado en julio de 2017 tras una polémica derivada por la fórmula empleada para jurar el cargo —usando un tono ascendente para darle un significado interrogativo—. Al mes siguiente fue encarcelado junto a su compañero Joshua Wong acusado de la ocupación ilegal de espacios públicos durante la Revolución de los Paraguas, hasta que en octubre ambos obtuvieron la libertad bajo fianza.
Su evasión le ha permitido repetir el destino de Wong, condenado de nuevo a principios de este mes, junto a otras figuras destacadas como Agnes Chow e Ivan Lam, a 13 meses y medio de prisión por delitos relacionados con el cerco a la comisaría central de la policía durante las movilizaciones masivas del año pasado.
Law empleó su tribuna para afirmar que la idea de que China “formará parte alguna vez del mundo democrático” es “una ilusión a abandonar”, y llamó al Reino Unido y a la Unión Europea a reforzar su posición frente al gigante asiático. “Un enfoque asertivo hacia China y su posicionamiento como uno de los mayores enemigos del país es ahora un consenso bipartidista [en Estados Unidos]”, mientras que al otro lado del Atlántico “ese consenso todavía debe construirse”.
A ojos del joven político, Londres es un lugar “emocionante y acogedor”. “Cuyas raíces culturales compartidas me hacen sentir tranquilo”, expresó. “Esta experiencia me colocará en una mejor situación para ofrecer consejos al Gobierno sobre cómo gestionar la llegada de otros compatriotas de Hong Kong”, agregó. En julio de este año y en respuesta a la promulgación de la Ley de Seguridad Nacional, el Reino Unido ofreció a los 350.000 habitantes de la antigua colonia que reconoce como “ciudadanos británicos de ultramar” la posibilidad de residir en el país por periodos renovables e iniciar así la transición hacia una nacionalidad plena.