Comienza el desmontaje del ramal de Príncipe de Vergara
Los trabajos forman parte de las obras para desmontar el 'scalextric' de Joaquín Costa debido al riesgo de derrumbe
El Ayuntamiento de Madrid ha comenzado los trabajos de desmontaje del ramal del puente de Joaquín Costa que discurre por la calle Príncipe de Vergara dentro de las obras de demolición del ‘scalextric’, que comenzaron el pasado 20 de julio y terminarán en noviembre, debido al peligro de derrumbe de su estructura. El gobierno municipal ha señalado este viernes en un comunicado que los trabajos comenzaron este jueves, y explica que c...
El Ayuntamiento de Madrid ha comenzado los trabajos de desmontaje del ramal del puente de Joaquín Costa que discurre por la calle Príncipe de Vergara dentro de las obras de demolición del ‘scalextric’, que comenzaron el pasado 20 de julio y terminarán en noviembre, debido al peligro de derrumbe de su estructura. El gobierno municipal ha señalado este viernes en un comunicado que los trabajos comenzaron este jueves, y explica que con el desmontaje de este ramal se permitirá habilitar a finales de agosto o principios de septiembre un nuevo paso para peatones que dé continuidad al itinerario peatonal de la calle Francisco Silvela sin necesidad de rodear la ocupación de Príncipe de Vergara.
El 7 de agosto ya se puso en pie un primer paso transversal situado a la altura del número 112 de Francisco Silvela. Para adecuar el tráfico, la calle Velázquez pasó a ser de doble sentido el pasado 20 de julio. También se desvía parte del tráfico hacia la calle de Diego de León. Paralelamente, se siguen llevando a cabo las labores de cimbrado de todo el ‘scalextric', añade el Ayuntamiento. Estos trabajos consisten en dotar al puente de una estructura auxiliar que soporte provisionalmente su peso para después proceder a trocearlo.
El puente de Joaquín Costa se cerró al tráfico de vehículos y peatones el pasado 10 de julio, cuando el Ayuntamiento recibió un informe técnico de análisis de la situación estructural de este puente en el que se concluía que la estructura es encuentra en riesgo de derrumbe y señalaba su demolición como único escenario posible. Las labores de desmontaje de la estructura, adjudicadas a la empresa de construcción Dragados, que se han puesto en marcha siguiendo el procedimiento de urgencia, tienen en total una duración estimada de cuatro meses y en ellas se invertirá un presupuesto que asciende a 9,3 millones de euros.