Arafat consume sus últimas horas de vida

El ministro de Exteriores palestino, Nabil Shaat, ha ejercido esta tarde como portavoz de la delegación de alto nivel que ha viajado hasta París para visitar al presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yasir Arafat, ingresado en el hospital militar de Percy desde hace doce días. Shaat ha señalado que Arafat está con vida: su corazón, pulmones y cerebro funcionan, pero está en coma profundo. El ministro palestino ha asegurado además que, en caso de que muera Arafat, el presidente del Parlamento asumirá provisionalmente su cargo hasta la convocatoria en 60 días de elecciones y bajo superv...

El ministro de Exteriores palestino, Nabil Shaat, ha ejercido esta tarde como portavoz de la delegación de alto nivel que ha viajado hasta París para visitar al presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yasir Arafat, ingresado en el hospital militar de Percy desde hace doce días. Shaat ha señalado que Arafat está con vida: su corazón, pulmones y cerebro funcionan, pero está en coma profundo. El ministro palestino ha asegurado además que, en caso de que muera Arafat, el presidente del Parlamento asumirá provisionalmente su cargo hasta la convocatoria en 60 días de elecciones y bajo supervisión internacional.

Nabil Shaat viajó anoche a París desde Ramala junto con el primer ministro palestino, Ahmed Qurei; el secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina y ex primer ministro, Mahmud Abbas; y el presidente del Consejo Legislativo —Parlamento—, Rouhi Fatú. La visita venía precedido por la polémica, e incluso quedó en suspenso durante unas horas después de que la esposa del rais, Suha Arafat, les acusara de pergeñar una "conspiración" para "matar a Arafat en vida". Poco después, una fuente anónima palestina contraatacaba indicando que Suha sólo deseaba ganar tiempo para quedarse con la fortuna del mandatario agonizante.

"Con profundo dolor hemos venido a Paris para ver al presidente, que está muy enfermo. [...] Su situación se ha deteriorado. Desde el viernes está en coma y ahora ese coma se ha profundizado. Pero reconociendo que su situación es crítica, [Arafat] está con vida. Su cerebro, sus pulmones y su corazón funcionan, y no veo razón para diseminar rumores sobre su muerte o alentando esperanzas sobre su pronta recuperación. Está en manos de Dios y de los médicos", ha explicado Nabil Shaat en una rueda de prensa convocada tras el encuentro de los cuatro líderes palestinos con el presidente francés, Jacques Chirac, en el Eliseo.

Shaat ha explicado que sólo uno de ellos, Ahmed Qurei, ha podido entrar en la sala donde se encuentra Arafat. Sin embargo, la visita les ha servido para hablar con los médicos, que era precisamente su motivo oficial. "Hemos hablado en profundidad con los médicos y estamos satisfechos con todo lo que se ha hecho para ponerle en vías de recuperación. No tenemos una explicación clara sobre por qué se ha deteriorado su estado, no hay un diagnostico claro. No es cáncer o un problema maligno, y los doctores han descartado que haya sido envenenado. Esto deja muchas hipótesis abiertas que los médicos están analizando", ha señalado Shaat, para luego indicar que la edad de Arafat —75 años—, las dificultades de su vida —sobrevivió a un accidente aéreo, que le dejó muy tocado— y el haber pasado tres años y medio "encarcelado en su oficina bajo el asedio israelí" son las posibles causas del deterioro sufrido por su salud en las últimas semanas.

Entre las hipótesis barajadas por los expertos para explicar el viaje se contaba que su motivo fuera convencer a la esposa de Arafat para que desconectara al presidente del pulmón artificial que supuestamente le mantiene con vida. Sin embargo, Shaat no sólo ha negado que necesite de esta máquina para sobrevivir —"sus pulmones funcionan"—, sino que ha aludido también a la posibilidad de apagarla, es decir, a someter al presidente a un proceso de eutanasia. "Descarto cualquier planteamiento sobre eutanasia. Los musulmanes no aceptamos ese concepto. Ni los médicos ni la familia lo han planteado. Vivirá o morirá de acuerdo con la capacidad de su cuerpo y de la voluntad divina", ha declarado taxativo.

Por último Shaat ha querido referirse al proceso político abierto por la enfermedad de Arafat, para asegurar: "Nuestro Gobierno está funcionando en el ámbito institucional y constitucional. Dios no lo quiera, pero si Arafat muriera el presidente de la Cámara pasaría a ser presidente interino y con la ayuda de todos nosotros y de la comunidad internacional trataría de encarrilarlo todo para que haya elecciones en 60 días".

Fuentes oficiales palestinas citadas por la cadena de televisión qatarí Al Yazira han indicado poco antes desde París que la declaración que ponga fin de forma oficial a la vida de Yaser Arafat se hará desde Ramala. De ser esto cierto, no es previsible que se produzca hasta después del regreso de la delegación oficial palestina, que se encuentra ahora en la capital francesa. El Gobierno palestino ya ha indicado que Arafat será enterrado en Ramala, donde su residencia, la Mukata, hará las veces de mausoleo.