RTVE rechaza las acusaciones de González Pons y defiende su “neutralidad” en los procesos electorales

La celebración de los debates electorales ha enconado las ya de por sí tensas relaciones entre el PP y la radiotelevisión pública. Durante sus intervenciones parlamentarias en la Comisión de Control de RTVE, los populares cuestionado sistemáticamente el trabajo periodístico de TVE y ha acusado a la cadena de manipular a favor del Gobierno. Y esa es la estela que ha seguido el vicesecretario general del PP, Esteban González Pons, al denunciar la falta de “neutralidad” y “pluralismo” del ente p...

La celebración de los debates electorales ha enconado las ya de por sí tensas relaciones entre el PP y la radiotelevisión pública. Durante sus intervenciones parlamentarias en la Comisión de Control de RTVE, los populares cuestionado sistemáticamente el trabajo periodístico de TVE y ha acusado a la cadena de manipular a favor del Gobierno. Y esa es la estela que ha seguido el vicesecretario general del PP, Esteban González Pons, al denunciar la falta de “neutralidad” y “pluralismo” del ente público en un correo electrónico remitido a su presidenta, Elena Sánchez, en el que ha sostenido que los socialistas están realizando una “una burda utilización” de la cadena estatal. En respuesta a la misiva del dirigente popular, la presidencia de RTVE ha asegurado este miércoles que la televisión pública “no solo es neutral, sino plural esencialmente y, sobre todo, independiente profesionalmente”. Y añade que su actuación no tenido reproche alguno por parte de los organismos encargados de velar por la limpieza de los procesos electorales.

Dentro de su papel institucional, la televisión pública ofreció a los partidos políticos la celebración de tres debates electorales ante las legislativas del 23 de julio, cuya señal se distribuiría a todos los medios interesados. Este calendario incluía un cara a cara entre los candidatos a la presidencia del Gobierno del PSOE, Pedro Sánchez, y del PP, Alberto Núñez Feijóo, el lunes 10 de julio, coincidiendo con el inicio de la campaña. Para el 13 de julio planteaba un debate a siete con los portavoces de siete formaciones con grupo parlamentario propio en el Congreso: PSOE, PP, Vox, Unidas Podemos, ERC, PNV y EH Bildu. Y para el día 17 proponía una cita con los cabeza de lista de las cuatro formaciones con más representación en el Congreso de los Diputados: PSOE, PP, Vox y Unidas Podemos. No se trataba de fechas cerradas, sino que estaban abiertas a modificaciones para ajustar las agendas de los distintos partidos.

El plan del PP era muy distinto. Su estrategia pasa por controlar la exposición mediática de su líder y celebrar, por el momento, un único duelo televisivo Sánchez-Feijóo, en los primeros días de la campaña y en el plató de Atresmedia, que podría estar moderado, por los periodistas Vicente Vallés y Ana Pastor, veteranos moderadores en estos formatos. Los populares han pedido también a este medio de comunicación privado la celebración de un debate a siete en que estuvieran presentes los líderes de PSOE, PP, Vox, Sumar, ERC, PNV y Bildu. Atresmedia no ha confirmado su celebración. Se ha limitado a decir que “toma nota”. Además del cara a cara, el grupo audiovisual ofreció un encuentro a cuatro, con PSOE, PP, Vox y Sumar.

Sobre la mesa, los principales partidos tienen también la oferta de Mediaset y del Grupo PRISA (editor de EL PAÍS) para un cara a cara Sánchez-Feijóo. Mediasset asegura que no ha recibido respuesta ni en un sentido ni en otro, y mantiene que esta es la única proposición que ha remitido a los partidos. “No se ha hablado en ningún momento de un debate a siete”, dicen fuentes de Telecinco. La cadena, no obstante, incluirá en su programación entrevistas con los principales líderes. Para el próximo día 4 ha cerrado la participación de Pedro Sánchez en El programa de Ana Rosa. El jefe del Ejecutivo continúa así la gira mediática emprendida hace una semana, que ha recalado ya en El Intermedio, Más de uno, Lo de Évole y El Hormiguero, que este martes rozó los tres millones de audiencia (22,8% de cuota de pantalla) y entró en el top de encuentros políticos del espacio, con el tercer mejor dato tras Santiago Abascal e Isabel Díaz Ayuso.

Para avanzar en la puesta en marcha de los debates en TVE, su director de informativos, Josep Vilar, se puso en contacto con todos los partidos para conocer su disponibilidad en los diferentes formatos. La cadena ha explicado que “en el caso del llamado cara a cara, se ha dirigido al PP y al PSOE con idéntica voluntad de servicio público. La insistencia y la premura con la que se ha actuado viene determinada por la complejidad de organización que requiere la emisión de un debate de estas características”. Y ante las críticas del PP añade que “RTVE respeta las estrategias electorales de los partidos políticos. Es desconocer la naturaleza de la televisión pública estatal presumir la intención de interferir en las negociaciones que tienen PSOE y PP para la gestión del debate cara a cara, como se desprende del prejuicioso comunicado del señor González Pons”.

El dirigente popular se negó a acudir a una reunión convocada por RTVE para este lunes. “¿Por qué tendríamos que obedecer una orden por escrito de los informativos de RTVE? Si el PSOE quiere negociar con nosotros, sabe dónde encontrarnos, no necesita que los informativos de RTVE hablen en su lugar”, expuso en la nota remitida la presidenta del ente público. La corporación lamenta que no se haya entendido una iniciativa periodística “que surge de su indudable vocación de servicio público ante un acontecimiento de interés general como son las elecciones generales”.

A su vez, los consejos de Informativos de RTVE han rechazado “categóricamente” los argumentos esgrimidos sobre la falta de profesionalidad o neutralidad de la corporación como “excusas” para rechazar las propuestas de debate. Y han recalcado que la labor que desempeñan los periodistas es “garantía de cumplimiento de los deberes de independencia, rigor y veracidad”.

Recibe cada tarde el boletín Diario de elecciones, con el análisis de Ricardo de Querol, subdirector, y Luis Barbero, redactor jefe de edición.