Madrid construirá una cochera de la EMT en un terreno donde descartó el cantón de Montecarmelo por no ser urbanizable

Los vecinos llevan pidiendo que el proyecto se traslade allí desde que se enteraron de que iban a tenerlo en pleno corazón de su barrio

Recreación digital del nuevo Centro de Operaciones de EMT Madrid en Las Tablas, Madrid, publicado por el Ayuntamiento.Ayuntamiento de Madrid

Los vecinos del barrio madrileño de Montecarmelo, en el distrito de Fuencarral-El Pardo, propusieron al Ayuntamiento de la capital una ubicación alternativa para el cantón de limpieza y la base del Servicio de Limpieza Urgente (Selur) que proyecta construir en pleno corazón de su barrio: un descampado de 40 hectáreas frente a un polígono industrial en Las Tablas, lejos de viviendas y centros educativos. En...

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Los vecinos del barrio madrileño de Montecarmelo, en el distrito de Fuencarral-El Pardo, propusieron al Ayuntamiento de la capital una ubicación alternativa para el cantón de limpieza y la base del Servicio de Limpieza Urgente (Selur) que proyecta construir en pleno corazón de su barrio: un descampado de 40 hectáreas frente a un polígono industrial en Las Tablas, lejos de viviendas y centros educativos. En julio, el concejal delegado de Urbanismo, Borja Carabante, dijo al Defensor del Pueblo que no era posible trasladar el proyecto a esta zona porque la parcela “no existe” y “no hay completa certeza de que vaya a existir”. Es decir, que no era urbanizable. Esto cambió el martes, cuando el pleno del Consistorio aprobó un plan especial para crear siete parcelas en el recinto y una zona verde alrededor. En una de ellas se ubicará el sexto centro de operaciones de la Empresa Municipal de Transporte (EMT) que habrá en la ciudad, una macrocochera que guardará 650 autobuses urbanos.

Las seis parcelas restantes figuran como “servicios colectivos” y su uso todavía no está determinado. Los vecinos de Montecarmelo instaron al Defensor del Pueblo a preguntar a Carabante sobre la posibilidad de buscar un hueco para el cantón en esa zona ―porque las parcelas todavía no estaban creadas―. La respuesta que dio en julio el concejal es que tenía previsto otros usos para esas parcelas cuando las crease: construir una escuela de música y danza, instalaciones deportivas, centros culturales, un centro de mayores, uno ocupacional para empleo y parques.

El descampado está separado de un polígono industrial por la autovía M-603 y limitado al norte por la M-40. Alrededor no hay nada más allá de un cuartel del Ejército y naves industriales. Los vecinos de Montecarmelo ven una “contradicción” en que se proyecten este tipo instalaciones de servicios públicos al ciudadano lejos de una zona residencial y que se planee construir un cantón de limpieza junto a sus casas y colegios. “La política faraónica de urbanismo del PP va más pensada en engrandecer su ego que en servir al ciudadano”, protesta por teléfono un portavoz de la Plataforma No al Cantón.

Los argumentos del Ayuntamiento

Hacer el cambio que piden los vecinos requeriría modificar el proyecto aprobado el martes, pero no sería necesario aprobar un nuevo plan especial porque el suelo de las nuevas parcelas es válido en su denominación para construir el cantón. También lo es en espacio: la base del Selur ocupará 4.200 metros cuadrados y el cantón 5.800. Las nuevas parcelas ―sin contar la ocupada por EMT― sumarán en total más de 40.000 metros cuadrados y, entre ellas, hay una de 10.000 y otra de 8.000.

El delegado de Urbanismo da varios motivos para justificar su decisión en su respuesta al Defensor del Pueblo, que previamente consultó a Carabante instado por los vecinos sobre la posibilidad de trasladar allí el cantón y la base de Selur. El principal argumento del concejal es que no había certeza de que se fuera a aprobar el plan especial para urbanizar la zona, pese a que su partido (PP) tiene mayoría absoluta en el pleno del Ayuntamiento para aprobarlo y ya la tenía en julio cuando hizo esa afirmación.

Carabante también argumentó que las parcelas disponibles tienen la denominación de “Red General de Equipamientos Sociales” y que no están “específicamente” pensadas para un cantón. Añadió que “con independencia de que pudieran o no usarse [...] para estas parcelas se prevén otros usos”. Sin embargo, la licitación actual del suelo permite situar allí el cantón.

Otro argumento es la distancia. Según el pliego del proyecto actual, el cantón debe estar ubicado a menos de 1,5 kilómetros de los barrios donde va a operar: Montecarmelo, Arroyo del Fresno, Mirasierra, Tres Olivos, Las Tablas y Sanchinarro. El concejal explica en la respuesta al Defensor del Pueblo que el recinto de Las Tablas “está a más de 3,5 kilómetros en línea recta de la parcela” de Montecarmelo donde sigue proyectado el cantón.

Las distancias tampoco se cumplen con el proyecto actual. Lo que el concejal omitió en la respuesta al Defensor del Pueblo es que el pliego da una alternativa a la distancia en línea recta ―muy difícil de cumplir en el distrito más grande de Madrid (Fuencarral-El Pardo)―: que el cantón esté a 15 minutos o menos en vehículo motorizado desde la base de Selur hasta cualquier lugar de la zona donde va a operar. Ambas ubicaciones cumplen este requisito.

Los vecinos de Montecarmelo encuentran otro argumento a su favor con esto. Según las previsiones dadas por Google Maps para calcular el tiempo de desplazamiento por GPS, la suma de todos esos tiempos desde Montecarmelo es de 45 minutos, mientras que desde Las Tablas, gracias a la salida directa a dos autopistas ―la M-40 y la M-603―, es de 30.

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