El divorcio de Dan Brown, entre acusaciones de infidelidad y demandas millonarias
El autor de ‘El código Da Vinci’ niega haber ocultado parte de su fortuna y afirma que la batalla iniciada por su exesposa se debe a que sigue herida a pesar de que él se disculpó por sus aventuras extramatrimoniales
Dan Brown, el millonario autor de El código Da Vinci no sale de su asombro pese a ser especialista en crear tramas enrevesadas en las que se mezcla la criptología, con los cultos religiosos, los asesinatos y las compañeras de investigación inteligentes y atractivas. En este caso no se trata de que se le hayan acabado los argumentos para sus libros, sino de la sorpresa que le han causado las críticas que ha recibido por el agrio enfrentamiento con Blythe Brown, su esposa durante 21 años y de quien se divorció en 2019.
A principios del pasado mes de julio, Blythe Brown, de 68 años,...
Dan Brown, el millonario autor de El código Da Vinci no sale de su asombro pese a ser especialista en crear tramas enrevesadas en las que se mezcla la criptología, con los cultos religiosos, los asesinatos y las compañeras de investigación inteligentes y atractivas. En este caso no se trata de que se le hayan acabado los argumentos para sus libros, sino de la sorpresa que le han causado las críticas que ha recibido por el agrio enfrentamiento con Blythe Brown, su esposa durante 21 años y de quien se divorció en 2019.
A principios del pasado mes de julio, Blythe Brown, de 68 años, presentó una demanda en New Hampshire, Massachusetts, en la que desveló que su marido llevó una doble vida durante su matrimonio con varias amantes, lujosos regalos para ellas y en la que reclama que fue ella la que inspiró la mayor parte del trabajo literario de su marido, incluida la idea sobre la que gira El código Da Vinci. Blythe que es pintora, historiadora y colaboradora en los libros de su exesposo alega que este le ocultó decenas de proyectos futuros que significan ingresos millonarios y entre los que está incluida una nueva serie de televisión y un libro para niños, Wild Symphony (La sinfonía de los animales, en español) que se ha publicado este mes de septiembre. El mismo momento que su exmarido también ha elegido para sacar junto al libro, un álbum de música clásica también dirigido al público infantil, compuesto por él mismo y basado en canciones que produjo hace 30 años, cuando aspiraba a ser músico. Entonces, Dan Brown, que ahora tiene 56 años grabó las canciones con sintetizadores en su estudio y ahora el álbum se compone de versiones actualizadas de esas piezas originales a las que se han unido otras nuevas, todas ellas interpretadas por la Orquesta del Festival de Zagreb en Croacia. Una idea que surgió durante una entrevista en China donde le recordaron sus principios en la música.
Escribir era su plan b y por sorprendente que parezca Brown ha manifestado que existe un hilo conductor entre su música y su escritura: “Para escribir una canción o una pieza de música clásica, tienes que entender la estructura, tienes que entender la tensión y la liberación. Las buenas líneas musicales hacen una pregunta y dan una respuesta. No puedes tener cinco fortissimos seguidos. Necesitas ese material intersticial para dejar que el oyente o el lector respire”, explicó en una entrevista en The New York Times.
A pesar de que el autor presentó el 30 de julio una contrademanda por difamación y calumnia, en la que argumenta que su exesposa se ha propuesto “avergonzarlo públicamente” y “destruir su legado”, y de que en una entrevista afirmó que “cualquier implicación o afirmación” de que mintió o escondió su dinero "es absolutamente falsa”, la batalla entre el exmatrimonio continúa. En una entrevista con The Sunday Times Dan Brown habla sobre este enfrentamiento: “Hacia el final de nuestro matrimonio, cuando ambos buscábamos consuelo en otros lugares, conocí a alguien. Ella está herida [dice en referencia a su esposa]. Lo entiendo y me disculpé. Pero no es suficiente. Así que aquí estamos”.
También explica que al principio le preocupó que este asunto afectara a las ventas de sus libros: "Llamé a mi editor y le dije: ‘Lo siento mucho, espero que esto no afecte a las ventas’. Él me contestó: '¿Bromeas? Todo el mundo piensa que eres el chico más aburrido del mundo. ¡Ahora, finalmente hay una historia!”. El millonario autor explica que su mayor problema es que tiene una mente acelerada: “Amo muy profundamente, ya sea a las personas o al proceso creativo. Pero sentir demasiado es un arma de doble filo. Cuando algo sale mal, me voy directo a la peor de las situaciones”. También afirma que no ha olvidado que durante años no obtuvo éxito con sus libros y que la suerte le sonrió por primera vez cuando rondaba los cuarenta.
A la espera de la resolución del conflicto con quien ya es su exesposa, Dan Brown declara que le encanta vivir solo: “Cualquiera que haya tenido una relación difícil sabe que no hay nada peor. Cuando nos separamos, mi mujer recibió la mitad de todo y algo más”. En The New York Times añade: “Fuimos una pareja maravillosa durante mucho tiempo. La gente evoluciona de manera diferente. Empezamos a vivir vidas separadas, y lo hemos hecho durante bastante tiempo. Era hora de que todo terminara para los dos. Ella estuvo de acuerdo, así que esto ha sido una completa sorpresa”. Ahora Brown prefiere compartir su vida y sus escasas horas de sueño con su perro Winston y su gato Zeus. Levantarse a las cuatro de la mañana, meditar durante 22 minutos antes de pasear a su perro y tomar su batido de arándanos y espinacas para enfrentarse, a las cinco de la madrugada, a las ideas que vayan surgiendo frente a su escritorio. “Allí no hay ni teléfono ni Internet. Cada hora mi ordenador se apaga durante tres minutos y hago flexiones y estiramientos. Muchos escritores de éxito no tienen que seguir escribiendo, pero a mí me encanta trabajar”, confiesa Brown en el diario británico.
Él, que sabe lo que es tener varios trabajos para pagar las facturas, que sus primeros libros no tuvieran ninguna repercusión y enfrentarse a un auditorio desierto, parece cómodo con su nueva vida y nada asustado por el sorprendente giro que ahora ha dado a su carrera. Detrás siguen estando los 234 millones de copias impresas de los siete thrillers que ha publicado y una fortuna que sigue siendo millonaria. Ahora son los niños los destinatarios de su creatividad y él sigue reuniéndose con sus amigos de siempre –los que tenía antes de su éxito– en torno a una chimenea, una pizza y respetando la distancia de seguridad. Lo único que echa en falta es dormir un poco más pero asegura que su cuerpo no quiere seguir sus deseos. “Me despierto a las cuatro de la madrugada listo para volver a empezar”. Después de superar el coronavirus al principio de la pandemia, se encuentra enfrascado en su próxima novela, otro thriller protagonizado por Robert Langdon. No sabe si continuará publicando música, pero lo que tiene muy claro es que ya no le perturba si a la gente le gusta o no lo que hace.