El Ayuntamiento de Madrid niega a Vox permiso para lanzar su campaña en Vallecas pero la Delegación sí lo autoriza

El representante del Gobierno impone la obligación a los asistentes de mantener la distancia social, usar mascarilla y no salirse de la zona peatonal de la plaza de la Constitución

Rocío Monasterio, candidata de Vox a la presidencia de la Comunidad de Madrid, junto al líder del partido, Santiago Abascal, en una manifestación en Madrid en mayo de 2020.Jaime Villanueva

El Ayuntamiento de Madrid le ha negado a Vox el uso de la plaza de la Constitución, en el distrito de Vallecas, en la que la formación tiene anunciado el lanzamiento de su campaña para las elecciones regionales del 4 de mayo. En un escrito oficial, la Junta municipal ha echado para atrás la pretensión de Vox con el argumento de que no ha comunicado la petición de uso con la antelación debida: un mes. Por tanto, añade, no tienen tiempo suficiente para tramitarla y comunica la...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El Ayuntamiento de Madrid le ha negado a Vox el uso de la plaza de la Constitución, en el distrito de Vallecas, en la que la formación tiene anunciado el lanzamiento de su campaña para las elecciones regionales del 4 de mayo. En un escrito oficial, la Junta municipal ha echado para atrás la pretensión de Vox con el argumento de que no ha comunicado la petición de uso con la antelación debida: un mes. Por tanto, añade, no tienen tiempo suficiente para tramitarla y comunica la “inadmisión a trámite” de la solicitud. En el mismo escrito, al que ha tenido acceso EL PAÍS, la Junta señala que la legislación contempla que ese plazo sea menor, de unos 15 días, “siempre que se justifique la urgencia, por el carácter imprevisto de la actividad, circunstancia que tampoco concurre en el presente caso”. Sin embargo, Vox solicitó el pasado domingo a la Delegación del Gobierno la autorización para el mismo acto y, en este caso, ha recibido el visto bueno, según el escrito firmado por el director de la Unidad de Seguridad Ciudadana, José Luis Correas Díaz.

Fuentes del Ayuntamiento aseguran que, como alternativa, se había propuesto a Vox que solicitara la autorización a la Delegación del Gobierno, como si fuera una concentración. Vox registró dicha petición el mismo domingo e incluyó la petición del acto como una “concentración en la plaza de la Constitución el 7 de abril, entre las 18.30 y las 20.30 horas”.

La Delegación impone además varios requisitos a los asistentes: la obligación de no ocupar la calzada, ni molestar en la entrada de edificios o establecimientos públicos y situarse únicamente en la zona peatonal, mantener la distancia de 1,5 metros entre las personas y llevar obligatoriamente mascarilla.

“Imposible iniciar la tramitación”

“Resulta manifiestamente imposible iniciar la tramitación por no haberse presentado con el tiempo suficiente para ello”, señala el documento de la Junta de distrito, que recalca que Vox hizo la petición el pasado domingo, 4 de abril, apenas tres días antes de la convocatoria. Además, la Junta señala que contra esta decisión cabe recurso: de reposición, en el plazo de un mes, y en el contencioso-administrativo, en el plazo de dos meses.

La Junta justifica también que la decisión corresponde al concejal presidente del distrito, en este caso Borja Fanjul Fernández-Pita (PP), pero que es obligatoria la autorización de la Oficina de Actos en Vía Pública con un “informe previo, preceptivo y vinculante”. Este informe es el que no es posible tramitar en el plazo señalado.

La Plaza de la Constitución del barrio madrileño de Vallecas, donde Vox tenía previsto lanzar este miércoles su campaña para las elecciones autonómicas del 4 de mayo, se conoce popularmente como la “Plaza Roja”. Por el color de sus adoquines, pero también porque es escenario frecuente de manifestaciones.

Vox ha elegido como objetivo prioritario de su campaña el cinturón rojo, que pretende repintar de verde; buscando el vuelco electoral que el Frente Nacional de Le Pen consiguió en cotos tradicionales del Partido Comunista francés. Vallecas es, además, la patria chica de Pablo Iglesias, que el líder de Podemos, según repiten los responsables del partido ultra, “abandonó y traicionó” para mudarse a su chalé de Galapagar. Vox quiere hacer del exvicepresidente su principal antagonista.

Sobre la firma

Más información

Archivado En