El Gobierno palestino justifica el atentado de ayer como un acto de "resistencia a Israel"
Un dirigente de una organización radical muere al estallar su coche en Gaza
La organización extremista Hamás, que gobierna la Autoridad Nacional Palestina (ANP), ha justificado hoy el atentado que ayer causó la muerte a cuatro israelíes como un acto de "resistencia" ante "los crímenes israelíes". El presidente palestino, Mahmud Abbas, ha condenado el ataque. Esta mañana ha muerto un alto dirigente de un grupo radical al estallar su coche en Gaza.
Khalil al Quqa es uno de los dos líderes de los Comités Populares de la Resistencia, un grupo que se negó a sumarse al alto el fuego acordado por las organizaciones radicales palestinas en marzo de 2005. Al Quqa ha mue...
La organización extremista Hamás, que gobierna la Autoridad Nacional Palestina (ANP), ha justificado hoy el atentado que ayer causó la muerte a cuatro israelíes como un acto de "resistencia" ante "los crímenes israelíes". El presidente palestino, Mahmud Abbas, ha condenado el ataque. Esta mañana ha muerto un alto dirigente de un grupo radical al estallar su coche en Gaza.
Khalil al Quqa es uno de los dos líderes de los Comités Populares de la Resistencia, un grupo que se negó a sumarse al alto el fuego acordado por las organizaciones radicales palestinas en marzo de 2005. Al Quqa ha muerto al estallar el coche en el que viajaba cerca de una mezquita en la ciudad de Gaza. Fuentes palestinas indican que la explosión se debió al impacto de un misil disparado por un helicóptero israelí, pero el Ejército ha negado su implicación en este suceso.
La muerte de este miliciano ha desatado una violenta reacción de los extremistas en Gaza. Al menos dos palestinos han perdido la vida y otros veinte han resultado heridos en un enfentamiento entre hombres armados leales al líder asesinado y las fuerzas de seguridad palestinas, según fuentes médicas. Los milicianos de Al Quqa responsabilizan de su muerte a Israel pero también a las autoridades palestinas.
Represalia israelí
Ayer, Israel lanzó ayer una operación militar por tierra, mar y aire contra los activistas radicales en el norte de la franja de Gaza. El Gobierno israelí en funciones decidió además suspender sus contactos con la Autoridad ANP en represalia por el atentado suicida que segó la vida a cuatro israelíes en Cisjordania. El terrorista, de 24 años y vestido como un colono judío, hacía autostop cerca del asentamiento de Kedumim, en el norte de los territorios ocupados. Cuando las víctimas pararon su coche para recogerle, subió e hizo estallar la bomba que portaba. El atentado ha sido asumido por el brazo armado de Al Fatah.
El ministro de Defensa israelí, Shaúl Mofaz, había advertido que Israel consideraría responsable al nuevo Gobierno formado por Hamás de cualquier acto terrorista palestino que se cometiera a partir de ahora. Hoy, el grupo radical descrito en ataque como "la respuesta natural a los crímenes israelíes". "La resistencia es un derecho legítimo de las personas que viven bajo ocupación", ha señalado el ministro de Información palestino, Youssef Rizqa.