Kate Middleton estará entre 10 y 14 días en el hospital tras una cirugía abdominal
Se prevé que la princesa de Gales no retome sus deberes públicos hasta después de Pascua. Buckingham ha anunciado también hoy que el rey Carlos III será operado la semana que viene de la próstata
La princesa de Gales, Kate Middleton, se sometió el martes 16 de enero a una “cirugía abdominal planificada” que concluyó “de modo exitoso”, según ha informado en un comunicado el Palacio de Kensington este miércoles. El hecho de que una mujer de 42 años, en muy buena forma física, deba permanecer hospitalizada después de la intervención durante un periodo tan prolongado como el que se ha anunciado, sugiere que el diagnóstico er...
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La princesa de Gales, Kate Middleton, se sometió el martes 16 de enero a una “cirugía abdominal planificada” que concluyó “de modo exitoso”, según ha informado en un comunicado el Palacio de Kensington este miércoles. El hecho de que una mujer de 42 años, en muy buena forma física, deba permanecer hospitalizada después de la intervención durante un periodo tan prolongado como el que se ha anunciado, sugiere que el diagnóstico era serio. La nota de palacio, compartida en sus redes sociales, asegura que se prevé que la esposa del príncipe Guillermo, la futura reina de Inglaterra, permanezca en la Clínica de Londres [un hospital privado en el centro de la ciudad] durante 10 a 14 días antes de regresar a casa para seguir con la recuperación. Además, advierte que no se espera que la princesa regrese a sus deberes públicos hasta después de Pascua (a finales de marzo).
Según ha informado la BBC, la necesidad de operar no respondía a nada relacionado con el cáncer. “La princesa de Gales confía en que los ciudadanos entiendan (...) su deseo de que su información médica personal permanezca privada”, explicaba el comunicado oficial.
Una operación abdominal puede responder a la necesidad de intervenir el estómago, el apéndice, los riñones o incluso el aparato reproductor, y se trata normalmente de cirugía abierta con anestesia general, que conlleva la necesidad de rehabilitación prolongada.
Carlos de Inglaterra, la semana que viene
El Palacio de Buckingham ha informado este miércoles por la tarde que la semana que viene será operado Carlos III. “Al igual que miles de hombres cada año, el rey ha buscado tratamiento para el agrandamiento de la próstata. El estado de Su Majestad es benigno y acudirá al hospital la próxima semana para un procedimiento correctivo. Los compromisos públicos del rey se pospondrán durante un breve período de recuperación”, afirma un comunicado que no precisa qué día será la intervención del monarca, de 75 años.
Se espera que el Palacio de Kensington solo proporcione actualizaciones sobre el progreso de la esposa del heredero al trono británico, el príncipe Guillermo, cuando haya nueva información significativa para compartir. “La princesa de Gales desea disculparse con todos los afectados por el hecho de que tenga que posponer sus próximos compromisos. Espera reincorporarse a tantos como sea posible, tan pronto como sea posible”, concluye el comunicado oficial.
Tras abandonar el hospital, y según precisa el comunicado, la princesa de Gales continuará la recuperación postoperatoria en su casa de Windsor. Fue en septiembre de 2022 cuando Guillermo de Inglaterra y su esposa decidieron abandonar Londres y mudarse a Windsor —a una hora en tren de la capital británica—. Junto a sus tres hijos, se instalaron en Adelaide Cottage, una de las residencias en los terrenos del castillo al que se había mudado la reina Isabel, con la intención de estar más cerca de la monarca, que por entonces había rebajado ya un poco la intensidad de su agenda. El matrimonio también tenía el objetivo de criar a sus hijos lejos de Londres y de la presión de la prensa. Ese mismo mes de septiembre Isabel II fallecía a los 96 años, pero los príncipes de Gales siguen instalados en Windsor, puesto que tras su mudanza escolarizaron a sus hijos en la exclusiva escuela de Lambrok.
El príncipe Guillermo, por su parte, también pospondrá una serie de compromisos y no asumirá deberes oficiales mientras su esposa esté en el hospital, según ha aclarado el Palacio. Tampoco realizará tareas oficiales durante el periodo inmediatamente posterior al regreso de Kate a casa. Los funcionarios reales, según indican los medios británicos, proporcionarán un calendario revisado para el príncipe de Gales a su debido tiempo. Según publica The Times, está comprometido a permanecer al lado de su esposa tanto como le sea posible, por lo que ahora está en duda su visita oficial a Roma, un viaje que el matrimonio habría estado planeado para la próxima primavera.
La última vez que se vio en público a Kate Middleton fue el pasado 25 de diciembre, mes en el que tuvo una agenda repleta de actividades. Fue durante el tradicional servicio religioso del día de Navidad que celebra la familia real británica en Sandringham. Un día que tuvo una protagonista inesperada: Sarah Ferguson, exmujer del príncipe Andrés, se unía a la Navidad de los Windsor por primera vez en 30 años. También fueron invitados por primera vez los dos hijos y cinco nietos de la reina Camila.
Carlos III tenía varios compromisos planeados esta semana, pero estos se han pospuesto por consejo de su médico. Por lo general, los miembros de la familia real británica no revelan detalles de enfermedades, pues consideran los problemas médicos como un asunto privado. Pero Buckingham ha dicho hoy que el rey estuvo dispuesto a compartir detalles sobre su salud para alentar a otros hombres que experimentan síntomas a hacerse revisiones médicas. La web del Servicio Nacional de Salud Británico (NHS, por sus siglas en inglés) describe el agrandamiento de la próstata benigno como una afección que puede afectar al aparato urinario y es común en hombres mayores de 50 años. “No es un cáncer y normalmente no supone una amenaza grave para la salud. A muchos hombres les preocupa que tener un agrandamiento de próstata significa que tienen un mayor riesgo de desarrollar cáncer de próstata. Este no es el caso”, asegura el NHS.