¿Llevar ‘dress code’ a un concierto? Si eres fan de Taylor Swift, Harry Styles o Beyoncé, sin duda
Pulseras de la amistad, boas de colores, prendas en tonos plateados... Los espectáculos de estos artistas se han convertido en grandes eventos donde, a pesar de no estar impuesto un uniforme oficial, sus seguidores lucen llamativos atuendos que muchas veces confeccionan ellos mismos
Hasta hace relativamente poco, ir a un concierto consistía en comprar la entrada —sin agobios, sin preventa, sin códigos y a un precio más o menos asequible—, esperar a la fecha y disfrutar del artista. Pero en los últimos años se ha producido una revolución que invita a vivir una experiencia diferente, casi como si se tratase de algo inmersivo. Ahora no solo ...
Hasta hace relativamente poco, ir a un concierto consistía en comprar la entrada —sin agobios, sin preventa, sin códigos y a un precio más o menos asequible—, esperar a la fecha y disfrutar del artista. Pero en los últimos años se ha producido una revolución que invita a vivir una experiencia diferente, casi como si se tratase de algo inmersivo. Ahora no solo es difícil conseguir tiques, sino que también hay que pensar en el dress code perfecto para ir a conjunto con el resto de los asistentes al evento.
Sara, de 24 años, es fan de Taylor Swift desde los 12. A pesar de llevar la mitad de su existencia como seguidora de la artista, todavía no ha tenido la oportunidad de asistir a un concierto suyo. Pero eso va a cambiar dentro de pocos meses. Gracias al código que le tocó de manera aleatoria tras su registro en la web de venta, que le permitió entrar la número 2.884 en la fila para el concierto de Madrid, pudo hacerse con cuatro entradas para ella, su hermana y dos amigas. “Pagué, llamé llorando a mis amigas, lo compartí en Twitter e inmediatamente después me metí en las tiendas online para buscar prendas para el día del concierto”. Pero antes incluso de tener esas entradas, Sara ya tenía decidido cómo iba a ir vestida al evento —en caso de no conseguirlas, iba a ir a disfrutar a las puertas del estadio Santiago Bernabéu—.
La fiebre por el dress code en los conciertos de la artista no es algo nuevo, pero gracias al poder de TikTok esto ha llegado a niveles nunca antes vistos. “Todo empezó hace unos meses en el inicio de gira en Estados Unidos, pero TikTok y las redes sociales han hecho el resto. Cuando ves 200 vídeos de fans de Taylor customizando su ropa o preparándose para el concierto con prendas superacorde con la temática, quieres ser como ellas”, cuenta Sara.
El reto es sencillo: cada fan elige su etapa favorita —la gira se llama, precisamente, The Eras Tour— de sus 10 discos de estudio y escoge la ropa perfecta que combine con esa temática. Sara lo tiene decidido desde hace meses: “Voy a ir de 1989, con falda y top de lentejuelas. Tengo la idea clarísima de lo que quiero. Al principio quise comprarlo directamente en tienda, pero luego pensé que sería un recuerdo más especial si lo confecciono yo misma. Ya he pedido las telas y complementos. Tendré que pedir ayuda a mis amigas, pero merecerá la pena”.
Núria tendrá que viajar fuera de España para ver a Taylor Swift, y ya tiene más o menos elegidas las dos eras para sus dos conciertos, ambos en Varsovia (Polonia) en agosto de 2024. “No estoy segura, pero mi idea es ir de Speak Now y Lover, aunque igual uno de los dos días me pongo el outfit de Taylor en You Belong With Me”. “Lo bonito es ver que no hay un dress code definido, este ha surgido de forma orgánica y todos se han puesto de acuerdo. Ir vestida de una determinada manera significa pertenecer a esa comunidad. Como todo el mundo va igual, se genera un vínculo. Si decides no hacerlo, no estás dentro del mood del concierto”, defiende. Para escoger su outfit lo tiene claro: “He pensado en qué es lo que me gusta llevar a mí, qué es lo que me queda bien y qué es con lo que no voy a parecer que voy disfrazada de más”.
Además, hay solución para aquellos que todavía no tienen decidido cómo vestir. Unos swifties estadounidenses, como se conoce a los seguidores de la artista, han creado la página web The Eras Tour Wardrobe, donde se pueden ver ideas de atuendos en función de cada etapa y con opciones para todos los gustos y bolsillos. Y para los que no quieran pensar tanto, siempre queda la opción de diseñarse sus propias pulseras (una constante en todos los looks) e intercambiarlas el día del concierto con otros fans.
