La bronca, Cataluña y Bildu vuelven a la Asamblea de Madrid seis meses después
Ayuso se somete de nuevo a una sesión de control que es un anticipo de la legislatura: mismo tono, pero distinto reparto de poder
Ha vuelto la acción a la Asamblea de Madrid, casi seis meses después. El pleno de este jueves es la primera sesión de control al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso desde el 23 de marzo, antes de que se disolviera la cámara para celebrar el 28-M y es un anticipo de lo que se espera: pocos cambios. Continuarán las broncas por la política nacional, “el sanchismo” y los separatismos.
Quedó claro solo quince minutos después de ...
Ha vuelto la acción a la Asamblea de Madrid, casi seis meses después. El pleno de este jueves es la primera sesión de control al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso desde el 23 de marzo, antes de que se disolviera la cámara para celebrar el 28-M y es un anticipo de lo que se espera: pocos cambios. Continuarán las broncas por la política nacional, “el sanchismo” y los separatismos.
Quedó claro solo quince minutos después de que empezara la sesión cuando el portavoz socialista Juan Lobato se levantó para proponerle a la presidenta una oposición con rigor, respeto y seriedad, para luego advertirle de que optaría por la mano dura si volvía a hablar de asuntos nacionales: “Si opta por los numeritos en vez de los madrileños me va a tener con una oposición frontal en este parlamento”.
En su respuesta, Ayuso dejó claro que seguirá siendo Ayuso. “Estamos a dos tardes de que Bildu nos llame terroristas”, le respondió. Y luego añadió que todo lo que pasa en Cataluña afecta a todos los madrileños. “Cuando uno de Extremadura, uno de Parla, uno de Móstoles se va a trabajar a Cataluña es un charnego y va a ser eternamente una persona de segunda”. Y a esto añadió un ataque al Gobierno de Pedro Sánchez por permitir la diversidad lingüística en el Congreso: “¿Cuánto le va a costar a un madrileño tener que estar viendo cómo en el Congreso de los Diputados se rompe la convivencia?... que es lo que se busca con las lenguas cooficiales, algo de lo que ustedes también adjuraban en la pasada legislatura. ¿Cuánto nos va a costar llevar esto porque imagino que ahora llevarán el aranés, el gallego, a Radio Televisión Española, Televisión Española y el 24 Horas, ¿Cuánto dinero nos va a costar todo esto a los de Madrid?”.
El tono es el mismo de siempre, pero lo que sí ha cambiado y mucho es el reparto del poder. Ayuso retorna fortalecida por su primera mayoría absoluta y tiene manos libres para legislar; Mónica García, de Más Madrid, se ha mantenido como líder de la oposición y promete fiscalizar a la presidenta con mano dura; Juan Lobato, del PSOE, busca diferenciarse en la izquierda planteando una oposición constructiva; Rocío Monasterio ha resistido como líder de Vox a pesar de su mal resultado y ahora compite sin la baza de ser necesaria. Además, hay un actor menos que en el período anterior porque Unidas Podemos ha desaparecido de la escena al no haber superado el mínimo necesario de apoyo para entrar en la cámara.
En esta legislatura ya había habido sesiones protocolarias para la investidura de la presidenta o para elegir a los senadores, pero no se habían celebrado plenos ordinarios con la actividad de preguntas y careos entre el Ejecutivo regional y la oposición. Con el pleno de este jueves, la calma que sucedió a las elecciones de mayo se ha roto y regresan los duelos de los jueves, que en la era Ayuso se han convertido en una cita semanal parecida a la Champions. Se cuelan en los trending topics y desatan la guerra entre tribus.
La votación contra la amnistía que borre los delitos del procés tendrá lugar probablemente en el primer pleno de octubre, el jueves 5. El portavoz popular en la Asamblea explicó a los medios que por los tiempos de la cámara madrileña no ha sido posible votarla hoy ni tampoco dará tiempo en la sesión de la semana que viene. El grupo del PP presentó en registro este miércoles esa proposición de ley y otra relacionada, para que el Pleno reconozca que España es una Nación de ciudadanos libres e iguales. El objetivo de estas mociones, que Alberto Núñez Feijóo ha promovido por toda España, es que la oposición se pronuncie, buscando una posible división en las filas que no está claro se produzca en Madrid.
Dos estilos de oposición
La sesión de este jueves también ha servido para ver los dos estilos de la oposición de izquierdas. Si Lobato optó por tender la mano, la líder de Más Madrid arremetió en cuanto acto seguido tuvo el turno de palabra. “Es usted una de las principales perdedoras de las últimas elecciones generales. Es usted de las primeras que se puso a cacarear el ignominioso ‘Que te vote Txapote’ que España ha rechazado mayoritariamente, fue usted la artífice de normalizar y aplaudir esos pactos con Vox que España ha rechazado mayoritariamente y es usted la que puso la primera piedra para ese negacionismo climático y negacionismo machista que España ha rechazado mayoritariamente, así que sí, es usted responsable de que su partido esté aislado y no pueda entenderse con nadie”.
Ayuso le respondió de nuevo centrando la atención en el foco estatal, asociando a García con la líder de la coalición Sumar, Yolanda Díaz: “Ustedes están ahora representados por la señora de la plancha (en referencia a un vídeo viral de la pasada campaña), que va a ver a un prófugo de la Justicia”, le dijo Ayuso.
En su turno de respuesta a Monasterio, la presidenta no perdió oportunidad de recordarle su papel disminuido. Monasterio pedía nuevas bajadas fiscales y la presidenta le contestó que seguirán haciéndolas, entre ellas una rebaja a los inversores extranjeros que Vox rechazó en la legislatura anterior porque consideraba discriminaba a los españoles. “Lo bueno, al menos en esta ocasión, es que su grupo parlamentario no nos lo podrá bloquear”.
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