Torsos desnudos para recibir a la extrema derecha
Una acción de protesta del grupo Femen contra Vox es una de las anécdotas de una jornada en la que el ‘expresident’ de la Generalitat José Montilla participa como presidente de su mesa electoral
En la jornada electoral en Cataluña está habiendo sucesos curiosos e inesperados. Los votantes de un centro electoral han sido recibidos en una mesa por un expresidente de la Generalitat, José Montilla. Cinco activistas del grupo feminista Femen se han descubierto el torso para manifestarse contra el candidato de Vox, Ignacio Garriga. En otro colegio, un presidente de mesa se ha disfrazado de payaso.
De president del Govern, a presidente de mesa. Pocas veces el servicio público había tenido una imagen que reflejara tan bien su significado: un ...
En la jornada electoral en Cataluña está habiendo sucesos curiosos e inesperados. Los votantes de un centro electoral han sido recibidos en una mesa por un expresidente de la Generalitat, José Montilla. Cinco activistas del grupo feminista Femen se han descubierto el torso para manifestarse contra el candidato de Vox, Ignacio Garriga. En otro colegio, un presidente de mesa se ha disfrazado de payaso.
De president del Govern, a presidente de mesa. Pocas veces el servicio público había tenido una imagen que reflejara tan bien su significado: un expresident de la Generalitat pidiendo los DNI a los votantes para confirmar su identidad en una mesa electoral. Ha ocurrido en Sant Joan Despí (Barcelona) y el protagonista ha sido José Montilla. El antiguo mandatario ha sido designado como suplente en un centro de votación de su localidad y ha ocupado finalmente la vacante del presidente titular.
Las Femen, contra Vox. Ni la lluvia ha podido parar a las cinco activistas del colectivo Femen que se han concentrado en la zona alta de Barcelona contra el candidato de Vox, Ignacio Garriga, en su colegio electoral. Con el torso desnudo, con lemas escritos sobre su piel, las mujeres han proclamado: “No es patriotismo, es fascismo” y “Voto a Garriga, voto fascista”. Los Mossos han formado un cordón policial y finalmente han desalojado al grupo. Garriga ha catalogado la acción como “turba violenta”.
A falta de bandejas, hojas de papel. Cuando faltan los recursos, surge el ingenio. En el instituto Caterina Albert de Barcelona faltaban las bandejas de plástico para que los electores depositen su documento de identidad y evitar así que los miembros de las mesas los toquen. En este centro, los votantes se han encontrado hojas de papel con una consigna escrita: “DNI, aquí”. Y sobre él, los ponían para votar.
Elecciones carnavalescas. Si se tienen ganas de fiesta, no hay elecciones que valgan. Un elector que ha depositado su voto en la escuela Ramon y Cajal de Terrassa (Barcelona) lo ha hecho vestido de Batman y en Vilanova i la Geltrú, algunos vecinos se han vestido como si participaran en las tradicionales comparsas que se celebran en estas fechas en la localidad.
Bienvenidos al circo. No siempre se vota al gusto de todos. Luigi, vecino de Tarragona, considera que estas elecciones en plena pandemia “son un circo”. Y como tal, se ha presentado a su mesa electoral vestido de payaso, según ha avanzado RAC-1. “Esto es un circo. Es lo que pensé cuando me llegó la carta”, explicó.
Sin fluidos en los sobres. La norma era clara en l’Escola Kotska, cerca del Park Güell: “Si llevan el sobre cerrado con saliva desde casa, no sirve. Tendrán que volver a llenar el sobre en los espacios habilitados en el interior”. Un miembro de la organización de la jornada electoral en el centro transmitía la consigna a todos los votantes para evitar que a la hora de abrir los sobres, los miembros de las mesas tocaran los fluidos ajenos, con el riesgo de contagio que conlleva. En este mismo centro, una mujer designada en una mesa electoral se ha presentado en silla de ruedas porque había tenido un accidente la noche anterior y no había podido presentar alegaciones. Su estado físico y el informe médico le han servido para volver a casa.
Votaciones en el nombre del padre. Algunos votantes de Súria (Barcelona) se han aproximado este domingo más a la fe cristiana que en toda su vida. La localidad ha habilitado la iglesia del pueblo como punto de votación para deslocalizar los tradicionales colegios electorales y evitar masificaciones. Los electores del pueblo han tenido que seguir un recorrido de seguridad que pasaba por delante de la tradicional cruz cristiana y han votado bajo la mirada de algunas figuras religiosas. Tras el recuento, los partidos políticos esperan tocar el cielo.
Un Camp Nou de todos los colores. El estadio del FC Barcelona ha abierto sus puertas a los electores de todos los equipos posibles. Las instalaciones azulgranas se han habilitado como punto de votación, y algunos votantes han visitado el estadio rival. “A mí me hace ilusión venir a votar aquí, pero acabo de hablar con uno que es del Real Madrid que no le hacía tanta”, comentó a Efe un votante del barrio de Les Corts de Barcelona que fue al auditorio azulgrana.