Hilaria Baldwin, la mujer española de Alec Baldwin que no es tan española
Una periodista destapa que la esposa del actor nació en Boston de familia estadounidense y no en Mallorca. La instructora de yoga se defiende afirmando que su historia “es distinta” pero real
Desde que empezaron a salir en 2011, y especialmente desde que se casaron en 2012, Hilaria Baldwin, esposa del actor Alec Baldwin, se ha convertido en una de las españolas, de las mallorquinas, más conocidas de Hollywood. O eso se creía hasta ahora. Porque este fin de semana la instructora de yoga y ...
Desde que empezaron a salir en 2011, y especialmente desde que se casaron en 2012, Hilaria Baldwin, esposa del actor Alec Baldwin, se ha convertido en una de las españolas, de las mallorquinas, más conocidas de Hollywood. O eso se creía hasta ahora. Porque este fin de semana la instructora de yoga y madre de cinco hijos junto al actor —los pequeños Carmen, Rafa, Leo, Romeo y Eduardo— se ha visto inmersa en una polémica donde se ha puesto en duda sus orígenes, su nacionalidad y hasta su nombre.
Todo este caos que tiene en vilo a Hollywood se ha desatado por una pequeña investigación iniciada por la periodista Tracie Morrisey. Hilaria Baldwin, de 36 años, respondió a una pulla que la humorista Amy Schumer le hizo sobre sus embarazos y sus hijos muy seria, y entonces la joven investigadora se dio cuenta de que aquel acento español que tantas veces había hecho notar Baldwin había desaparecido, y que su inglés no tenía ni una pizca de aquel deje español que a veces incluso le hacía dudar de la pronunciación de ciertas palabras.
A partir de ahí, empezó a recopilar información —que ha ido desvelando en sus Stories de Instagram— sobre Hilaria y lo primero que descubrió es que ni siquiera se llamaba Hilaria, sino Hillary. El nombre Hilaria es poco frecuente incluso en España (apenas lo tienen 1.700 personas, y solo 18 en Baleares, supuesta tierra natal de la esposa de Alec Baldwin), mientras que Hillary es mucho más habitual en EE UU. Su nombre completo, como descubrió en antiguos perfiles de redes sociales, era Hillary Hayworth Thomas, nacida y criada en Boston, Massachusetts.
Hilaria Baldwin siempre había explicado, en multitud de entrevistas y biografías, que había nacido en Mallorca y se había criado entre Boston y la isla, donde pasaba los veranos. Pero a partir de los hilos movidos por Morrisey han salido compañeros de escuela que afirman que era “una chica encantadora, sí, pero la típica chica blanca de Cambridge”, decían, en referencia a la localidad del estado de Massachusetts. “Fui al instituto con ella, era encantadora, muy seria. Su nombre ya era Hillary Hayworth Thomas y nunca tuvo acento”, afirmaba otro compañero de escuela de Weston, un pueblo del mismo estado.
Morrisey compara esas informaciones con una entrevista radiofónica de la instructora de yoga donde Hilaria dice que se mudó de Mallorca a EE UU con 19 años para estudiar en la Universidad de Nueva York, dando a entender que su etapa de educación secundaria fue en España. De hecho, en esa investigación las fechas no terminan de cuadrar, porque —nacida en 1984— aquello tendría que haber sido alrededor de 2003. Pero entonces su madre, médico, trabajaba en Boston, no vivían en España. Una madre, la doctora Kathryn Hayworth, que ella siempre ha dicho que era española, aunque ni su nombre ni su acento lo confirman. Los abuelos maternos de Hilaria tampoco son españoles, como destaca la investigación, sino del mismo Massachusetts, igual que sus bisabuelos. Su padre es estadounidense, como ella siempre ha afirmado. Desde 2011, el matrimonio ha pasado temporadas en la casa que tienen en Inca, Mallorca, según se lee en sus biografías, pero no residieron allí en los ochenta y noventa, como siempre ha dicho Baldwin.
La afectada ha querido hablar sobre la cuestión en redes sociales, asegurando que todo se debe a una serie de fallos y a una mentira urdida por la periodista mientras que ella ha sido clara desde el principio. “Me lo tomo muy en serio, y para quienes pregunten insistiré en mi historia, como he hecho muchas veces antes. Nací en Boston pero crecí con mi familia a caballo entre Massachusetts y España. Mis padres y hermano viven en España y yo escogí vivir aquí, en EE UU. En casa celebramos nuestras dos culturas. Alec y yo criamos a nuestros hijos bilingües, como yo me crie. Esto es muy importante para mí. Entiendo que mi historia es algo distinta, pero es mía y estoy orgullosa de ella”, escribe en una publicación.
Además del texto, Hilaria Baldwin cuelga un largo vídeo de siete minutos donde dice que ha “intentado ser clara pero a veces la gente no escribe lo que dices”. En él argumenta que aunque nació como Hillary en su familia la llaman Hilaria, y que siempre ha sido explícita con su marido acerca de sus raíces y de su historia, contándole que nació en Boston. De hecho, para dejarlo todo todavía más claro vuelve a publicar otro vídeo de más de seis minutos con más explicaciones entre las que argumenta que nunca dijo que su madre fuera española, por ejemplo, y que su padre está dolido con los ataques que sufre su hija. “No he hecho nada malo. Que no entendáis mi historia no significa que no sea verdad. No me voy a disculpar”.
También ha publicado un mensaje que supuestamente le ha mandado su hermano donde le dice: “Fuera toda inseguridad. Tú eres una chica nacida en Boston que creció en dos culturas y tú eres tú, única y maravillosa. No te tienes que disculpar por ser tú y punto. [...] Cuanta más sencilla la explicación, menos noticia hay”. Después, Hilaria ha anunciado su intención de dejar de hablar en redes sociales acerca de esta cuestión.
Alec Baldwin también ha publicado en Instagram un largo vídeo, donde dice someramente: “Últimamente se han dicho cosas sobre gente que amo, que me importa mucho, que son ridículas”. También Ireland, la hija que el actor tuvo con Kim Basinger, se ha pronunciado al respecto afirmando que es “patético que alguien quiera jugar a los detectives y profundizar en la vida de alguien a quien no conocen de nada”. “Es triste y patético”, afirma, asegurando que en las vacaciones de Navidad, “donde la gente a veces se siente triste y sufre, lo último que necesitamos es empezar con mierda y cotilleo de algo tan, tan estúpido, y sobre algo que nadie conoce”.