Pero Taylor Swift no es la única, ni tampoco la primera, en ser copiada por los fans en sus conciertos. Desde hace décadas, los seguidores de artistas como Michael Jackson, Madonna o las Spice Girls han llevado sus propios dress code inspirados en ellos. Sin embargo, tras unos años de auge de esta moda —como cualquier otra moda— se evaporó y los espectáculos volvieron a llenarse de las ya clásicas prendas de merchandising con las que los cantantes engordan sus cuentas bancarias.
Como todo acaba volviendo, los seguidores de Harry Styles fueron de los primeros en poner de moda las boas, los sombreros y los colores chillones en los conciertos. Gema ha disfrutado de seis shows del artista británico durante su gira Love On Tour de este último año. Por supuesto, para cada uno de ellos ha pensado un estilismo diferente: “Intenté llevar los siete colores del arcoíris, pero no en orden”. Para ella, también es una forma de conectar con él y con su entrega a la moda: “Tiene un equipo de estilistas detrás que le ayuda a vestirse de determinada manera para conciertos, eventos… El hecho de que lo hagamos nosotras como fandom, nos conecta con él en otro sentido más allá de la música”.
Para los conciertos del ex One Direction no hay duda: todo el mundo que pueda tiene que ir acorde con la temática de Harry Styles. “Tenemos ya asumido que tenemos que buscar los outfits. Lo bonito es que cada uno lo interpreta de una manera, haces lo que tú quieres. Es como que cada una tiene su esencia, pero al final estamos todas conectadas”, argumenta Gema. Y la realidad va mucho más allá. Gracias al cantante esta joven ha conocido a personas con las que comparte un sentimiento y que la acompañan por Europa para verle juntas. Una de ellas es Sheila, para quien este tipo de dress code significa mucho más: “Me siento libre, bien conmigo misma y segura, porque sé que nadie me va a juzgar ni me va a mirar mal por llevar ropa extravagante”. Ambas lo compran todo en tiendas online como Shein, aunque también tunean estas adquisiciones a su manera, dándoles su toque personal. Tras los conciertos de Harry Styles, el foso y las gradas quedan inundadas de color por las plumas de las boas que se desprenden de los outfits de los asistentes. Un simple complemento que ya se ha convertido en el uniforme oficial de la gira.
Y aunque las redes sociales se han inundado en los últimos meses de este tipo de vídeos en los que los creadores de contenido muestran la ropa elegida para la ocasión, hay muchos artistas que poco a poco están empezando a adoptar estos dress code. Zambra, además de haber asistido a los dos conciertos que Styles ha dado en España este julio, también ha acudido a los dos de The Weeknd, uno de sus artistas favoritos. Y aunque en este evento no está normalizado el ir de una determinada manera, ella ha querido vestir con un matching outfit: “Para mí significa ir acorde con el ambiente que él ha creado en esta parte de la gira. En la primera iba de negro, mucho más oscuro. En Europa va de blanco, que significa más luz y más pureza”. Un cambio que trastocó sus planes y que le hizo tener que cambiar de vestimenta a última hora: “Él lleva una máscara plateada en la cara, así que diseñé algo similar para mí y así adaptarme”. Una de las cosas que más valora de este proceso es la autoestima que le reporta: “Me hace muy feliz pensar un outfit y esperar con emoción a que te llegue. Sientes que todo está más cerca”.
Se está empezando a normalizar que ciertos colores y prendas representen a los artistas y sus seguidores: el artista colombiano Feid, el verde y las gafas de sol. Tini y su todo al rosa. Rosalía y sus motomamis. Beyoncé con la estética galáctica plateada que reinterpretan los asistentes a su gira Renaissance; hasta Kamala Harris, vicepresidenta de EE UU, se vistió de plata para verla. Los conciertos se están convirtiendo en una experiencia más envolvente en las que el espectador está mucho más implicado. Y más allá de una vestimenta a juego con la temática, siempre quedarán las pulseras de la amistad. “Me he comprado ya los abalorios para hacer las mías propias e ir horas antes a las afueras del Bernabéu para intercambiarlas con otros asistentes”, explica Sara. No hace falta comprarse el mejor outfit, una pulsera sencilla ya te hace formar parte de la comunidad.