La insuficiente inversión en aires acondicionados en los institutos: “Los alumnos no lo notarán”

La Generalitat ha climatizado un espacio común de 100 centros este curso y lo hará en 100 más el próximo, mientras Barcelona lo extiende a las aulas de todas las escuelas

Operarios instalan el aire acondicionado en la escuela Els Llorers de Barcelona, el pasado jueves.Albert Garcia

La necesidad de climatizar los centros educativos es cada vez más acuciante, especialmente tras los episodios vividos en 2022 y con la previsión de que las olas de calor sean más habituales. Pero la magnitud de los proyectos para acondicionar escuelas e institutos varía ostensiblemente según la administración que lo gestione. El Departamento de Educación ha instalado este curso aire acondicionado en 100 centros, aunque solo en un espacio común, y de cara al próximo lo hará en 100 más. El Ayuntamiento de Barcelona, por su parte, lo extenderá a las aulas de todas las escuelas. El resto de municipios decidirá qué hacer, según prioridades y recursos económicos.

Educación presentó en mayo del año pasado su Plan de adecuación al cambio climático, que como medida estrella incluía la instalación de aire acondicionado en un centenar de centros de su titularidad, entre los cuales se incluían 71 institutos, 20 guarderías y 11 escuelas de educación especial, lo que ha tenido un coste de cinco millones de euros. Pero el aparato se coloca en un espacio común, como el comedor, el gimnasio, la biblioteca o un aula polivalente. Ello ha generado una satisfacción contenida en los centros beneficiarios, que ven que la medida no dará la respuesta que esperan.

El Bisbe Berenguer de L’Hospitalet de Llobregat es uno de los institutos donde se ha instalado el aire; en su caso, eligieron la biblioteca porque es una sala grande que usan para hacer los claustros, charlas, reuniones con familias… Aunque tienen el sistema desde el inicio de curso, solo lo han usado puntualmente en los últimos compases, principalmente porque durante los meses de mayo y junio las temperaturas se han contenido bastante y no ha habido ninguna ola de calor. Pero en vistas a épocas más duras, el centro ve la medida insuficiente. “En un edificio con 40 espacios, poner aire acondicionado en un aula no ha tenido impacto. Los alumnos no lo notarán”, aseguran desde el equipo directivo, que ven la medida como algo “anecdótico” debido al “revuelo social que se creó con las olas de calor” de hace un par de años.

Una situación parecida se ha vivido en el instituto Mediterránea de Castelldefels. Optaron por instalar el aire en la sala de actos, por ser la más grande y peor climatizada. “Lo hemos usado poco, pero donde están los alumnos durante ocho horas es en las aulas, sería necesario climatizar todos los espacios, aunque sea con ventiladores”, reclama el director Ferran Sanz. Precisamente, el centro ha recibido también 40 ventiladores de pie. “Pero son muy baratos y de poca calidad, son insuficientes”, añade.

En el instituto La Mitjana de Lleida, como no tienen grandes espacios, se ha instalado el aire en ocho aulas, las que sufren más las altas temperaturas. Aquí no han usado todavía la nueva instalación, pero no por falta de ganas, sino porque las obras se iniciaron hace pocos meses y todavía no están acabadas, así que esperan poderlo estrenar en septiembre.

De hecho, según Educación, del centenar de instalaciones previstas, tres todavía están en ejecución y 10 se llevarán a cabo este verano. También a partir de ahora y durante el próximo curso, se seguirá con la climatización de un centenar de centros más, con un coste de millones. El objetivo es llegar a 800 centros en un periodo de cinco años.

Aulas frescas en Barcelona

Esta misma fecha, 2029, es la que se ha fijado el Ayuntamiento de Barcelona para poner aire acondicionado en sus escuelas (el mantenimiento de los colegios es competencia municipal). Pero a diferencia de los institutos, el proyecto barcelonés -bautizado como Plan Clima Escuela- es mucho más ambicioso y aquí la instalación se hace en todas las aulas del centro. En este caso, se aprovechan las obras para retirar la calefacción de gas y se instala un sistema de aerotermia, alimentado con placas solares, que proporcionará aire caliente y frío. El Ayuntamiento invertirá un total de 100 millones -unos fondos que provienen de la tasa turística- para llegar a 170 centros en cinco años (149 escuelas de primaria, dos de educación especial, tres institutos de titularidad municipal y 16 instituto escuelas). De momento, ha empezado ya este verano con un grupo de 24 centros, en los que se invertirá casi 14 millones.

Pocos municipios, por no decir ninguno, replicará el ejemplo de Barcelona, sea por falta de capacidad económica o por decisión política, ya que muchos ayuntamientos consideran que obras de esta magnitud son competencia de la Generalitat, así que priorizan la instalación en centros de titularidad municipal, como guarderías o escuelas de educación especial.

Puedes seguir a EL PAÍS Catalunya en Facebook y X, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal

Más información

Archivado En