La Generalitat Valenciana sostiene ante la jueza que Mazón no estaba en el Cecopi cuando se lanzó la alerta de las 20.11
El presidente había sostenido hasta ahora que se había incorporado a la reunión “a partir de las siete”
El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, no había llegado al Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi) a la hora en que se envió la alerta por la dana a la población a las 20.11 del 29 de octubre, según la respuesta que ha enviado el Gobierno valenciano al requerimiento de la jueza que investiga la gestión de la catástrofe. La jueza había reclamado al Consell que informara “de forma sucinta si concurrió alguna otra autoridad” al Cecopi antes del envío de la alerta masiva a los móviles y al margen de los convocados desde el primer momento para las cinco de la tarde. La Generalitat basa su respuesta, a la que ha tenido acceso Efe, en las grabaciones de las cámaras de seguridad del edificio donde se celebran las reuniones del Cecopi.
Lejos de aclarar cómo se desarrolló la gestión de la dana aquel 29 de octubre, cuatro meses después, las dudas no hacen más que aumentar. Y es precisamente el jefe del Gobierno valenciano el que parece empeñado en no favorecer la transparencia sobre la información. Una de las principales incógnitas es por qué se mandó la alerta masiva a los móviles tan tarde, a las 20.11 horas, cuando decenas de pueblos ya estaban inundados y los desaparecidos eran ya incontables, más de 12 horas después de la se decretara un aviso rojo por lluvias torrenciales. La iniciativa se adoptó desde el Cecopi, el órgano de coordinación de la emergencia. Fuentes de la Generalitat aseguraron que el presidente, Carlos Mazón, llegó a la reunión “pasadas las siete de la tarde”. Él mismo dijo el día 9 de noviembre que se incorporó “personalmente” a partir de las siete.
Mazón nunca había negado estar presente en el momento del envío de la alerta. Hasta ahora, solo había tratado de zafarse de la acusación de no estar donde tenía que estar en las horas críticas de las lluvias torrenciales. Ahora, de la respuesta a la jueza, se conoce que se puso al frente de la emergencia incluso más tarde de lo que había señalado.
No es el primer ejercicio de confusión que Carlos Mazón hace respecto a ese día, con una agenda que no consideró que tuviera que modificar pese a que durante la mañana varios municipios del interior de la provincia de Valencia ya estaban inundados. Mazón se fue a comer al restaurante El Ventorro con una periodista ante la que no mostró ninguna preocupación por lo que estaba pasando. No lo reconoció hasta más de diez días después de la dana y no fue hasta casi dos meses después, y para evitar facilitar la factura del almuerzo, cuando dijo haberse sentado a la mesa como líder del PP y no como presidente de la Generalitat.
En su comparecencia en las Cortes Valencianas, a donde acudió para explicar la gestión de la dana, dijo que se desplazó al Centro de Coordinación de Emergencias “cuando fui advertido de que la situación en la presa de Forata se agravaba”. No especificó cuándo pero sí dijo que el camino “no fue fácil”. “El mal tiempo, como es normal en estas situaciones, produjo gran densidad de tráfico y alargó el trayecto hasta que llegué a L’Eliana con el Cecopi trabajando a pleno rendimiento”. Ni en esta ni en las muchas otras ocasiones que ha hablado ante el parlamento valenciano Carlos Mazón ha dicho que no presenció el envío de la alerta.
La respuesta a la jueza se ha producido además después de que el propio Mazón, aunque sin ningún tipo de certificado, asegurara, este lunes, que llamó por teléfono a la consejera de Emergencias, Salomé Pradas, que dirigía el Cecopi, a las 19.43 horas, de lo que se deduce que aún no estaba con ella.
La Generalitat sigue sin facilitar la hora a la que se produjo la llegada. En el escrito a la causa judicial indica que una vez realizado “el visionado de las imágenes tomadas por distintas cámaras del sistema de videovigilancia”, desde las 16.00 hasta las 20.11, y “conforme la certificación emitida por el funcionario responsable de seguridad”, se constata la entrada de dos únicas autoridades, el presidente de la Diputación, Vicente Mompó, y el diputado de Medio Ambiente, Prevención de Riesgos y Desarrollo Rural.
