Los dramáticos siete meses de la familia Falcó
Tras la muerte del marqués de Griñón en marzo por coronavirus, el clan ha sufrido dos varapalos más en este tiempo: el fallecimiento repentino del marido de Xandra y ahora el del marqués de Cubas
La muerte de Fernando Falcó este martes 20 de octubre confirma que la familia Falcó está viviendo el que probablemente sea su año más amargo. Cuando el clan intentaba recuperarse de la desaparición de Carlos Falcó, marqués de Griñón, que a los 83 años murió a causa del coronavirus, cinco meses después fallecía de manera repentina ...
La muerte de Fernando Falcó este martes 20 de octubre confirma que la familia Falcó está viviendo el que probablemente sea su año más amargo. Cuando el clan intentaba recuperarse de la desaparición de Carlos Falcó, marqués de Griñón, que a los 83 años murió a causa del coronavirus, cinco meses después fallecía de manera repentina Jaime Carvajal, marido de Xandra Falcó, a los 56 años. La hija del marqués de Griñón contó entonces con el apoyo de sus hermanos, quienes han vuelto a sufrir ahora un nuevo varapalo con la desaparición de su tío Fernando, marqués de Cubas, a los 81 años, a quien estaban muy unidos.
Hace ahora justo siete meses, el pasado 20 de marzo, fallecía el marqués de Griñón en la Fundación Jiménez Díaz de Madrid tras unos días ingresado por haber dado positivo en coronavirus. El aristócrata, que se encontraba en una de sus fincas cuando comenzó a sentirse mal, aceptó someterse a un tratamiento experimental para combatir su enfermedad. Sin embargo, no logró superar la neumonía provocada por el virus. El marqués de Griñón era padre de Manuel y Xandra, nacidos de su matrimonio con Jeannine Girod; de Tamara, de su relación con Isabel Preysler; y de Duarte y Aldara, fruto de su matrimonio con Fátima de la Cierva. Con su cuarta esposa, Esther Doña, con quien se casó en 2017 con 80 años, no tuvo descendencia.
Todos tuvieron que despedirse del marqués de Griñón en soledad, de acuerdo con las normas sanitarias marcadas por la pandemia del coronavirus. Su viuda revelaba recientemente en el programa de TVE en el que colabora que aún no logra aceptar su muerte. “Lo estoy pasando fatal. Mi vida se ha desmoronado, toda mi vida giraba en torno a la suya”, dijo la exmodelo en una entrevista donde también hablaba de la nula relación con la mayoría de los hijos de su marido, especialmente con Tamara Falcó, quien heredó el título de su padre y ya ha solicitado al BOE ser oficialmente la nueva marquesa de Griñón.
Cinco meses después de perder al patriarca de la familia, la tragedia volvía a estar presente, en especial para Xandra Falcó, que perdió a su marido Jaime Carvajal Hoyos de manera inesperada a los 56 años por un problema cardíaco. La pareja, padres de tres hijas, acababa de regresar de Mallorca, donde posee una casa de verano en la localidad de Valldemosa. El matrimonio, pese a su relevancia social, llevaba una vida muy discreta, alejada de la vida pública. El banquero fue todo un pionero en la lucha de las mujeres por acceder a los títulos nobiliarios y le cedió a su madre el marquesado de Almodóvar del Río. Xandra Falcó, por su parte, ostenta en la actualidad el de Mirabel. Jaime y Xandra se casaron en 1998 en Plasencia (Cáceres), en una boda a la que acudieron varios miembros de la Familia Real española, como Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarin, y el entonces príncipe de Asturias. Felipe VI y doña Letizia acudieron a su funeral.
Precisamente fue en el funeral de su marido donde Xandra recibió el apoyo también de su tío Fernando Falcó, que estaba muy unido a Carlos Falcó y a la familia de este —era el padrino de Tamara—, puesto que sus otros dos hermanos habían fallecido muchos años antes y de manera trágica. Xandra y su tío compartieron una comida a principios de este mes, en la que sería su última salida juntos. Unas semanas después, el marqués de Cubas ingresó en el hospital, donde ha fallecido este martes. Su muerte sume de nuevo en la tristeza a la familia Falcó en este año sin tregua.
Fernando Falcó deja a un hijo, Álvaro, nacido de su primer matrimonio de seis años con Marta Chávarri, una unión que acaparó muchas portadas tanto en su inicios como por los motivos de su separación. Tras su divorcio, Fernando encontró de nuevo el amor al lado de la empresaria y aristócrata Esther Koplowitz, de la que se separó en 2009. En esta ocasión la pareja se mantuvo alejada del foco mediático pese a la fama de ambos. Excelente gastrónomo y experto en vinos, era un gran aficionado a los toros. Su carácter afable y sus dotes de buen conversador le llevaron a tener muchos amigos y a ser invitado en todos los grandes eventos de la vida social española durante muchos años. Abogado de profesión, en los últimos años llevó una vida muy discreta aunque era habitual verle frecuentando los mejores restaurantes de Madrid.