Ejecutan a seis miembros de una familia en Jalisco
Los cuerpos de dos niñas, dos mujeres y dos varones fueron encontrados ayer en el interior de una casa de Zapotlán el Grande, al sur de Jalisco, propiedad del secretario de Agricultura, Alberto Cárdenas. Según la policía de Guadalajara, las seis personas estaban escondidas y cada una de ellas había recibido un tiro de gracia.
Los ejecutados, que se supone que son familiares del funcionario federal, aunque este dato no ha sido confirmado aún, son, según el diario El Universal: Félix Bautista Lugo, de 69 años; Carmen Campos Cárdenas, de 40; Roberto Bernardino Campos, de 15; Magali Bautist...
Los cuerpos de dos niñas, dos mujeres y dos varones fueron encontrados ayer en el interior de una casa de Zapotlán el Grande, al sur de Jalisco, propiedad del secretario de Agricultura, Alberto Cárdenas. Según la policía de Guadalajara, las seis personas estaban escondidas y cada una de ellas había recibido un tiro de gracia.
Los ejecutados, que se supone que son familiares del funcionario federal, aunque este dato no ha sido confirmado aún, son, según el diario El Universal: Félix Bautista Lugo, de 69 años; Carmen Campos Cárdenas, de 40; Roberto Bernardino Campos, de 15; Magali Bautista Campos, de ocho; Maira Bautista Campos, de siete, y Adriana Campos Cárdenas de 29 años.
Al parecer, según la policía, la familia fue ejecutada el lunes, pero hasta la madrugada de ayer las autoridades no se dieron por enteradas. La familia había llegado hacía dos meses a la casa donde fueron encontrados y en la que se encontraban ayer miembros del Ejército mexicano y de la Policía Federal.
El general de la policía del Estado de Jalisco declinó hacer comentario alguno acerca del suceso, que se asemeja a las ejecuciones que tienen relación con los crímenes sobre drogas.
En lo que va de año, cerca de 1.700 personas han muerto en México en relación con sucesos de drogas. Lo extraño de este caso es que entre las víctimas haya menores, dos de ellos niños. Los narcotraficantes no suelen ensañarse con ellos, aunque es cierto que en los últimos meses esta costumbre se ha terminado.
A pesar de que el presidente de México, Felipe Calderón, ha enviado, desde que llegó al poder, a miles de policías federales para combatir a los narcotraficantes, lo cierto es la violencia no ha decrecido.