Ante la información aportada este martes a la jueza -en la que la Generalitat ha admitido que el presidente del Consell, Carlos Mazón, no se encontraba en el Cecopi en el momento en el que se mandó la alerta masiva a los móviles el día de la dana-, la portavoz del Consell, Susana Camarero, se ha negado a decir a qué hora llegó el jefe del Gobierno Valenciano al órgano de coordinación de la emergencia. Tampoco ha explicado qué hizo Mazón aquella tarde del 29 de octubre, después de que este martes el propio presidente dijera que acudió a su despacho en el Palau de la Generalitat después de comer en el restaurante el Ventorro con una periodista. Susana Camarero se ha limitado a cargar contra la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, que dijo haber visto a Mazón cuando se envió la alerta. Pese a que las palabras de Bernabé fueron ambiguas (“yo cuando vi al president de la Generalitat es cuando se mandó el ES-Alert” y “yo no vi al señor Mazón hasta que no mandaron el ES-Alert”, dijo) la portavoz del Consell ha tildado de mentirosa a la delegada en varias ocasiones, pero no ha considerado de la misma manera a Mazón, que afirmó haber llegado al Cecopi “después de las siete”. “El presidente llegó después de las siete porque llegó después de las ocho”, ha llegado a decir como si de un juego de palabras se tratara.
En una tensa comparecencia en la que la portavoz del Consell ha dicho que Carlos Mazón no ha cambiado su versión en ningún momento (tampoco por contestar en las Cortes valencianas que no podía informar de las llamadas realizadas ese día y después contarlas en el hotel Ritz de Madrid), a la pregunta de si, dado que llegó después de que se mandara la alerta, Mazón no tuvo nada que ver en el envío del aviso masivo a los móviles de la población, la portavoz del Gobierno valenciano ha dicho: “Esa no es la pregunta que ha hecho la jueza. No tengo nada más que decir”.
Fuentes socialistas indican que el interés de Mazón por alejarse ahora del momento del envío de la alerta masiva es un intento de escapada judicial, aunque políticamente suponga que incluso se pusiera al frente de la emergencia más tarde de lo que su entorno había señalado inicialmente. El plan de inundaciones de la Generalitat Valenciana sostiene que el director “será el consejero competente en materia de Protección Civil y Emergencias, que asumirá las funciones de Mando Único”. No contempla qué pasa en el caso de que el presidente de la Generalitat se incorpore al Cecopi, pero el artículo 28 del Estatuto de autonomía de la Comunidad Valenciana y el 1 de la Ley del Consell sostienen que el presidente de la Generalitat “dirige la acción del Consell y coordina las funciones de este”.
De hecho, cada vez que el jefe del Gobierno valenciano ha acudido a las reuniones de este órgano se ha sentado en el centro de todos, presidiendo el cónclave. “Hasta ahora creía que le convenía estar pronto para demostrar que lo controlaba todo. Ahora, tarde para demostrar que no controlaba nada”, sostienen fuentes jurídicas que señalan que, en cualquier caso, será la jueza la que dirima si Mazón fue el responsable de las decisiones del Cecopi.
Al respecto de la ausencia de Mazón hasta después del envío de la alerta, la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, ha reivindicado “más que nunca” la labor de todos los funcionarios de su ministerio, de la AEMET y de la Confederación Hidrográfica del Júcar. “Hemos visto claramente que no falló la ciencia, que no fallaron los técnicos. Lo que falló es el sistema de alertas y la responsabilidad de la Generalitat Valenciana”, ha afirmado. Sobre las contradicciones del presidente valenciano, Aagesen le ha instado a aclarar qué hizo el 29 de octubre “porque evidentemente va cambiando de relato en función de los días”. Informa José Marcos.