Uno de los médicos acusados de la muerte de Matthew Perry se declara culpable
Mark Chavez ha admitido un cargo de conspiración por distribuir la ketamina que causó el fallecimiento del popular protagonista de ‘Friends’, mientras que el otro médico, Salvador Plasencia, y Jasveen Sangha, conocida como ‘La reina de la ketamina’, mantienen su inocencia. Se prevé que el juicio para aclarar lo sucedido comience el 4 de marzo
Uno de los médicos acusados de la muerte del actor estadounidense Matthew Perry, ocurrida el 28 de octubre de 2023, a la edad de 54 años, se declaró este miércoles 2 de octubre culpable de un cargo de conspiración por distribuir la ketamina que causó el fallecimiento del popular protagonista de Friends. Mark Chavez es uno de los cinco acusados por la fiscalía de California de aprovecharse de los problemas de abuso y adicción del intérprete para ganar miles de dólares. El médico presentó una declaración de culpabilidad ante el tribunal federal de Los Ángeles, y se fijó el próximo 2 de abril como fecha para la lectura de su sentencia, según informó el diario estadounidense Deadline.
De los otros cuatro acusados, dos se han declarado inocentes del cargo de conspiración, y se prevé que su juicio comience el 4 de marzo de 2025. Una de ellas es Jasveen Sangha, conocida como La reina de la ketamina, quien, según la investigación, proveyó de la dosis que resultó fatal para el actor. El otro es el también doctor Salvador Plasencia, quien trabajaba mano a mano con Chavez para venderle la droga Perry. “Plasencia y Chavez violaron sus juramentos como médicos de cuidar a sus pacientes. Causaron muchos daños solo para hacer dinero”, aseguró Anne Milgram, directora de la oficina de control de drogas de Estados Unidos, la DEA. La funcionaria, la encargada de la lucha antidrogas del país, dijo cuando anunció su detención el pasado agosto que los médicos vendían a Perry viales de ketamina por 2.000 dólares, a pesar de que ellos los compraban por 12 dólares la unidad. De acuerdo con el fiscal de la investigación, el actor llegó a pagar 55.000 dólares por unos 20 viales.
“Me pregunto cuánto más va a pagar este imbécil”, escribió el doctor Plasencia, quien mantiene su inocencia, a Chavez en un mensaje de texto escrito en septiembre de 2023, un mes antes del fallecimiento del intérprete. “Vamos a averiguarlo”, añadió. Los médicos borraron sus mensajes tras la muerte accidental por sobredosis de Perry, pero las autoridades federales pudieron recuperarlos de los teléfonos incautados en la investigación. Por su parte, Chavez, de 54 años, y oriundo de San Diego, aceptó a finales del pasado agosto declararse culpable ante las autoridades, tal y como ocurrió este miércoles. Los hechos por los que se le acusa podrían acarrearle hasta 10 años de prisión.
Tanto el médico como las otras cuatro personas detenidas el pasado 15 de agosto, entre quienes se incluye Kenneth Iwamasa, el asistente personal del actor que encontró su cuerpo sin vida, fueron acusadas de formar parte de una red delictiva clandestina responsable de distribuir grandes cantidades de ketamina, sustancia que fue encontrada en el cuerpo del intérprete en el momento de su muerte. La ketamina es utilizada en Estados Unidos para tratar la depresión y la ansiedad, pero solamente en clínicas que operan bajo estrictos controles. De acuerdo a las autoridades, Perry desarrolló una dependencia a la vía intravenosa de esta sustancia. Cuando las clínicas locales se negaron a elevarle la dosis, el actor buscó a quienes accedieran a surtirle la ketamina.
Las autoridades relataron que Perry obtuvo la ketamina que terminó con su vida de parte de Jasveen Sangha, que la jeringuilla fue proporcionada por el médico Salvador Plasencia, y que Kenneth Iwamasa —quien también se ha declarado culpable de los delitos por los que se le acusa— fue quien inyectó la droga al actor el día de su muerte. La fiscalía sostiene que los acusados aprovecharon los “problemas de adicción” de Perry para sacar provecho y “enriquecerse”.
El actor fue hallado por su asistente el 28 de octubre de 2023 flotando boca abajo en la piscina de su casa en el exclusivo barrio Pacific Palisades. En un primer momento, su muerte fue tratada como un accidente. Perry había estado recibiendo terapia de infusión de ketamina para la ansiedad y la depresión, pero la última vez había sido una semana y media antes de su fallecimiento y la ketamina tiene una vida media de tres o cuatro horas dentro del organismo, motivo por el que su muerte resultó sospechosa. La policía de Los Ángeles informó el pasado mes de mayo que existía una investigación criminal abierta vinculada a su fallecimiento.
Según confesó el propio actor en su biografía Friends, Lovers, and the Big Terrible Thing (2022), mientras formó parte del elenco de Friends —serie que duró 10 temporadas entre 1994 y 2004— sufrió varios episodios de adicción a las drogas y al alcohol. Su muerte fue impactante para los fans de la serie y también para sus compañeros de reparto; Jennifer Aniston, Courteney Cox, Lisa Kudrow, Matt LeBlanc y David Schwimmer.