Blair y Bush se reúnen en su peor momento de popularidad para encauzar la posguerra en Irak
El encuentro se produce en plena caída de los índices de popularidad de ambos políticos por las pruebas falsas sobre el arsenal de Sadam Husein
La posguerra en Irak será, previsiblemente, uno de los temas centrales que el primer ministro británico, Tony Blair, llevará a Estados Unidos en la visita que hoy inicia a ese país. La llegada de Blair se produce en mitad de la polémica por la autenticidad de las pruebas sobre el armamento del régimen de Sadam Husein.
Al igual que el presidente de EEUU, George W. Bush, Blair vive días de críticas crecientes entre algunos de sus conciudadanos, porque continúa el goteo de muertes en Irak y por los informes errados sobre el alcance de la amenaza que el arsenal del régimen del dictador Sada...
La posguerra en Irak será, previsiblemente, uno de los temas centrales que el primer ministro británico, Tony Blair, llevará a Estados Unidos en la visita que hoy inicia a ese país. La llegada de Blair se produce en mitad de la polémica por la autenticidad de las pruebas sobre el armamento del régimen de Sadam Husein.
Al igual que el presidente de EEUU, George W. Bush, Blair vive días de críticas crecientes entre algunos de sus conciudadanos, porque continúa el goteo de muertes en Irak y por los informes errados sobre el alcance de la amenaza que el arsenal del régimen del dictador Sadam Husein suponía.
Blair, uno de los más leales aliados de la Casa Blanca —junto con el presidente del Gobierno español, José María Aznar—, expresará su deseo de que Washington y sus aliados "terminen el trabajo comenzado en Irak y en Afganistán, para que los Estados terroristas se transformen en naciones prósperas", según ha indicado la agencia británica Press Association.
Sólo un punto de sombra se proyectará sobre el encuentro entre Blair y Bush: la suerte de los nueve ciudadanos británicos que permanecen presos en Guantánamo, junto a los cerca de 600 prisioneros, supuestos miembros de Al Qaeda, que en esa base militar retiene el Ejército de EEUU