España llena, España Vacía: ¿se pueden reconciliar? La Bienal Española de Arquitectura y Urbanismo busca respuestas
A raíz de la pandemia, el urbanismo y la habitabilidad del espacio se han vuelto más importantes que nunca. La XV edición del proyecto cultural acaba de comenzar e interpreta los retos del presente a través de la mirada de Óscar Ares y Anna y Eugeni Bach, los dos estudios encargados de la dirección de este año
Óscar Ares y Anna Bach y Eugeni Bach afrontan la dirección conjunta de la nueva edición de la Bienal de Arquitectura y Urbanismo (BEAU), un proyecto cultural que comenzó el 28 de junio y que resulta más relevante que nunca en un tiempo en que el urbanismo y la habitabilidad del espacio público han adquirido una importancia crucial a la luz de la covid-19. “Nuestra propuesta de comi...
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Óscar Ares y Anna Bach y Eugeni Bach afrontan la dirección conjunta de la nueva edición de la Bienal de Arquitectura y Urbanismo (BEAU), un proyecto cultural que comenzó el 28 de junio y que resulta más relevante que nunca en un tiempo en que el urbanismo y la habitabilidad del espacio público han adquirido una importancia crucial a la luz de la covid-19. “Nuestra propuesta de comisariado para la XV Bienal Española de Arquitectura y Urbanismo propone ser el lugar de reflexión sobre las capacidades de conciliación que pueden tener la arquitectura y el urbanismo respecto de las dos realidades territoriales que existen en el país: la de una España densa, dinámica y poblada; y la de otra con menor densidad, más invariable y deshabitada, que conforma un país que está dentro de otro”, indican a ICON Design.
Ares ha sido seleccionado para representar a España en la última edición de la Bienal de Venecia, tiene decenas de reconocimientos nacionales e internacionales, como el Premio en la XIV Bienal de Arquitectura Española o The Plan Award (Venecia 2018, Milán 2019), es profesor de proyectos en la escuela ETSAVa, y está muy ligado a Valladolid. Por su parte, los catalanes Anna Bach y Eugeni Bach han ganado, entre otros, el Premio FAD Internacional y varios premios FAD de la Opinión, han representado a España en la Bienal de Venecia en dos ocasiones y son docentes en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Barcelona y en EINA, Centro Universitario de Arte y Diseño de Barcelona.
Esta edición de la bienal pretende mostrar que la arquitectura y el urbanismo son herramientas para construir un futuro mejor. “Los conceptos con los que acostumbramos a definir nuestros espacios sociales, culturales e incluso físicos tienen distintas aproximaciones e incluso significados opuestos dependiendo de si se trata de las mesetas doradas de Castilla o del abigarramiento costero del Mediterráneo. Trabajo, vejez o vecindad, por poner unos ejemplos, se perciben de manera diferente dependiendo del entorno urbano, rural o territorial. Incluso categorías como el tiempo o la distancia son relativas en función de la mayor o menor densidad de población”, afirman los catalanes.
Su estrategia expositiva gira en torno a siete temáticas que muestran la dicotomía y cómo se aborda el contraste entre una España y la otra desde la arquitectura y el urbanismo, con la voluntad de trazar similitudes y diferencias que nos permitan definir puntos de encuentro: territorio, sociedad, sostenibilidad, género, demografía, colectividad y economía.
La pregunta es cómo debe abordar la arquitectura conceptos que tienen significados distintos en ambos territorios. Los directores de la bienal proponen una doble sede principal en representación de la España vacía y la España hiper urbanizada, en dos edificios característicos de la historia de la arquitectura en nuestro país y en dos ciudades representativas de las dos realidades territoriales. Uno es el pabellón de Barcelona (1929), de Mies van der Rohe y Lilly Reich; y el otro es el Patio Herreriano de Valladolid (S. XVI), de Juan de Ribero Rada.
Las dos sedes han sido elegidas teniendo en cuenta el actual momento de incertidumbre debido a la situación sanitaria provocada por la pandemia. En respuesta a este contexto, ambas localizaciones permiten organizar las exposiciones en recintos al aire libre, con todas las medidas de seguridad y aforo que reclama la presente situación. “No solo por el contexto social y sanitario actual, sino porque cada vez tiene más importancia y más presencia en nuestro entorno, esta edición contará con una tercera sede virtual donde poder seguir, tanto en tiempo real como en diferido, las inauguraciones, exposiciones, conferencias y debates de todo el contenido de esta edición así como el deposito de una memoria digital de todos los eventos desarrollados”, explican.
En el Pabellón de Barcelona pueden verse los premiados de la Bienal. Por una parte, en la explanada frente al Pabellón, unos paneles de grandes dimensiones muestran una fotografía de gran formato de cada una de las obras premiadas. Los paneles cuentan con enlaces, a modo de códigos QR u otros equivalentes, para ampliar la información de cada uno de los proyectos. Además cinco pantallas reproducen una serie de vídeos de las obras premiadas, realizados por cinco fotógrafos representantes de los distintos territorios.
A partir del 2 de julio, en el claustro del Patio Herreriano se expondrán las obras seleccionadas, finalistas y premiadas en la convocatoria de la BEAU, así como los vídeos de las obras premiadas realizados para la Bienal. “El interés de esta exposición no solo estará en la calidad de las obras destacadas, sino que recaerá, específicamente, en su organización, que no será según su clasificación en los premios de la Bienal, sino conforme a su relación con las siete temáticas del comisariado. Se trata de establecer un diálogo entre proyectos con el fin de generar preguntas, oposiciones y relaciones que pretendan dar respuesta a la cuestión inicial y origen de esta edición: cómo aborda la arquitectura un mismo concepto, pero con significados tan distintos, en ambos territorios”, explican los directores.
Posteriormente, se propondrá que la Bienal –iniciativa promovida por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, a través de la Dirección General de Arquitectura y Agenda urbana, en colaboración con el Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España y el apoyo de la Fundación ARQUIA– inicie una itinerancia internacional apoyada en las sedes del Instituto Cervantes de ciudades como Nueva York, París o Berlín.