Gabilondo se reivindica frente a Ayuso: “A estas elecciones me presento yo”

Ángel Gabilondo se ha reivindicado en el primer acto de campaña ante la constante búsqueda de Isabel Díaz Ayuso del cuerpo a cuerpo con el presidente del Gobierno. “Pedro Sánchez es Pedro Sánchez y yo soy Ángel Gabilondo. Y a estas elecciones me presento yo”, ha zanjado el vencedor de las elecciones...

Ángel Gabilondo se ha reivindicado en el primer acto de campaña ante la constante búsqueda de Isabel Díaz Ayuso del cuerpo a cuerpo con el presidente del Gobierno. “Pedro Sánchez es Pedro Sánchez y yo soy Ángel Gabilondo. Y a estas elecciones me presento yo”, ha zanjado el vencedor de las elecciones de 2019. Para encontrar un precedente había que remontarse más de tres décadas: los socialistas no ganaban las elecciones autonómicas en Madrid desde 1987. “Ayuso echa las culpas de sus errores a los demás. Solo tiene una palabra en su boca: Sánchez. ¿El virus? Sánchez. ¿Toni Cantó? Sánchez. Definitivamente, no puede vivir sin mencionar a Sánchez, ni parece tener más proyecto que la confrontación con el Gobierno de España”, ha incidido.

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A su vez, Sánchez ha ignorado a Ayuso en su primer mitin de campaña, en el que ha animado a la participación el 4-M, con especial atención al electorado más joven para impedir que Madrid sea, según ha mantenido, la primera región de la UE con un Gobierno con la ultraderecha dentro o tutelado por ella. “Los progresistas lo tenemos al alcance la mano. Votemos, votemos y votemos para que gane Madrid”, ha instado a la participación del electorado de izquierdas, mucho menos movilizado que el conservador.

“Lo que nos diferencia a Ayuso y a mí es que mi palabra es Madrid”, ha apostillado Gabilondo mientras enumeraba algunas de las principales medidas del programa del PSOE para los dos años que restan de legislatura. Después habrá de nuevo elecciones. El candidato socialista ha recordado que Madrid afronta la pandemia sin unos presupuestos actualizados —los últimos se aprobaron para 2019 y desde entonces están prorrogados—, sufre la mayor presión hospitalaria por la covid y, pese a ser la locomotora económica del país, está a la cola en inversión en educación y sanidad pública. “Es el primer día de campaña de unas elecciones provocadas por un Gobierno fallido. En esta encrucijada les pido a todos los madrileños progresistas y demócratas que nos movilicemos. Os pido que nos demos esta oportunidad conjuntamente, que lo hagamos por todos nosotros. Os pido que lo hagáis por Madrid”, ha enfatizado, para poner fin al “proceso de degradación social e institucional, inequidad, corrupción y deriva extremista tras 26 años de gobiernos del PP”.

Frente a las encuestas que pronostican que el PSOE podría incluso retroceder, Gabilondo ha hecho hincapié en la victoria de 2019. “Hace dos años la sociedad madrileña expresó su voluntad de cambio. No fue posible porque un partido que se decía de centro apoyó a los herederos de ese modelo corrupto del PP en Madrid. El primer responsable es Ciudadanos”, ha remarcado. A diferencia de las elecciones catalanas, en las que el PSC se impuso tras atraer a buena parte del electorado de Cs, convencido por el proyecto alternativo de Salvador Illa frente al independentismo, los socialistas no están consiguiendo convencer al grueso de votantes de Cs. La principal razón es que, a diferencia de lo que sucedía en Cataluña, en Madrid la mayoría son antiguos votantes del PP. Pero Gabilondo se afana en su discurso moderado, como presidente potencial de una “izquierda de Gobierno sin extremismos”, en un intento de arañar el voto de los recelosos con Ayuso.

Mientras la candidata del PP ha convertido la confrontación con La Moncloa en una de las señas de identidad de su mandato, Sánchez ha evitado el choque directo. Esa labor se la ha dejado en exclusiva a Gabilondo. El presidente ni siquiera ha mencionado a Ayuso. En lo que se ha afanado ha sido en contraponer la gestión de su Ejecutivo durante la pandemia: Sánchez ha destacado que España es el cuarto país de la UE en dosis administradas y en dosis por 100 habitantes supera a Francia, Alemania e Italia. “El final está más cerca, lo tenemos al doblar de la esquina, después de la pandemia Madrid tendrá que elegir y se abrirá un paisaje nuevo: el 4 de mayo se elige el camino de la recuperación justa o el del Gobierno de la plaza de Colon, que significa exclusión, ultraderecha y corrupción dos años más”, ha incidido Sánchez.

A lo largo de su intervención, de nuevo un mitin telemático en Ferraz en fin de semana —en la precampaña ha participado en tres actos desde la sede socialista—, Sánchez ha reprochado la falta de apoyo del PP en la pandemia, en la que el partido de Pablo Casado votó en contra de las dos últimas prórrogas del estado de alarma en la primera ola. Los populares se abstuvieron en la aprobación del estado de alarma vigente que finaliza el 9 de mayo. El Gobierno no tiene la intención de prorrogarlo, pese a las protestas de todos los barones del PP salvo Ayuso. “Lo que define al PSOE como la izquierda de Gobierno es el hacer. Y si algo se ha hecho es afrontar el mayor reto sanitario y económico en 100 años. Lo hemos hecho solos en un momento crítico de la historia de España sin el apoyo del PP”, ha incidido. “El PP ha intrigado en Europa para que España no recibiera un euro de los fondos. Con cualquier pretexto. Dicen que aman mucho a España, pero solo si gobiernan. Y si no su máxima es que España se hunda para regresar y reanudar su pillaje”, ha sentenciado Sánchez.

“Estas elecciones son un capricho. Ayuso dijo de las elecciones catalanas: ‘Si yo convocara elecciones en pandemia me llamarían insensata y tipa peligrosa”, ha recordado Irene Lozano. “Tenemos una presidencia que dice astracanadas como que ya habría vacunado a toda la población cuando el país que está más avanzado, Israel, lo ha hecho con la mitad de la población. Sus formas consisten en el negacionismo, los bulos… Ya lo hemos visto en Cataluña. Quiere otro procés en Madrid, enfrentar a los madrileños con el resto de España. Madrid tiene que ser el pilar fundamental de la transformación de España, no podemos tener dos comunidades como Madrid y Cataluña paralizadas”, ha concluido la número cinco de la lista.

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