Lula señala el crecimiento y el consenso político como los principales objetivos de su nuevo mandato

El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, que el domingo fue reelegido para un nuevo período de cuatro años con un 60,8% de los votos, ha señalado que las principales metas de su nuevo mandato serán el desarrollo económico sin cambios bruscos y la búsqueda de un mayor consenso político, por lo que ha pedido a la oposición que actúe con "responsabilidad" esta nueva legislatura, según fuentes ministeriales.

Sobre los planes de Lula para su próximo mandato habló con la prensa extranjera el ministro de Relaciones Institucionales, Tarso Genro, portavoz político del presidente, quie...

El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, que el domingo fue reelegido para un nuevo período de cuatro años con un 60,8% de los votos, ha señalado que las principales metas de su nuevo mandato serán el desarrollo económico sin cambios bruscos y la búsqueda de un mayor consenso político, por lo que ha pedido a la oposición que actúe con "responsabilidad" esta nueva legislatura, según fuentes ministeriales.

Sobre los planes de Lula para su próximo mandato habló con la prensa extranjera el ministro de Relaciones Institucionales, Tarso Genro, portavoz político del presidente, quien reiteró que la intención es formar un gobierno amplio.

Menor presencia del PT

Genro dijo que, a diferencia del primer mandato, cuando la mayor carga de las negociaciones para formar gobierno la llevó el Partido de los Trabajadores (PT), ahora Lula se ocupará "personalmente" de ese diálogo. Lula "no delegará nada" en lo relativo al próximo gabinete, que pretende incluir a representantes del mayor número de partidos posible, explicó Genro Tarso Genro declaró además que Lula llevará el proceso con calma, pues tiene tiempo hasta el próximo 1 de enero, cuando comenzará su segundo mandato. Aunque el ministro no lo confirmó, sus declaraciones y las de otras personas cercanas a Lula reafirman que la presencia del PT en el nuevo gabinete se reducirá significativamente.

El PT, fundado por Lula en 1980, fue el eje de todos los asuntos de corrupción ventilados durante el último año y medio y acabó siendo un "dolor de cabeza", como el propio presidente lo definió hace dos semanas. Según Genro, el PT deberá ser "refundado", "renovado" y recuperar la condición de "referencia ética" que fue hasta que Lula llegó al poder. Sin embargo, pese a sus críticas, dijo que el PT "se recuperará" y mantendrá un espacio "muy importante" en el espectro político brasileño, como defensor de "ideas progresistas" y en la búsqueda del "socialismo democrático".

Reforma política

Por su parte, Lula ha desgranado, en tres entrevistas diferentes que concedió a redes de televisión que pretende proponer una amplia reforma política, que puede provocar cambios en el Parlamento, en el sistema electoral y en los partidos políticos, así como reformas económicas para fortalecer las pequeñas y micro empresas, entre otros proyectos. "Tenemos un Congreso muy diferenciado (en Brasil). Son muchos partidos y pretendo trabajar para construir la mayoría necesaria para aprobar proyectos que consideramos importantes", afirmó.

El presidente brasileño lamentó las declaraciones de algunos líderes opositores que desde ya pronostican una difícil relación entre el futuro gobierno y la oposición, y rechazan la invitación al diálogo hecha por el gobernante. El presidente electo ha asegurado que, ante la decisión de la oposición de insistir en abrir comisiones parlamentarias para investigar supuestas irregularidades del Gobierno, pretende convivir con sus rivales como "conviven los partidos conservadores y de izquierda en todo el mundo".

En una entrevista a la red Bandeirantes, Lula ha salido al paso a los rumores de que modificará su política económica para dar mayor prioridad al crecimiento y menor al control de la inflación y de los gastos públicos. Ha aclarado que el crecimiento será fruto de lo que ya hizo para consolidar las bases de la economía y no de un cambio en la política económica. "Los tipos vienen cayendo y van a continuar cayendo, vamos a continuar controlando la inflación y los gastos y el país va a crecer", afirmó. "Podemos esperar el crecimiento. El no aparecerá ahora porque tuvimos un tercer trimestre muy débil, pero todos estamos convencidos de que el país necesita crecer y que crecerá a un ritmo del 5%", agregó.

En esta aparición televisiva, el mandatario brasileño también ha reafirmado su confianza en el ministro de Hacienda, Guido Mantega, y ha asegurado que seguirá en su puesto la próxima legislatura.