Un foco de ántrax en la embajada de EE UU en Lituania, primer caso detectado en Europa
Cuatro oficinas postales de la Agencia de Alimentos de EE UU dan positivo por ántrax.- Investigan dos nuevos casos de ántrax en Nueva York y Nueva Jersey
La amenaza del ántrax que sigue poniendo en jaque a las autoridades sanitarias de EE UU, ha llegado a Europa. Esporas de la bacteria del carbunco han sido halladas en el correo de la embajada estadounidense en Vilna, capital de Lituania, según han informado fuentes sanitarias del país.
Kazimera Rutiene, directora del laboratorio de Microbiología del Centro de Salud Pública lituano, ha declarado que tras dos días de análisis en el correo de la embajada, los expertos están "seguros al 100%" de la presencia de ántrax.
Al parecer, el hallazgo se ha producido en una de las cinco sacas...
La amenaza del ántrax que sigue poniendo en jaque a las autoridades sanitarias de EE UU, ha llegado a Europa. Esporas de la bacteria del carbunco han sido halladas en el correo de la embajada estadounidense en Vilna, capital de Lituania, según han informado fuentes sanitarias del país.
Kazimera Rutiene, directora del laboratorio de Microbiología del Centro de Salud Pública lituano, ha declarado que tras dos días de análisis en el correo de la embajada, los expertos están "seguros al 100%" de la presencia de ántrax.
Al parecer, el hallazgo se ha producido en una de las cinco sacas -no en las cartas que contenían- llegadas el martes a la embajada. Los análisis practicados son "la prueba fehaciente de que había esporas de bacillus anthracis en el correo" de la embajada, ha dicho Rutiene, quien ha señalado que los resultados finales de los análisis en las otras cuatro sacas estarán listos el viernes.
Richard Boucher, portavoz del departamento de Estado de EEUU, dijo el miércoles en Washington, que la estafeta de correos de la embajada en Lituania se había clausurado y sellado.
La Agencia de Alimentos de EE UU, afectada
Mientras, la amenaza sanitaria sigue extendiéndose en EE UU, al hallarse el bacilo en cuatro oficinas de correos de la Agencia de Alimentos estadounidense en Rockville (Maryland). Según ha informado un portavoz del organismo, los casos no están todavía confirmados, aunque los análisis practicados de forma preliminar han arrojado un resultado positivo.
"Son casos presuntamente positivos, pero no definitivos", ha aclarado el portavoz Lawrence Bachorick, que ha añadido que todos los trabajadores de las oficinas infectadas han sido medicados con antibióticos como precaución.
Un comunicado de la agencia ha informado de que en una quinta dependencia de Correos inspeccionada no se ha detectado la presencia de esporas de la bacteria. El mismo comunicado añade que el resultado definitivo de las pruebas practicadas en las cuatro instalaciones bajo sospecha no se conocerán hasta mañana.
La Agencia de Alimentos ha informado del cierre de todas sus oficinas de Correos en Rockville para proceder a su limpieza y desinfección.
Dos casos sospechosos
Al tiempo, las autoridades sanitarias investigan dos posibles nuevos casos de ántrax cutáneo en los estados de Nueva Jersey y Nueva York, donde ayer falleció una mujer que había contraído la enfermedad del carbunco por inhalación.
El director del Departamento de Salud y Servicios para la Tercera Edad (DHSS) de Nueva Jersey, George DiFerdinando, ha informado de que se investiga un caso sospechoso de ántrax cutáneo en un empleado del Centro de Procesamiento y Distribución Postal en Bellmawr, en el condado de Camden.
Mientras tanto, en Nueva York, las autoridades investigan otro posible caso de ántrax epidérmico en un empleado del mismo centro médico donde trabajaba Kathy Nguyen, de 61 años de edad, que falleció ayer como consecuencia del carbunco pulmonar. "Seguimos investigando cómo resultó infectada. Hasta ahora se han tomado unas 30 muestras en el centro médico donde trabajaba", ha indicado el alcalde, Rudolph Giuliani.
Los últimos casos de ántrax en Nueva York y Nueva Jersey suponen nuevos desafíos para las autoridades y los expertos, ya que no han hallado de momento cartas contaminadas como en los casos anteriores. Los investigadores consideran escasa la probabilidad de que una carta resulte contaminada con esporas al pasar por instalaciones infectadas y que se contagie una persona que entra en contacto con ella pero, a la vista de lo sucedido, reconocen que no puede descartarse ninguna posibilidad.