El Ejército sirio irrumpe en Hama y dispara contra los manifestantes
La incursión se ha producido mientras miles de vecinos tomaban las calles de la ciudad
El Ejército sirio ha irrumpido en la ciudad de Hama, en el centro-oeste del país, en una operación en la que ha rodeado viviendas, ha efectuado diversas detenciones y ha disparado a discreción en algunas zonas, según informan fuentes locales. Mientras tanto, los tanques que han cercado la ciudad durante las últimas horas se han trasladado a localidades del norte, próximas a la frontera con Turquía.
La incursión se ha producido mientras miles de vecinos tomaban las calles al grito de "Dios es grande" para protestar contra la represión gubernamental con la que el Ejército sirio ha tratado...
El Ejército sirio ha irrumpido en la ciudad de Hama, en el centro-oeste del país, en una operación en la que ha rodeado viviendas, ha efectuado diversas detenciones y ha disparado a discreción en algunas zonas, según informan fuentes locales. Mientras tanto, los tanques que han cercado la ciudad durante las últimas horas se han trasladado a localidades del norte, próximas a la frontera con Turquía.
La incursión se ha producido mientras miles de vecinos tomaban las calles al grito de "Dios es grande" para protestar contra la represión gubernamental con la que el Ejército sirio ha tratado de atajar las manifestaciones que desde mediados de marzo se suceden en Siria.
"Al menos 30 autobuses de transporte de soldados y de agentes de Policía entraron en Hama esta mañana", ha declarado un vecino, propietario de un taller de nombre Ahmad. "Han disparado a discreción en los barrios residenciales", ha añadido.
Estos incidentes se producen un mes después de que al menos 60 personas murieran en distintas manifestaciones a lo largo y ancho del país en una de las jornadas más trágicas desde que se iniciaran las revueltas en Siria. Los peores enfrentamientos se produjeron en Hama, donde los disparos contra una manifestación multitudinaria causaron al menos 53 muertos, según cifras ofrecidas por activistas y el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos.
Hama, situada al norte de Damasco, fue escenario en 1982 de una sangrienta matanza del Ejército ordenada por Hafez el Asad, padre del actual presidente, para sofocar una rebelión islamista. Murieron 10.000 personas. En los últimos meses Hama se ha convertido en uno de los focos más activos contra el régimen.