Un hospital privado tarda dos meses en tratar a 12 pacientes de cáncer, lo mismo que La Paz en todo 2022 con una máquina similar

La máquina para el cáncer donada por Amancio Ortega al hospital público madrileño de La Paz, conocida en el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso como “el pepino”, tiene desde junio un rival en la la sanidad privada que la ha adelantado a toda velocidad. Se trata de un aparato de la misma tecnología instalado en el hospital La Milagrosa, en el distrito de Chamberí, que en ...

La máquina para el cáncer donada por Amancio Ortega al hospital público madrileño de La Paz, conocida en el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso como “el pepino”, tiene desde junio un rival en la la sanidad privada que la ha adelantado a toda velocidad. Se trata de un aparato de la misma tecnología instalado en el hospital La Milagrosa, en el distrito de Chamberí, que en sus dos primeros meses de funcionamiento trató a 12 pacientes, según dos personas con conocimiento de los datos internos. Es el mismo número de personas que fueron atendidas en la máquina de La Paz en todo 2022, el primer año natural completo en que estuvo funcionando. El contraste pone de nuevo en evidencia la gestión que el hospital líder del sistema madrileño ha hecho de esta tecnología puntera, que también ha sido implementada de manera más rápida en otros países desarrollados.

El aparato de La Paz, la MR Linac Unity de la empresa sueca Elekta, fue estrenado en diciembre de 2021. Era la primera vez que se usaba en España su tecnología novedosa, que consiste en usar una resonancia magnética para obtener una imagen precisa del área donde se aplica la radioterapia, permitiendo distinguir tejidos sanos y dañados. La competidora de la sanidad privada fue puesta en marcha el 29 de junio por el grupo español VIthas junto con la empresa de origen australiano GenesisCare, que comercializa una máquina de esa misma tecnología llamada MRIdian. GenesisCare en España y el grupo Vithas han declinado hacer comentarios.

Casi dos años después de su puesta en marcha, la MR Linac Unity de La Paz está funcionando a medio gas, sin que se haya producido una esperada ampliación al servicio al turno de tarde, según fuentes internas. En diciembre de 2021, su primer mes de actividad, solo fueron tratados dos pacientes; en 2022 estuvo seis meses paradas y en todo el año fueron atendidas 12 personas; y este 2023 han pasado por el aparato 75 pacientes hasta el 12 de septiembre. En total, son 89 pacientes en casi dos años. Mientras, la máquina del Hospital La Milagrosa ya ha atendido en sus primeros tres meses a 28 personas.

Como contó EL PAÍS, varios hospitales del mundo han difundido cifras de tratamientos muy superiores a las del hospital público madrileño. Por ejemplo, el hospital Gangnam Severance de Seúl, en Corea del Sur, tardó 15 meses en atender a 390 pacientes, y un hospital público de Australia, Austin Health, llegó al paciente número 1.000 después de un año y medio.

La Consejería de Sanidad del Gobierno madrileño, dirigida desde junio por Fátima Matute, defiende que la comparación con otros aparatos no es pertinente. “La máquina de La Milagrosa es de otra marca y no se puede comparar con la nuestra porque es distinta”, dice un portavoz. “Además, la casuística de pacientes es distinta y La Paz es un centro de referencia no solo para asistencia sino también para docencia e investigación”.

Este es un tema sensible para La Paz, que está preparando junto con el fabricante sueco un simposio el 18 de octubre en el que presentarán al sector un balance de su empleo y resultados.

La jefa del servicio de Oncología Radioterápica de La Paz, Rosa Morera, había defendido la baja actividad del primer año alegando que la nueva tecnología requería una curva de aprendizaje, sin embargo, tomó decisiones cuestionadas, como prescindir del médico que se había formado para manejar la MR Linac Unity, incluyendo estancias en Reino Unido. Ante la gerencia del hospital se escudó diciendo que ella había pedido refuerzos médicos al Sermas, pero no los había recibido, según fuentes internas. Sin embargo, este año ha recibido el refuerzo de un segundo médico para la máquina que iba a trabajar en las tardes, pero el turno no se ha extendido a esas horas.

“No nos dan ninguna explicación”, dice una persona de este servicio. “Es una pena porque se podrían beneficiar más pacientes”. El portavoz de la Consejería dice al respecto que el plan de recibir a pacientes en turno de tarde no ha sido descartado.

El servicio también se ha visto afectado por el mal ambiente de trabajo, que fue detectado en por una evaluación de riesgos psicosociales hecha en diciembre de 2022. La sección del sindicato CC OO en La Paz dice que los trabajadores indican que se está reconduciendo la situación, pero la mejora debe ser determinada por una nueva evaluación.

A pesar de este fiasco, la presidenta recibió este lunes un premio por la búsqueda de la excelencia y la calidad en la atención a los pacientes con cáncer. Se lo entregó la Fundación ECO, que no se refirió a los problemas de la puesta en marcha de la MR Linac Unity. Los organizadores destacaron que Ayuso había puesto en marcha en 2020 la Red Oncológica Madrileña, una estructura unificada de recursos humanos y materiales para el tratamiento del cáncer en la región. La idea es ofrecer a cada paciente los mejores recursos disponibles con independencia de dónde se localicen, sin embargo, la MR Linac Unity solo está abierta para pacientes de La Paz, salvo casos muy puntuales, según las fuentes internas consultadas.

Mientras, La Milagrosa está haciendo una labor social al admitir a enfermos de cáncer de páncreas con bajos recursos en su máquina MRidian.

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